Era de mañana y la primera en despertar fue Valentina, sonrió al verse junto a su esposa e hijo. Vio la hora en el reloj de pared tal parecía que solo había dormido 15 horas pero no quiso despertar a Juliana solo la veía dormir al igual que a su hijo, Los admiró por unos minutos hasta que Marco despertó, con un gran esfuerzo se sentó trato de no perturbar a la morena y lo consiguió, Los ojitos azules de su bebe no se apartaban de observar sus movimientos ambos se sonrieron al mismo tiempo.
Valentina con otro gran esfuerzo tomo a Marco entre sus brazos, él sentirlo así tan cerca y en sus brazos le inyectaba fuerza, calidez, ternura, amor. Volteo a ver a Juliana que seguía dormida y sonrió, ya que ese pequeño era la mezcla de ambas, observaba a su hijo y a Juliana tratando de identificar cada rasgo de cada uno en el otro. Juliana comenzaba a despertar, desde hacía mucho no dormía tan bien como en esas semanas.
Una dulce melodía se escuchaba era indiscutiblemente la voz de la mujer que ama. Abrió los ojos y se maravillo al ver a su hijo entre sus brazos siendo este espectador de ese concierto, esa canción de cuna tenía a Marco completamente embobado viendo a Valentina. Sin duda el efecto que causa la rubia en ella la heredo su hijo que se notaba feliz en sus brazos. Valentina miró a Juliana que le sonrió enormemente. Sus miradas se quedaron conectadas, solo se veían mientras la dulce canción de cuna llegaba a su fin.
—Tienes una hermosa voz — dijo Juliana sonriendo — cada día logras enamorarme más, eres sin duda la mujer más maravillosa del mundo.
—Solo lo dices porque me amas — dijo sonriendo.
—Y te amare el resto de mi vida — ambas sonrieron y Juliana se sentó solo para darle un enorme besó, alguien no estaba muy de acuerdo en perder la atención de la rubia.
—wuuuuuaaaaaaaa!! — comenzó Marco a llorar fuertemente.
—Creo que alguien esta celoso — dijo Valentina sonriendo.
—Escucha campeón debes aprender a compartir — dijo Juliana riendo, el pequeño fijo sus ojos en los de madre y levantó una de sus pequeñas cejas.
—Creo que no está de acuerdo con eso de compartir — Valentina sonrió.
—pues deberás aprender — dijo robándole un beso a Valentina, el pequeño hizo un ruido de descontento — ven aquí – la morena le tomó de los brazos de Valentina y comenzó a besarle las mejillas a su hijo que comenzó a reír.
—Son igualitos los dos — dijo Valentina riendo.
—Claro te amamos mucho — Juliana sonrió y abrazó a Valentina con uno de sus brazos y en el otro tenía a su hijo, la rubia se acurruco en Juliana y con su mano tomo la de su hijo.
—Y yo los amo más — dijo sonriendo.
Cualquiera que las viera notaria a una hermosa familia, de hecho alguien las veía por la ventana que daba al pasillo y sabía que estaba fuera de lugar, ambas estaban casadas y tenían un hijo y era algo en lo que no podía intervenir, deseo por un momento que Valentina sufriera aquel desorden cerebral que alejara a su pareja, muchos pacientes que despiertan del coma llegan a sufrir este trastorno tanto así es su repulsión hacia su pareja, que terminan divorciándose luego de algunos meses pero no era el caso de la rubia, más bien parecía que estaban más cerca eso se lo quería atribuir al niño, pero era evidente que ellas se amaban. Juliana estuvo viviendo en ese hospital prácticamente en esos 6 meses, solo para cuidarla, la bañaba, vestía, peinaba, le daba masajes para ayudarla con la circulación y que no se atrofiaran sus músculos, ¿A cuantas parejas vio hacer eso? A muy pocas pero a ninguna con tanta devoción como a Juliana, eso le gusto de ella pero en ese momento lo entendió no era para él.
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Me enamore de mi esposa - Adapt Juliantina G!P
RomanceJuliana y Valentina se ven obligadas a casarse sin amor, una para salvar el legado que le dejó su padre y la otra para dar descendencia a su apellido. Ambas se enfrentarán a muchos obstáculos durante la convivencia. Lograra Juliana hacerle ver a Val...