BETRAYED [1 y 2]❝jjk

Final pt1❝

Regresarse fue la parte sencilla, Ellaí estuvo más adherida a Jungkook de lo usual pero por supuesto no se escuchará una queja por parte de él al respecto, Yoongi observó a Jungkook y apretó su hombro antes de irse y llevarse a Seokjin con él, Jungkook entendió, invitándolo a regresar cuando desease.

Las personas en el clan parecían muy contentas de tener a su líder de regreso pues la presencia de este les hacía sentir muy seguros, habló con Namjoon, con Hoseok. Saludó a su hermana pues siempre estaba extrañandola y mientras Ellaí parecía muy entretenida recuperando el tiempo perdido con Debby y la mencionada, Jungkook se acercó a los árboles, la mayor parte del clan Jeon estaba conformada por zonas verdes, incluso se rodeaban de estos.

Se sentó en la grama, respiró profundamente y sus manos abiertas sintieron el cómodo pasto mientras el viento golpeaba su rostro con la más delicada brisa del año, las nubes se reflejaron en su mirada carmesí.

Tenía un presentimiento agridulce atormentandolo y estaba seguro de que tanto él cómo Min y Kim se sintieron igual apenas cruzaron la primera palabra. Hasta la llegada de Ellaí, lo más valioso que Jungkook tenía era su clan, su gente, las personas que lo vieron crecer y apoyaban sus decisiones porque sabían que las tomaba por el bien común, el bienes de todos.

¿Tendrían que proteger a sus clanes con el espíritu alfa que reposaba en su interior? La estrategia estaba marcada, los roles habían sido asignados y parecía que el único enemigo era el tiempo.

Más problemas y ataques vendrán, quieren derrocar a los tres líderes.

Eso no le asustaba, habían tantas personas buscándolos para tomarlos y sentirse poderosos... asesinarlos no era tan sencillo como parecía, no a una encarnación. Jungkook sabía que él no moriría, no ahora, tampoco en un año o veinte, él sabía que sería casi eterno, pero su lobo tenía planes para él, planes que su parte humana desconocía.

—Yoongi es un alfa completo, su reencarnación fue terminada... Taehyung y yo aún tenemos que superar tres años más.

Se levantó, dejaría que todo sucediese de la manera en que tenía que pasar. Revisó su teléfono y como si estuviese conectado con el alfa Kim, leyó sus palabras.

Nos iremos a buscarlo en una semana.

Asintió. Seguirían el plan tal cuál se había acordado.