𝒀 𝒔𝒊...

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¿Cuantos minutos habian pasado? Eda no lo sabia, pero a quien le importaba si ya tenia bien en claro que no se cansaria de ver a Serkan Bolat, desnudo a su lado. 

El pensamiento la hizo morderse el labio mientras recordaba la noche que habian pasado, incluso podia sentir las fuertes y grandes manos de Serkan sobre su cuerpo haciendola estremecer, y podria jurar que habia una que otra marca en su cuerpo como prueba fehaciente de que habia sucedido. 

—Deja de mirarme asi— pidio Serkan, incluso con los ojos cerrados podia sentir esos ojos cafes sobre su rostro. 

—No puedo, me encanta lo que veo— dijo Eda antes de besar su hombro logrando asi que el pelirrojo abra sus ojos solo para deleitarse tambien. 

—Ahora te entiendo completamente.

—Buenos dias— saludo ella haciendolo sonreir. 

—Buen dia. ¿Estas bien?— le pregunto Serkan mientras tomaba uno de sus mechones entre sus dedos para esconderlo detras de su oreja. 

—Estoy mas que bien Serkan. Estoy feliz— confeso Eda logrando que Serkan sienta la necesidad de comersela a besos. 

—Tu me tienes en el paraiso Eda Yrildim, ni siquiera pienso moverme de esta cama— declaró él haciendola reir para despues callarla con un suave beso. 

—Tenemos vidas fuera de esta cama señor Serkan, y hasta donde sabia usted tiene mas de un proyecto importante que dirigir— le recordó Eda una vez que su novio solto su labio inferior. 

—¿A quien le importan unos proyectos cuando hay un hada en mi cama?— dijo Serkan haciendo que Eda frunza levemente su ceño. 

—Bueno yo me acoste con un robot es una rara combinacion... que repetiria una y otra vez, si no tuvieramos trabajo— declaro Eda sacandole una carcajada al pelirrojo. —Ademas piensalo, si no salimos tu madre, tu hermano, Engin y mis padres junto con mi abuela nos buscaran bajo las piedras hasta dar con tu departamento— siguio diciendo mientras él rodaba los ojos. 

—No importa, no sera una bonita vista para ellos pero no pienso moverme de esta cama.

Pero el mismo se vio contradecido cuando unas horas despues de hacerle una vez mas el amor a su novia, se veia sentado en su barra desayunando junto a ella. 

—No pongas esa cara, tu tambien querias ir a tu oficina. No lo niegues— le dijo Eda mientras estiraba su brazo para acariciar su mandibula. 

—Pordrias ir conmigo a la oficina— sugirio él sacandole una fuerte carcajada a su novia. —Enserio, podria decir que vienes a ayudarme con el proyecto de los Birol o con el proyecto de tu padre y... la ultima opcion podemos decir que eres mi novia— dijo con una seductora sonrisa que solo hizo a Eda negar mientras mordia su labio. 

—No hablas enserio— contestó Eda mientras volvia a tomar su taza entre sus manos. 

—Hablo muy enserio, deberiamos decirselo a tus padres— insistió  y parecía muy seguro de sus palabras. 

—¿De verdad quieres que lo haga?— pregunto Eda recibiendo un asentimiento de cabeza como respuesta. —Esta bien, aunque supongo que ellos ya sospecharan que estoy con alguien. Sera una sorpresa cuando les diga que eres tu— dijo con una pequeña sonrisa mientras veia a Serkan tomar su mano para besarla. 

—¿Quieres que vaya contigo?— pregunto el pelirrojo poniendose un poco nervioso al saber que su proxima reunion sera con su suegro ademas de su cliente. 

—No, quiero decir no si no quieres. Ya soy adulta, no diran nada. Y como ya te habia dicho les caes bien asi que todo ira bien con ellos— aseguro la castaña relajando asi un poco a su novio.