Hanim caminaba a la par de Ellaí, ambas iban pensando en sus bebés, normal si se tenía en cuenta que ambas eran madres primerizas y era muy difícil no ocupar su mente en ellos. Envió un mensaje de texto a Namjoon para que no se preocupara y Hanim suspiró, ella era quien tenía una pequeña idea sobre el paradero de Taehyung y según expresaba, no era en absoluto cerca.
—Ellaí, tu celo...
—Estoy tomando supresores y un medicamento especial que Agatha creó para mi— le sonrió a su amiga— no será un problema en absoluto, no te preocupes.
—Eso me brinda calma, porque sabes que esta zona es bastante... poblada y no nos conviene que tu aroma llame demasiado la atención.
Ellaí rió, hizo después una mueca disgustada y tuvo que detenerse, sintió un tirón en su pecho que la paralizó durante un segundo. Aún no se acostumbraba a los medicamentos, o eso creía que era.
Antes de adentrarse en el bosque, tenían que pasar si o si por una zona pública problemática, en esta zona se reunían muchos alfas que no pertenecían a ningún clan y solo se dedicaban a beber en grupos, hombres y mujeres ebrios hasta la inconsciencia era el panorama de esa zona. Ambas omegas cubrieron su nariz y boca con un pañuelo negro. Hanim tomó la mano de Ellaí y ambas cruzaron a su propio paso.
Por supuesto su presencia fue notada y los comentarios subidos de tono e irrespetuosos no se dieron a esperar, tuvieron que ignorar cada uno de ellos y solo centrarse en seguir su camino. Uno de ellos les bloqueó, sonriendo con malicia y a punto de ponerles la mano encima, hasta que una voz ajena lo detuvo.
—Esas son omegas muy fuera de tu alcance, muy elite—una alfa, cabello corto, ojeras oscuras y ropas rasgadas advirtió— déjalas pasar y no molestes si quieres evitar problemas— señaló a las sortijas en sus manos.
Nadie ajeno a los tres clanes estaba enterado de la desaparición de los alfas Jeon y Kim, esa alfa parecía reconocerlas a ambas como esposas de dichos líderes.
—¿Y tú crees que me importa lo que digas?— fue la respuesta del alfa, la mujer encogió sus hombros y aún sonriente chasqueó la lengua— Cállate.
—Hazle caso y déjanos seguir nuestro camino— habló Hanim, que comenzaba a impacientarse— no queremos problemas, tú no quieres problemas.
—Ya, gracias por el consejo, omega.
—No es un consejo, pero tómalo como mejor te parezca. Ahora, hazte a un lado.
El alfa no se movió, se cruzó de brazos y continuó mostrando su sonrisa petulante, la cuál tembló un poco debido a la rabia que le causó la contestación de Hanim, se notaba que era de esos alfas que gozaba humillando a los de rango menor solo para satisfacerse a si mismo, para sentir poder por al menos un par de minutos.
Ambas pasaron por su costado, ignorando su infantil comportamiento y quiénes presenciaba la escena rieron, pues quién pretendía ocasionar terror no lo logró.
Ellaí... demonios, Ellaí ¿es demasiado lejos? Amor...
Abrió los ojos a su máxima capacidad y se giró hacia Hanim para contarle, su cabello fue jaloneado y eso logró impacientarla, Hanim se molestó, logrando soltarse del agarre que también había puesto en ella y le pateó, haciéndolo encorvarse por el dolor, soltó a Ellaí y esta le propinó un golpe en el ojo izquierdo usando su codo, aquellos dos simples ataques lo enviaron al suelo y ellas aprovecharon la oportunidad para correr y alejarse.
—Lo escuché de nuevo, casi una oración completa, el problema es la lejanía...
—Necesitamos transporte— volvieron a detenerse, ahora que estaban lo suficientemente alejadas de aquel sujeto, podían conversar— no creí que de verdad fuese tan lejos como para no poder llegar a pie.
Escucharon risas, la alfa de cabello corto se acercaba con otras alfas hasta una camioneta, Ellaí dedujo que ese vehículo les pertenecía.
—¿Podremos conseguir algo más adelante?
—Lo dudo mucho.
—Entonces... — ambas observaron de nuevo a la camioneta— demonios, hay que negociar.
—Yo no sé manejar, Ellaí.
—Yo si, Nam me enseñó— suspiró, jalando de ella y caminando hasta la alfa, sus ojos brillaron en su recién recuperada tonalidad dorada y aclaró su garganta haciéndose notar, la alfa le miró y arqueó ambas cejas—Hola.
—Por la luna— suspiró ella, echando a sus amigas con un movimiento de mano y centrándose en las omegas— cuando alguien es amable, algo quiere.
—Necesitamos tu camioneta.
—¿En tu clan no fabrican vehículos?
—Estamos lo suficientemente alejadas de nuestro clan como para solicitar uno— respondió, firme— puedo pagarte, lo que sea.
Ella negó, dudando.
—Mi camioneta es todo terreno, he trabajado mucho en ella, venderla a dos omegas... se siente como trabajo perdido.
—Vale— Hanim intentó proponer algo, aún cuando no era buena en lo absoluto para los negocios, en eso era bueno su esposo— ¿Y si la tomamos prestada? Y te pagamos aún así, es más, si llega la hora de devolverla y está averiada, también te damos dinero para su reparación.
—O una camioneta nueva, en el peor de los casos— completó Ellaí— ¿Cómo te llamas?
—Dara.
—Nos mantendremos en contacto, nos das tu número y puedes ir hasta el clan Jeon, Min o Kim. Preguntas por Hanim y Ellaí.
—Por favor, Dara.
—No lo sé, niña, esta mierda es costosa...
—Te daremos el doble.
Arrugó el entrecejo y les miró con sospecha.
—No tienen tanto dinero.
Ellaí le enseñó cuánto poseía en su tarjeta, Hanim hizo lo mismo y luego de una transacción exitosa y unas pequeñas explicaciones sobre cómo conducir al vehículo llamado Darla, partieron a toda velocidad.
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BETRAYED [1 y 2]❝jjk
FanficEn un intento por sacar información sobre el alfa Jeon, Ellaí termina descubriéndose a sí misma. -OMEGAVERSE. -Hetero.