breves historias que vivirás con tus personajes favoritos del mundo mágico de harry potter, incluyen primera, segunda y tercera generación.
- todas las historias son hechas por mí.
[re-edición por errores ortográficos]
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Tú cabeza reposa sobre el hombro de Regulus, su pecho esta descubierto con tus finos dedos haces círculos imaginarios sobre este, se encuentran sobre su cómoda cama en la casa de los Black, relames tus labios y levantas la mirada para verle, desde el día de ayer esta muy callado y eso te preocupa un poco.
— Reg... — susurras pero este sigue con su mirada fija en la oscura pared, te acomodas en la cama aún tapándote con las finas y caras sábanas, te acercas a acariciar su mejilla — Regulus, ¿esta todo bien? — preguntas sumamente confundida y preocupada por su silencio.
Este parpadea varias veces y gira su cabeza para encontrarse con tú rostro, este asintió tomando un suspiro.
— Si, todo esta bien, cariño. — te dedica una pequeña sonrisa.
— De todos estos años que hemos estado juntos, nunca me has podido mentir, Black. — arqueas una ceja y tomas asiento sobre la cama — ¿Me dirás qué pasa?
Lo ves ponerse algo tenso, cierra sus ojos un momento para segundos después volver a abrirlos, toma asiento para quedar frente a frente.
— Hace unos días atrás el señor tenebroso me llamó... — lo ves colocarse tenso — Dijo que necesitaba un elfo doméstico. Yo... le di a Kreacher con orgullo, ya que era una orden importante. — lo ves cerrar sus ojos con fuerza — Antes que Kreacher se fuera le dije que si pasaba algo que regresara a casa, sabes el cariño que le tengo a ese elfo...
Asientes para tomar su mano.
— Sigue, cariño... — das leves caricias.
— Kreacher me contó todo, el señor tenebroso obligó a Kreacher a beberse una pócima de desesperación para obtener algo, pero, él lo dejó ahí, lo abandonó cuándo yo se lo di con suma confianza... — ves cómo su mandíbula se tensa, esta enojado.
— ¿Sabes que buscaba? — preguntas.
— Un horrocrux, y debo destruirlo, así podré deshacerme de él, de Lord Voldemort.
Al escuchar aquello tú cuerpo se tensa y un escalofrío cubre por completo tu cuerpo.
— ¿Qué harás? no irás a ese lugar ¿verdad? — Regulus esquiva tu mirada — Regulus...
— Debo ir, es la única forma de poder deshacernos de él.
— Entonces yo iré contigo. — este niega varias veces.
— No, no. Tú te quedarás aquí, yo iré con Kreacher.
— Pero Regulus, si algo te pasa... — oyes tú voz romperse para acercarte a él y abrazarlo con fuerza — No quiero que te suceda nada, por favor Reg...
Este te cubre con sus brazos y acaricia tú cabello.
— Todo estará bien... lo prometo. — susurra este sobre tú oído.
[...]
El día ha llegado, Regulus se ira con Kreacher a aquella cueva, tienes miedo, claro que lo tienes, temes por la vida del chico cómo también por la del elfo.
— Cuídate, por favor. — arreglas la ropa que lleva puesta y dejas un beso en sus labios — Si ves que algo se sale de control, por favor, regresa.
— Lo haré cariño, no te preocupes si. — este acaricia tú mejilla y vuelve a besar tus labios.
Muerdes tú labio y simplemente ves cómo tanto el chico cómo el elfo han desaparecido.
Subes a la habitación de Regulus y cierras la puerta con llave, tomas asiento en la cama y suplicas que todo salga bien.
Las horas pasan y aún no regresan, tus piernas comienzan a temblar y tus manos igual. Una ráfaga de viento te llama la atención. Han vuelto.
Te levantas de la cama emocionada pero al ver solo al elfo tú corazón se detiene un segundo.
— Kreacher, ¿dónde esta Regulus? — ves al elfo mirarte y luego bajar su mirada — Kreacher...
— El amo Regulus le ordenó a Kreacher que si algo sucedía regresara a casa. — logras sentir algo de dolor en sus palabras — El amo Regulus se bebió toda la poción... y Kreacher vio... como el amo Regulus, era... arrastrado hasta el fondo del lago...
Llevas tus manos a tu boca y ocultas esta mientras caes sentada sobre la cama y varías lagrimas comienzan a salir sin control de tus ojos, la ira y la tristeza se apodera de ti, fijas tú mirada en Kreacher lo ves levantar el guardapelo original, te acercas a este.
— Escúchame bien Kreacher. Escóndelo bien, no dejes que nadie lo encuentre, trata de destruirlo, pero si no funciona ya sabes que hacer. Esto no se quedará así Kreacher, claro que no. — estas dispuesta a todo con tal de que Lord Voldemort muera, te quitó a la persona que más apreciabas en esta vida, y lo harás sufrir, cueste lo que cueste.
