Enamorado de nuevo.

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P e r s e c u c i ó n.
Día 3- 5:39 pm.
Punto de vista de Elizabeth.

Sentía que los pies se me ampollarían de tanto caminar en vueltas, pero mi ansiedad no me permitía sentarme, ¿Dónde estás Zayn por qué mierda no llegas? Me repetía constantemente con la ilusión de que la puerta se abriera y él me contestara que todo estaba solucionado por fin. Mi casa estaba obscura a falta de luz eléctrica, únicamente la luna deja que pudiera ver los objetos y no me callera de bruces al suelo como tonta. El polvo de la casa mezclado con el olor a humedad por el abandono me lastimaba la nariz, había estornudado un millar de veces en los últimos cinco minutos.

Zayn me había insistido tantas veces que me fuera a un hotel pero proteste en que era un gasto innecesario y que era mejor venir aquí a cambiar las cosas en mi mochila de todos modos. Jamás pensé que tardaría tanto tiempo si no quizá hubiera obedecido, habían pasado casi siete horas desde que se fue y mi estómago rugía por el hambre, aun así no quería irme de ahí en caso de que regresara, sería fatal que el no encontrarme ahí lo preocupara, ya era suficiente con mi propia mortificación por no saber como estaba él.

Narrador omnisciente.

Louis había llegado a la casa de la chica pero se limitaba únicamente a observarla por la ventana, caminaba de lado a lado y si se concentraba era capaz de escuchar su arrítmico corazón con su oído super dotado. Tenía el pulgar en la boca y sus cejas dejaban ver lo preocupada que estaba.

Era hermosa, solo le despertaba un montón de pensamientos indebidos, moría por quitarle la ropa y besarle cada centímetro del cuerpo y solo quizá algo que nunca hacía, abrazarla después del sexo para hacer algo tan intimo como dormir juntos.

Como le recordaba a Merrian, él la había amado tanto en aquel entonces, hubiera dado su inmortalidad por ella si ella se lo hubiese pedido. Merrian había sido el más puro amor que Louis había sentido en su toda su vida. Estaba enamorado de aquellos ojos preciosos y de aquel largo cabello castaño y rizado, sin mencionar el espectacular cuerpo cubierto por su suave piel de porcelana, la manera tan bonita de darle amor y aquella energía sexual que desprendía todo el tiempo, ¿pero que podía esperar? era Afrodita el ser más perfecto que habito el mundo. Jamás perdonaría a Adonis por habérsela arrebatado así.

El Dios dio un fuerte suspiro.

Ella le recordaba tanto a Merrian, sus ojos sobre todo, los ojos de Afrodita cambiaban de color en ocasiones, pero su tono favorito siempre fue el gris, lo consideraba único. Y ahora Beth aparecía con sus ojos del color del humo, con sus cabellos rizados, eran idénticas, tal vez Afrodita tenía más personalidad y su carácter era muchísimo más fuerte Merrian era dinamita pura. Aun así Beth tenía a su favor la inocencia, su calidez, ternura, todo lo que representaba su juventud.

Quizás sus narices eran diferentes, y la forma de su barbilla, también algunos aspectos de su cuerpo. Elizabeth no era tan delgada como Merrian, ni tan alta, no tenía la diminuta cintura, el cuello tan largo, ni los hoyuelos al sonreír. Pero tenía un poco más de pechos y la cadera ligeramente más prominente, a Louis le gustaban sus pechos y su nariz pequeñita. Para él era fácil confundir la lujuria con el amor, así que no podía estar bien seguro pero creía que estaba enamorado y no dejaría que de nuevo se la quitaran.

La puerta interrumpió sus pensamientos y miró a Beth correr hasta los brazos de Zayn y besarlo casi desesperada.

- ¿Dónde te habías metido mi amor? Estaba tan asustada.

- Lo siento muñeca, tuve que perder un poco el tiempo antes de venir.

- ¿Por qué? No te entiendo nada, ¿Dónde esta Naomi y Jeason? ¿Qué paso con Louis?

Zayn mordió su labio inferior sintiéndose fatal por decepcionarla, esta mañana le había dicho:

"No puedes venir Elizabeth, pero estará todo bien, déjalo en mis manos y yo regresare con ellos dos no hará falta que estés ahí"

¿Ahora como le decía que las únicas personas que le importaban habían muerto sin qué él pudiera salvarlos?

Beth lo miraba esperando y justo entonces la beso de nuevo en un intento de evadir la pregunta, estaba nervioso y lo único que quería era que ella lo perdonara, pero mierda, se aparecía siete horas después y Beth parecía tan esperanzada, aun con los labios del moreno en los suyos ella seguía pensando en ¿Qué había pasado? ¿Y dónde estaban?

La verdad es que los cuerpos de Jeason y Naomi habían quedado irreconocibles después de la explosión, el mismo tuvo que durar casi siete horas ocultándose para que su piel se renovara y todas aquellas marcas de deformación en su cara se esfumaran y así poder volver a casa sin asustar a Beth con el aspecto de un hombre que acababa de sobrevivir a una explosión.

Se alejó de sus labios y lo miro, algo le ocultaba y no veía a ninguno de las dos personas que había esperado abrazar y dar gracias por que estuvieran bien, Beth lo miro un poco más pero justo entonces miro de reojo algo moverse en los árboles que adornaban o habían adornado alguna vez el jardín, giro bruscamente para ver que era, rezaba por que se tratara de un gato, pero ella conocía bien aquel cabello castaño, él estaba aquí. Se acercó rápidamente a la ventana y lo miro, el chico la observaba resentido, casi parecía triste, mantuvieron contacto visual unos segundos con el corazón de Beth a mil por hora, no parecía lastimado y tan pronto Zayn se acero a ver que pasaba el salió de ahí, corriendo como un mismo rayo, Zayn camino hasta ella sin comprender entonces reconoció aquel aroma, el increíble olfato del Dios reconoció a Louis y apretó a Beth a su pecho de manera sobreprotectora girando a su al rededor, ¿venía por ella?

- Sigue aquí, esta bien.- susurro Beth.- Zayn... - las involuntarias lagrimas aparecieron en sus ojos no podía ser verdad.- No volveré a ver a Naomi y Jeason ¿cierto?

Zayn negó con la cabeza.

Shades - Zayn Malik.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora