Me desperté a las 7, la clase iniciaba a las 10 y Emi iba a pasar por mi, entrábamos a cuarto semestre. Me bañe y arreglé y luego cuando él llegó salí. Después de salir de clase fuimos a almorzar y después al trabajo. En la tarde volvimos a mi casa y mis papás lo invitaron a cenar, el aceptó.
Hablamos de la universidad, del trabajo y de los planes del semestre. Entre mis planes estaba arrendar un apartamento y por fin independizarme, el sueldo del trabajo era suficiente para sobrevivir y para ir ahorrando para el próximo semestre, decidí contarselo a mis papás.
-Me parece muy bueno mi niña- mi mamá se levantó y me abrazó.
-Nosotros te vamos a ayudar hasta que acabes la carrera- dijo mi papá.
-Y yo te voy a ayudar a buscar un apartamento- dijo Emilio que estaba emocionado- yo también tengo ese plan, podemos buscar juntos.
-¿Vivir juntos? - dijo mi papá.
-No señor, tal vez cerca, pero juntos hasta el matrimonio- reímos.
-Está bien, me alegra que les esté yendo tan bien- dijo mi papá.
Emilio se despidió y se fue, empezamos a buscar apartamento juntos. Encontramos unos donde éramos prácticamente vecinos, viviríamos uno sobre el otro y nos mudariamos en Octubre.
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Estábamos a puertas del primer corte, Emilio quedó de recogerme como siempre, pero desperté con muchas náuseas y dolor de estómago. Llamé a Emilio porque ese día, no iba a ir a la universidad ni al trabajo, aunque apenas teníamos que sacar unas copias. Emilio quedó de ir a mi casa después de hacerlo, mis papás me dejaron sola y estuve acostada todo el día, hasta que empecé a atar cabos.
El día del bosque, las náuseas, mi período no había llegado desde esa vez y ya iban a ser 5 semanas, no puede ser no puedo estar embarazada en este momento de mi vida. Llamé a Emilio.
-Amor- le dije apenas contestó la llamada.
-Dime mi vida, ya voy para allá- me dijo.- ¿Están tus papás?
-No, pero pasa algo- él se quedó en silencio.
-¿Qué pasó? - su tono cambió a uno de preocupación.
-Tengo un retraso- Emilio se quedó callado- Tú sabes que yo soy muy regular.
-O sea que estás- note que estaba nervioso por su tono de voz-embarazada.
-No, no confirmemos nada- lo detuve- compra una prueba por favor.
-Vale, ya llego- colgó.
A los 15 minutos el tocó el timbre baje a abrirle
-La traje- me pasó una bolsa- me dijeron que es super efectiva.
-Sube- subimos a mi habitación y yo entré al baño e hice lo que decía en las instrucciones. Emilio me hablaba a través de la puerta.
-¿Ya?- preguntaba cada segundo.
-No amor, dice que 3 minutos, vamos 1- le dije y salí del baño con la prueba en la mano.
-Podemos llamarlo Lucas, me gusta ese nombre- empezó a caminar de lado a lado- si es niña se puede llamar Gabriela, ese es muy bonito nombre, sería una niña muy linda-hizo una pausa- ¿Que piensas?.
- Me gusta Gabriela, pero no quiero estar embarazada-deje la prueba sobre la mesa de noche.
-Yo tampoco- me acerqué a él - Bueno, me refiero a que tampoco quiero que estes embarazada, no que yo esté embarazado eso es imposible...- Lo detuve con un beso.- ¿Cómo es que no estas nerviosa?
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Simplemente pasan
Teen FictionEl amor llega cuando menos lo esperas y se va cuando más lo necesitas, pero las cosas buenas o malas que esten destinadas a ser, simplemente pasan.