BETRAYED [1 y 2]❝jjk

08❝

Ahora Yoongi entendía a lo que todos se refería al decir que Minho era bueno escapando y no peleando, maldijo regresando a su forma humana cuando este pisó territorio ajeno, se cruzó de brazos y le escuchó reírse mientras recuperaba el aire.

—Alfa Min— musitó entre dientes— es una pena que usted no haya acompañado a Kim y Jeon en sus tres años de puro sueño.

—No me asustas ni un poco, así que deja de forzar el macabro tono de voz, no intimidas a nadie— la lengua de Yoongi era filosa— y tampoco cantes victoria, que esos dos ya despertaron y deben estar camino aquí.

—¿No conoce el poder de un suero adormecedor?

—Lo conozco, pero también conozco la fortaleza de un alfa reencarnado— sonrió de medio lado— quién no parece estar muy al tanto sobre el funcionamiento de su propia raza eres tú— texteó rápidamente— ¿Llevarse a la predestinada de Jeon para tus perversos fines? Me parece que te gusta vivir al límite.

—¿Considera perverso mi enamoramiento y deseos de casarme con Ellaí? Esa chica me pertenece desde tiempos inmemorables y debería estar agradecida porque no la condeno por su traición— encogió los hombros— el único impedimento era su condición como beta, pero ahora...

—Ahora ha despertado su omega, su loba. Y no fue gracias a ti, lastimosamente tú escencia alfa es así de mediocre.— resopló—Me compadezco de tu predestinado, si es que realmente tienes a alguien esperando encontrarte.

—Estás metiéndote dónde no te importa.

—Ellaí es mi amiga, una muy preciada, yo protejo y velo por mantener a mis más queridos a salvo.

Volvió a reírse.

—Vale, la niña también me sirve, crecerá algún día.

La sangre le hirvió y su asco aumentó, no entendía como podía referirse a Haru de esa manera tan enferma. Sabía que estaba a salvo y eso lo confortó.

—Jungkook va a encontrarte y yo voy a disfrutar tanto ver cómo te desaparece de la faz de la tierra.

—Eso no-

—Está despierto, Ellaí lo escuchó y se fue a buscarlo hace poco más de una semana.— rió— Estás jodido, Minho. Puedes seguir corriendo que a mí me encanta jugar al cazador.

No supo si le creyó, pero Yoongi quiso creer que si cuando le vio palidecer e irse corriendo, chasqueó la lengua y leyó el mensaje donde se le daba absoluto permiso de cruzar todo terreno y en la palma de su mano un pedazo que logró rasgar de su camisa. Puso el teléfono en su oreja.

—Hoseok, manda un buen grupo de alfas a la dirección que voy a enviarte y no se les ocurra a Namjoon o a ti salir del clan. Voy a ausentarme unos días.

—¡Despacio que queremos llegar enteras!

El bosque era terreno complicado, Ellaí se impacientaba porque sentía que si seguían por el camino cómo iban hasta el momento, definitivamente llegarían a estar lo suficientemente cerca de los chicos. Por supuesto no estaban siguiendo el camino largo, tomaron un atajo o de lo contrario tardarían una eternidad.

Hanim bajó de la camioneta y gritó usando toda su fuerza para empujarla desde atrás y sacarla del quinto hueco que se encontraban, Ellaí aceleraba y salían de aprietos con éxito, Hanim trepó hasta el techo del vehículo y de puso de pie cuando estuvo segura de que ninguna rama terminaría dándole en el rostro.

—¿Cómo crees que vamos?

—Bastante decente— Hanim estaba un poco más animada y eso era buena señal— pero, ya casi anochese, tenemos que buscar donde estacionar y amanecer.

—¿Tienes señal?

—Cero.

—Demonios— murmuró, quería preguntar a Namjoon como iba todo con su Haru— vamos a ir un poco más rápido y apenas den las siete, estacionamos.

Y así fue, las siete en punto cayeron, el cielo se oscureció y ambas aseguraron puertas, subieron las ventanas y agradecieron que el auto fuese de tonalidades oscuras, así no llamaba tanto la atención. El silencio rodeandolas.

—Me preocupa— Hanim sabía que podía quejarse libremente con Ellaí y esta no la juzgará— pienso en qué no ha probado bocado, que debe estar pasándola muy mal y debe tener un humor de perros— rió— Taehyung es muy voluble y se enoja mucho si algo no es de su entero agrado— bufó, haciendo reír a Ellaí— empecé preocupada y terminé queriendo golpearlo por insoportable.

—Es entendible. Con Jungkook... creo que ambos estamos muy mal acostumbrados, pero cuando sentimos que nos estamos pasando, él me regaña y yo lo regaño— le explica— cuando está con eso de que todo es mío y bueno, básicamente siendo un alfa, tengo que decirle que pare, de la misma manera que cuando yo estoy siendo muy Ellaí, tiene que pedirme lo mismo. Soy muy pesimista, todo el tiempo estoy echándome la culpa de todo lo malo que sucede en el mundo y eso a él lo desespera porque... lo hago pensar que me siento insegura a su lado.

Hanim sonrió, apretando las manos de Ellaí entre las suyas.

—Pero él sabe que es todo lo contrario.

—Lo sabe. Nunca me sentí tan a salvo con alguien.— le aseguró, mirándola— ¿Te sientes de la misma manera con Taehyung?

—Lo hago, no se lo digo, pero yo no tenía nada, creía que conocía el mundo y cuando él me enseño el verdadero mundo a su lado, me di cuenta de que me lo dio todo.

Jungkook también le había dado una nueva vida, una nueva perspectiva. Lo extrañaba.