- Declarada culpable- dijo el juez frente a todo el tribunal, haciendo sonar el ridículo martillo, me lleve las manos a la boca ahogando un sollozo. Mi tío y abogado Jeason Dollin me envolvió en un abrazo susurrando cuanto lo sentía y no era para menos. Era una jodida injusticia, ¿cómo podía estar pasándome esto?
- ¡Es una injusticia! - grite poniéndome de pie.
- Elizabeth toma asiento- dijo con gesto amargo.
- ¿Cómo? ¿Ustedes de verdad creen que yo sería capaz de matar a alguien?- solloce.- Y aun peor, ¡A mis propios padres! Esto es una tontería.
- ¡Silencio!
- Todo lo prueba- dijo uno de los jurados.
- Sangre tan fría como para matar a sus propios padres merece estar tras las rejas- chillo una mujer con estúpido acento francés.
- ¡Yo no los mate!- grité, gire a ver a Jorsh Patrick el otro sospechoso de las muertes, un viejo socio de mi padre que se quería quedar con las industrias familiares, lo señale con un dedo acusador- ¡Fue él puedo jurarlo! Van a dejar a un jodido asesino suelto.- el hombre sonrió de medio costado.
- Claro, tú lo que necesitas es deshacerte de tu condena, lo siento Beth, fuiste dura, ellos no merecían morir.- soltó con falso tono de decepción.
- Eres un sin vergüenza, tú eras... de la familia, ¿Cómo puedes hacerte el santo cuando estas mandando a una inocente a prisión? Ya sufrí bastante con el fallecimiento de mis padres.
- Entonces no debiste asesinarlos cariño- mis ojos ardieron en lágrimas ante el cinismo, era una ridiculez que nadie lo notara, estaba mofando en mi propia cara.
- Lo siento Elizabeth- dijo el Juez Hornung- Estarás en un reclusorio por tu minoría de edad, hasta que se pruebe que tú no eres responsable cariño, de lo contrario...- Dejo las palabras en el aire. Hornung era gran amigo de papa y sabía que yo no sería capaz de algo así.
- Elizabeth, tendrás que ir por tus cosas a casa y me temo que personal del cuerpo policial te tendrá que acompañar- Jeason me tomo del brazo con cierta dulzura.
- Puedo ir sola.- susurre aceptando la derrota. No tenía opción, estaría encerrada hasta que mi tío comprobara que no fui yo, de lo contrario, quizás estaría encerrada toda mi vida.
- No puedes, desde este momento estas detenida, tendrás que tomar solo las cosas que te permitan llevar, tal vez algo de ropa y cosas personales.- rodé los ojos y después lágrimas fueron cayendo por estos.
- Anne Elizabeth Nichols, quedas privada de libertad- dicho esto todos comenzaron a salir del tribunal, dejándome sola con Jeason.
- Probaremos que no tienes la culpa Beth ¿si? solo será por un tiempo, nada va a pasarte, tus padres te han dejado la fortuna Nichols y estarás protegida y haré todo para que seas bien tratada.
- Solo... quiero ir a casa- me arranque las lágrimas con el dorso de mi mano.
- Y ahí es a donde iras- Una voz muy gruesa soltó con disgusto, gire para encontrarme con uno de los policías, grande, moreno y con el traje demasiado ajustado. Me quede unos minutos tratando de calmarme y después comencé a avanzar hasta la salida.
¿Que iban a decir ahora todos de mí? Yo siempre había vivido en lugares lujosos, rodeada de dinero y de caprichos, todo lo que yo quería era traído a mi enseguida, contrataban personas para darme cualquier cosa que yo necesitara, era mi vida o al menos fue, perfecta, tenía miles de amigos y era conocida por ser la hija de Elliot Nichols en todo el país, la prensa se había vuelto loca con la muerte de mi padre y aún más cuando salí como futura sospechosa, ahora... ¿cómo tomarían que estuviera en un reclusorio? di un suspiro.
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Shades - Zayn Malik.
FanfictionUn reformatorio Tres amigos Un chico ¿Podrá la sonrisa de ella cautivarlo? Pero, ¿y si no solo lo cautiva a él? Un mito Una traición ¿Y si tu mejor amigo se convierte en tu peor pesadilla? ¿Y para destruirlo necesitas a tu peor enemigo? SHADES. ____...