Shades - Zayn Malik.

Paseo Nocturno

Entramos a la pequeña casa tirando todo lo que estuviese a nuestro paso, el me besaba de tal manera que había perdido la coherencia, simplemente estaba entregada. Jadeo intentando tomar un poco de aire, pero lo único que recibió fueron mis labios de nuevo, no quería separarme de él.

Llegamos a aquella cama donde ambos dormíamos y me tiró sobre esta para después seguirme besando, tocando, haciendo maravillas con mi cuerpo.

- Vamos a hacerlo ¿verdad?- las palabras salieron de mi boca sin siquiera haberlo pensado, Zayn me miró sorprendido y se dejo caer a mi costado en la cama. - Me acabas de tirar en la cama después de un montón de besos y toqueteos, ¿pero ahora te sorprende que crea que vamos a tener relaciones?

- Elizabeth por favor.- soltó con nerviosismo.- Acabamos de tener la conversación donde te explique claramente que no puedo acostarme contigo.

- ¿Y todo esto por qué fue entonces? ¿Para que el toqueteo y venir hasta acá de esta manera?

- Podemos hacer estas cosas sin necesidad de tener relaciones. No quiero hacerte daño.

- Sé que no lo harás amor.

- No correré ningún riesgo. Pero ya te lo dije Beth...- de nuevo me beso quedando ligeramente sobre mí.- Puedo satisfacerte de otra manera.

- No me hagas favores gracias.- me escabullí por debajo de él poniéndome de pie.

- ¿Qué haces?

- No quiero verte.- sonreí con falsedad y me puse de nuevo mis zapatos que en algún momento habían quedado regados por el piso.

- Mi amor, ¿Qué pasa? ¿De verdad estas molesta?

- ¡¿Que no es obvio?! Alborotaste mis estúpidas hormonas por nada.

- Es la primera vez que hacemos algo como esto, podemos seguir y...

- Estoy avergonzada ¿okay? deja de presionarme.

- ¿Avergonzada por qué muñeca?

- Me acabas de rechazar. No quieres acostarte conmigo.

- Elizabeth, lo hablamos hoy, esto no tiene nada que ver con que quiera acostarme contigo o no, ¿de verdad crees que no quiero? ¡Me muero por hacerlo! Pero no puedo.

- ¿Sabes qué Zayn? De verdad, necesito espacio.- tome su suéter negro que estaba tirado a los pies de la cama y me lo puse.

- Mi amor, ¿a dónde vas?

- Lejos de ti,

- Pero, ¿a dónde? Espérame, voy contigo.

- No.- separe-Te. Atrevas. A. Seguirme.- Lo señale con el dedo índice.

- Elizabeth estas siendo irracional.

- Ya te lo dije Malik, si me sigues, te lo juro que aquí se acaba todo, necesito estar sola.

- Drama innecesario.

- ¡Vete a la mierda!- salí furiosa de la habitación corriendo hasta la puerta. Estaba consciente de que estaba exagerando pero verdaderamente me sentía humillada. Era la primera vez que tenía una experiencia como esa y había terminado de una manera bochornosa.

Nuestra casa en San Diego estaba lejos de la urbanización, no había casas a una buena distancia de nosotros, ni tampoco establecimientos comerciales. Las calles estaban inclinadas y solo había un camino de pavimento.

Me relaje un poco tratando de respirar profundo y volver a mis cinco sentidos nublados por el berrinche que acababa de hacer, comencé a caminar disfrutando del clima fresco.