LICANTROPIA La Revelación

Capitulo 24

Voy llegando a mi nueva habitación, arrastrando los pies algo desanimada porque pensé que estaba haciendo nuevos amigos, pero resultó que Dominic es una piedra en mi camino; una que insiste en atravesarse una y otra vez.

Cuando doblo a la izquierda entrando al pasillo en el que está mi puerta, puedo ver a Sheyla caminando de un lado al otro cual bestia enjaulada. No se porque pero mi intuición me dice que está pasando algo.

Apenas me ve viene a mi alcance.

-¿Que le hiciste?-. Me pregunta cuando estoy frente a ella.

Me quedo mirándola con el ceño fruncido.

-¿A quien?-. No se de que habla.

-A Dominic, está... furioso-. Se lleva su mano derecha al pecho, sobre su corazón. -Puedo sentirlo Hilary, puedo sentir su ira desbordada-.

Empiezo a negar con la cabeza.

-Yo no...-. Entonces lo comprendo. Comprendo la actitud de los chicos y lo que me dice Sheyla. -Estaba ayudando a Drake con su auto y Dominic nos vio cundo el chico me dio un beso en la mejilla-. Estoy segura que les debió prohibir fraternizar conmigo y como Drake lo desobedeció se lleno de ira.

-¡¿Que?!-. El grito de Sheyla hace que una licántropa a medio vestir dos puertas más atrás asome su cabeza. -Metete en tus asuntos-. Le dice mi amiga obligándola a regresar al interior de la habitación refunfuñando. -Esto está mal, esto está muy mal-. Murmura Sheyla tomándome del codo y llevándome a mi habitación. -¿Porque demonios te has involucrado con ese chico, Drake-. Me pregunta apenas cierra la puerta a su espalda.

<<¿Que dice?>>.

-Un momento Sheyla, creo que te estas equivocando, yo no me he involucrado con Drake-. Le aclaro.

-¿Entonces porque Dominic está así?-. Abre de más sus ojos llevando ambas manos a su cintura.

-¡Yo que mierda se!-. Levanto la voz porque ya me tienen harta. Dominic esto, Dominic aquello. -¡Que me importa porque está furioso, fue él quien me rechazó, ¿que quería?, ¿que me postrara a sus pies a rogarle?, eso si que no, yo no soy de esas!-. Doy media vuelta y voy a sentarme al borde de la cama, con los codos apoyados en las rodillas, masajeándome en círculos las cienes con los dedos índice y medio de ambas manos.

Todo esto empieza a darme jaqueca.

Siento el colchón hundirse junto a mi.

-¿Que fue que dijiste?-. Me pregunta Sheyla, pero esta vez su tono ha dejado de ser acusatorio para volverse algo enigmático.

-Que no se que mierda le pasa a Dominic, ni que hubiera cometido un pecado, solo estaba...-.

-No, eso no-. Me interrumpe. -¿Dijiste que Dom te rechazó?-.

Mis mejillas empiezan a calentarse. No quería que nadie se enterara de eso, evidentemente no me enorgullece saber que me lance al precipicio sin paracaídas.

-Así fue-. Digo y después suspiro. -El día que fuimos por el disco a mi taller, luego de que Jaz me atacara, Dominic y yo huimos hacia el punto de encuentro en su moto y cuando estábamos solos yo lo besé. Bueno... no lo bese como tal, porque él no hizo nada, así que simplemente me retiré y ya está-. Termino de decir manteniendo mi voz intacta, tratando de conservar el poco orgullo que me queda después de eso.

-Maldito cabeza dura-. Masculla Sheyla evidentemente molesta y se levanta de la cama. -Le dije que no hiciera estupideces y es lo primero que hace-. Empieza a andar en círculos por el escaso espacio entre la cama y la puerta del baño, farfullando cosas ininteligibles.