BETRAYED [1 y 2]❝jjk

43❝

A las personas les causaba mucha impresión ver a los tres grandes alfas caminar conversando entre ellos y soltando alguna que otra risa por los comentarios ocurrentes de Jungkook, quién intentaba hacer que Taehyung se sintiera cómodo con ambos tal como lo logró con Yoongi.

Las dos omegas se habían quedado juntas en casa de Kim, para conocerse, Taehyung no estaba nada en contra de su esposa teniendo una amiga, pues Hanim era bastante solitaria y eso aunque era normal pues se trataba de la omega del líder, no le gustaba, él era muy feliz viendo a su omega apoyándose en otra omega.

—¿Ya tienes una respuesta al porqué de tus ojos y los suyos permanecen en ese tono?— preguntó Kim, abriendo la puerta a las celdas para ambos— No creo que sea algo grave, solo es curioso.

—Creo que es cuando están juntos, tal vez es una forma de conectar a sus lobos— opinó Yoongi— también puede ser el hecho de que siempre están alerta.

—Ellaí creció en un entorno bastante difícil, no me sorprende que esté en estado de alerta todo el tiempo— hizo una mueca— el único momento en el que está en paz es cuando logra dormir, aunque también son contadas las veces en las que duerme y no tiene pesadillas.

Taehyung asintió, entendiendo, los tres se detuvieron.

—Hanim pasó por lo mismo los primeros meses a mi lado— contó— no hay una cura para las pesadillas, hay que dejar que el tiempo pase y sean totalmente conscientes de que están a salvo, nosotros no podemos hacer más que permanecer ahí porque somos muy dependientes de nuestra pareja— encogió sus hombros— alfa no es nada sin omega.

Jungkook tomó el consejo y le dió la razón antes de centrarse en lo que seguía, dos betas entraron escoltando a la buscada alfa, Mera bufó al ver a los tres alfas más buscados en todo el mundo de asesinos y se dejó caer en el asiento.

—Vaya, que gran honor— dijo— quería ver a uno y se sumaron dos.

No se inmutó por el pinchazo de la aguja, si cerró los ojos un tanto fastidiada, no le gustaba la sensación que brindaba ese suero.

—¿Cómo te sientes, Mera?— preguntó Taehyung, formal como lo era con todo el mundo—Imagino que no es tan malo teniendo en cuenta que no compartes celda con nadie.

—Ciertamente no es malo en absoluto, solo me aburro mucho haciendo nada, pero la comida es decente— sus ojos se posaron en los otros dos— supe que la adoración de mi hermano resultó ser su predestinada, alfa Jeon. Felicidades, me gustaría actuar como que me sorprende, pero no lo hace, pues ya era conocedora de que su destino estaba entre los nuestros.

—¿Eres vidente o algo así?

—Casi— rió— ¿Para qué quieren hablar conmigo?

—Vas a ayudarnos a localizar a Minho, sabemos que estás al tanto de cada paso que da— suspiró perezosa— tenemos que ponerle un alto a ese alfa, es peligroso.

—Lo es, pero ahora que no tiene a la pequeña Ellaí no va a centrarse en otra cosa que no sea recuperarla— ladeó la cabeza— la mente de Minho es peligrosa porque es retorcida, pero en combate físico es un fiasco, no sabe hacer nada más que escapar de los golpes, así que si logran atraparlo, ya ganaron, mientras no le tengan lo suficientemente cerca para darle una patada en las bolas, seguirán batallando con la angustia.

—¿Qué sabes de Ellaí?

—Mucho, sus padres murieron cuidandola a ella y a su hermana pero aún así cayeron en las manos de Minho y hubiese sido aún peor si no fuese por el alfa aquél que hizo de padre para ambas— los señaló— ese alfa es fuerte, el único soldado que valía la pena entre todos los hombres de Minho. También Ellaí y Songji, por supuesto, eran más fuertes que el promedio y precisamente gracias a que él las entrenó— suspiró—mi hermano debe estar frustrado sin sus mejores combatientes, les diré otra cosa que puede ayudar y es que Minho no sabe absolutamente nada sobre lo que implica tener un ser predestinado, así que actúa según sus propios y estúpida falta de conocimiento sobre las distintas razas, ni siquiera sabe que es un alfa del rango más bajo, no sirve para nada, solo para dar asco.

—¿Conociste a Songji?

—La muerta, si. Una alfa increíble— puntualizó— me es difícil creer que alguien con ese potencial ya no esté respirando entre nosotros.

Yoongi arqueó ambas cejas y le dió una mirada a Jungkook, este se la devolvió.

—¿Vas a colaborar con nosotros o no?

—Depende de que pueda ganar yo con eso.

Kim se encogió de hombros.

—Pide lo que quieras y lo consideraré.

Los siguientes minutos pasaron en considerable silencio, Mera se vio vulnerable y dudosa en ese pequeño trayecto.

—Tengo un hijo, también un omega— tragó saliva—los ayudaré en absolutamente todo lo que pidan, si me ayudan a encontrarlos y me dejan vivir en paz con ambos, es todo.