𝒀 𝒔𝒊...

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Eda termino su almuerzo contenta porque sus padres hubieran aceptado de buena mano su relación con Serkan pero aún así se preocupo por el arquitecto. Ella ya sabía que su caso sería diferente, lo sabía y lo presentía. Presentía que no sería tan fácil como con sus padres.

Así que decidió ir a su departamento y enviarle un mensaje a Serkan avisando que estaría allí, así el si la necesitaba sabía a donde buscarla.

Él no le contesto durante una media hora despues de haber llegado al departamento por lo que Eda decidió darse un baño en la bañera para despejarse ya que habia decido tomarse la tarde.

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Serkan que había recibido el mensaje de su novia decidió ir a verla. Ya que, aunque en un principio dijo que no le afectaba como lo tomarán sus padres la verdad era que tal vez no le afectaba pero si le molestaba que no lo apoyaran.

Llegó al edificio y entró en el ascensor después de saludar al portero que se encontraba en la entrada.
Al ingresar en el departamento busco a Eda pero no la encontró en ningún lado, incluso la llamo pero no obtuvo respuesta así que camino hacia su habitacion y vio una tenue luz salir del baño por lo que lentamente se dirigió hasta allí, y quedó totalmente embelesado con lo que se encontró.

Una bella hada, entre el agua y la espuma, con su cabello recogido y sus ojos cerrados mostrando asi sus perfectas y largas pestañas.
Serkan podía pasar las siguientes horas mirando ese espectacular paisaje que tenía enfrente de si, incluso se había olvidado de sus molestias por completo.

Y unos minutos después de estarse deleitando con la imagen, vio a Eda empezar a abrir sus ojos y sonreír en cuanto lo vio, ella ni siquiera se asusto.

—¿Hace cuanto tiempo que estas ahí eh?— le pregunto la castaña ensanchando la sonrisa de su novio.

—Hace unos minutos nada mas— le contesto él aun recostado en el marco de la puerta.

—Me estas espiando pervertido— dijo ella haciéndolo reír.

—Estaba admirando a mi hada— le contesto Serkan mientras se acercaba a pasos lentos hacia ella.

—Como un acosador— dijo Eda con una traviesa sonrisa mientras lo veía agacharse para estar a su altura.

— No, como un apasionado amante Eda— contesto Serkan antes de dejar un beso en sus labios.

—Entonces... mi apasionado amante, por que no me acompañas. Puede hacerte lugar— dijo Eda aguantando la risa al decir el nuevo apodo que el propio Serkan se habia dado.

—Uno quiere mantenerse romántico como te gusta y te ríes— se quejó Serkan rodando sus ojos y escuchando la leve risa de Eda de fondo.

—Quiero a mi robot romantico no a Shakespeare— dijo ella mientras se deleitaba viendolo sacarse lentamente la ropa para unirse a ella en la bañera. —O si quieres puedo decirte mi apasionado amante delante de Leyla,  Engin o Murat. Yo no tengo problema— siguió diciendo ella en tanto se corría hacia adelante para dejarle espacio a su robot que la acomodó contra su pecho luego haciéndola sonreír. —Te extrañe— le confeso aunque solo habian pasado unas cuantas horas separados.

—Yo te extrañe aun más bebé— le contesto él antes de dejar un beso en su hombro.

El baño sirvió para relajarlos a ambos, no hablaron de nada.
Solo hablaron en cuanto salieron hacia la habitacion, Eda con una toalla encima y Serkan solo en ropa interior.

—¿Como te fue hoy?— le pregunto él mientras ella caminaba hacia el vestidor para cambiarse.

—Bien, no es como si mis padres decidieran por mi. Pero para tu suerte tanto a Aylin como a Mustafa Yrildim les caes bien. Son puntos a favor considerando por la cara del otro día, que mi abuela no va a aceptarte facilmente— dijo Eda con una sonrisa.