𝒀 𝒔𝒊...

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La idea de hacerle una sorpresa a Eda le rondaba por la cabeza desde hace dias, Serkan no podia dejar de pensar en ello pero aun asi no sabia que hacer. El nunca habia tenido estos impulsos de querer dar sorpresas o regalos a alguien, jamas habia querido ser detallista o romantico con nadie, pero con Eda la situacion era distinta. Pero asi y todo, se sentia como... un robot, como ella le decia, no podia pensar en una idea clara y concisa para la sorpresa pero despues de pensar varias horas en el asunto, un nombre si que aparecio claramente en su mente y era alguien a quien sabia que podia recurrir.  

—¿Entoces donde dices que vas?— pregunto Engin por quinta vez haciendo al pelirrojo rodar los ojos.

—Tengo una reunión Engin— contesto el mientras miraba el telefono. 

—Una reunión de la que tus socios, osea nosotros no sabemos nada— contesto Piril haciendolo resoplar, no queria contarle a nadie sobre la sorpresa para Eda, ni siquiera a sus amigos. Pero era dificil cuando ellos preguntaban todo, y refutaban todo aquello que el daba como respuesta. 

—Si, despues se los cuento. ¿Bien?— pregunto exasperado mientras se ponia de pie listo para irse. Tenía que aprovechar esta oportunidad, Eda tenia mucho trabajo pendiente y estaba trabajando en su antigua oficina asi que Serkan tenia toda la mañana disponible para el, sin que ella pudiera sospechar nada al respecto, pero ahi estaban sus dos amigos haciendo preguntas innecesarias. 

—¿Que despues nos cuentas? Serkan, nosotros tambien somos socios en Art Life, si estas teniendo tratos con otro cliente o hay alguna propuesta nueva de algun proyecto  tienes que preguntarnos— contesto Piril que ya empezaba a enojarse, no podia creer que Serkan estuviera actuando tan raro. El nunca habia hecho algo asi, despues de todo era muy responsable y aunque ella y Engin tenian menos acciones que el, el siempre les habia dado sus respectivos lugares en la empresa. 

Serkan empezaba a perder la paciencia asi que despues de soltar un suspiro se volteo a ver a sus amigos y se apoyo contra la mesa, cerca de Engin. 

—Bien, la verdad es que no se trata de trabajo. Es un asunto personal, que quiero hacer ahora porque no quiero que Eda se entere— confeso el pelirrojo sacandole una sonrisa a su amigo. 

—Ahhh esta bien ve, ve— dijo Engin mientras su novia fruncia el ceño. 

—¿Ve? Como le dices eso Engin, ve. ¿Por que Eda no puede enterarse?— pregunto Piril mientras se cruzaba de brazos y entrecerraba sus ojos. 

—Porque no quiero que se entere y ya Piril— contesto Serkan. 

—¿Y por que no? ¿Que le estas ocultando?— volvio a preguntar ella. 

—Nada. 

—¿Nada? Y por eso tanto misterio. ¿Y que, acaso tu lo encubres Engin?— pregunto a su novio, elevando una de sus cejas mientras el levantaba las manos en señal de no haber hecho nada. 

—Claro que no, claro que no mi vida— aseguro Engin haciendo que Serkan frunza el ceño. 

—No, claro que no porque no hay nada que ocultar. Solo no quiero que ella se entere, por ahora. Ya se enterara despues— respondio Serkan. 

—Eso, ya se enterara despues— repito Engin mientras Piril negaba. 

—¿Y que pasa Piril eh? ¿Acaso ahora eres mas amiga de Eda que mia? Si te acuerdas que me conociste a mi primero, y que eres mi amiga hace mas de veinte años no— dijo Serkan con un tono ofendido para ver si asi su amiga se sentia mal al respecto, porque en realidad a el le encataba que Piril y Eda se lleven tan bien. 

—Se muy bien hace cuantos años te conozco Serkan, pero eso no quita que Eda no me caiga demasiado bien como para ver como le ocultas cosas— respondio la pelirroja seria.