Me enamore de mi esposa - Adapt Juliantina G!P

Capítulo 41

Ya habían pasado las dos semanas que el Dr. Noé le había dado a Valentina para volver a su casa, entre Elena, Lupita y Juliana estaban recogiendo las cosas de Valentina ya que la morena no quería esperar más para llevarla a su casa. Noé estuvo a punto de darle otra semana más a Valentina para quedarse pero sería evidente que algo pasaba, solo quería pasar más tiempo con Juliana pero sabía que a partir de ese momento no la volvería a ver, a menos que tuviera que revisar a Valentina como era de esperarse, pero solo sería por poco tiempo.

Era evidente que aún no podía olvidarla y lo más frustrante era que, como olvidar a alguien a la que nunca tuvo, además que notaba a Valentina muy a la defensiva con él era obvio que la chica sospechaba. Resignado entro a aquella habitación con la alta firmada para que la rubia se marchara. Las vio besarse apasionadamente sobre la cama, sintió un vacío en su estómago y más al ver donde Valentina tenía una de sus manos, justo dentro del pantalón de la morena quien le acariciaba uno de los senos sin despegar sus bocas.

Quedó petrificado al verlas así solo unos segundos por lo que al reaccionar retrocedió y cerro con cuidado la puerta. Su corazón latía con fuerzas y sus mejillas se sonrojaron, nunca espero verlas así pero era lógico, estaban casadas y luego de más de 7 meses de abstinencia era obvio que no esperaban para estar juntas. Se armó de todo la fuerza de voluntad que tenía y toco la puerta escuchado un pequeño gemido, luego una voz ente cortada.

Es...pe...re...un...mo...men...to - luego se escuchó un movimiento rápido y varias cosas caerse, "rayos" escucho la voz de Juliana y más movimientos - entre - dijo luego de un par de minutos. Noé al entrar se sorprendió de ver las caras de susto de las chicas eso lo hizo sonreír en su interior, parecían dos adolescentes siendo sorprendidas por su padre.

—Buenas tardes — dijo el doctor sonriendo y viendo a Juliana luego vio a Valentina que lo miro de mala manera y su sonrisa se borró.

—Buenas tardes, será que ya puedo irme — dijo Valentina en tono molesto.

—Val!! — le dijo Juliana sonriendo pero con un poquito de reproche.

—Es que ya quiero volver a casa — dijo en tono infantil, eso les causo gracia tanto a Juliana como al doctor que sonrieron.

—Es justo por eso que he venido — dijo muy sereno, a pesar de haberse enamorado de Juliana como médico estaba feliz de que ayudar a alguien a retomar su vida, por eso se había vuelto doctor para curar y ayudar a otros. Al recordar eso se acercó a Valentina que lo vio de una manera retadora — aquí tiene el alta Sra. Valdés ya puede volver a casa — le dijo sonriéndole de manera sincera.

—Muchas gracias — dijo Valentina feliz de poder irse.

—Solo debe seguir con sus ejercicios de movilidad — dijo con el tono que cualquier doctor daba a sus pacientes — a pesar de que su recuperación es casi total debe tomarse las cosas con calma, tomar por lo menos unas 2 siestas al día para que sus patrones del sueño vuelvan a la normalidad.

—¿Sus patrones del sueño? — pregunto Juliana extrañada — ¿Pero ya no están normales? — dijo seria.

—Fueron 6 meses en los que su sueño no fue interrumpido — dijo el doctor de manera tranquila. Valentina lo vio y noto que su mirada había cambiado, sus ojos ya no brillaban al ver a Juliana quien se encontraba sentada así lado pero con una almohada cubriendo su entrepierna — sus patrones de sueños aún siguen algo descontrolados, es por ello que aquí dormía varias veces al día logrando que retomara con normalidad su horario nocturno. Al dormir dos siestas al día de tal vez media o una hora la ayudara a recobrar la normalidad en las noches, luego ya serán innecesarias...

—¿Eso quiere decir que estoy completamente curada? — pregunto Valentina sonriendo por primera vez al doctor desde que lo conoció.

—Debemos vernos en unos 15 días para volver a realizarle otras tomografías y ver si no hay secuelas — dijo El doctor de manera tranquila.