-Isabella María de todos los ángeles ¿Por qué me estás llamando de un número español?-
-Adivina donde estoy- reí- recogeme que este calor es infernal.
-¿Por qué estás acá?-
-Recogeme y te cuento-Salí del aeropuerto a esperar a que llegaran por mi.
-Te extrañé- corrí abrazarlo.
-Te extrañé más extraña- Aaron y yo nos aferramos en un gran
abrazo.-¿Por qué no avisaste antes?.
-Sorpresa- moví mis manos y reí.
-¿A qué viniste?-
-Voy a decirle todo a Juan Pablo- subimos al auto- le voy a decir que estoy tragada y que me quiero arriesgar con él.
-Eso me alegra mucho, él va a estar muy feliz- sonreí.
-Llévame a un hotel, quiero dormir y bañarme- puse mis manos en mi cara- este viaje es larguísimo.
-Lo sé querida- rió- te vas a quedar con nosotros y le vamos a dar la sorpresa a Paul también.
-Eso- levanté mi pulgar- Los extrañé mucho.
-Nosotros a ti, preciosa-Al llegar al apartamento, me bañé y esperé que Paul llegara del trabajo.
-Hola amor- Yo estaba escondida detrás del mesón de la cocina.
-Hola lindo- Paul besó a Aaron- No sabes como vengo cansado, fue un día larguísimo.
-Te tengo una sorpresa- yo tapaba mi boca para no hacer ruido.
-Dime que me vas a hacer un masaje con final feliz- Aaron soltó una carcajada.
-Pues puede hacerte el masaje y yo vengo más rato- salí de mi escondite y me reí.
-¡Isabella!- nos abrazamos- ¿Qué haces acá?.
-Vine a visitarlos- sonreí y él entrecerró sus ojos.
-¿No tiene nada que ver que Juan Pablo esté acá?-
-Para nada, extraño- levanté los hombros.
-Es una mentirosa- Aaron rió- vino a decirle a Juan Pablo que le gusta, ¡Por fin!- levantó sus manos hacía el cielo.
-Eso me alegra demasiado- Paul me alzó- ¡Por fin!.
-Estoy nerviosa- reí- No hablamos desde el jueves.
-¿Por qué?- nos sentamos.
-Lo he llamado y no me contesta- suspiré- ¿Creen que sea mala idea?.
-¡Claro que no!- Dijo Paul.-Vamos a hablar esto muy seriamente.
-Pero esperen- Aaron corrió por una botella de vino- Con este calor es necesario.
-¡Eres un borracho!- me reí.
-Mira isa- Paul empezó a hablar- para que tu puedas expresar tus sentimientos, debes tenerlos claros al 100%- asentí- Cuéntame de Emilio.
-¿En serio Paul?- él era psicólogo y uno muy bueno.-En serio- sonrió- esto va a ser una sesión gratis y con acompañante- Aaron levantó su copa.
-Emilio fue un gran amor- sonreí- con él experimenté algo que nunca había experimentado- reí ante mi redundancia- No entenderían lo que a mi ese hombre me hacía sentir, con él no me sentía en la tierra ¿Saben?, Como que siempre andaba en las nubes y viendo la vida color de rosa- suspiré- El día que lo perdí yo sentí que perdí algo dentro de mi, que el amor no era para mí y que ese sentimiento no lo iba a experimentar nunca jamás- me enderecé.
-y luego ¿Qué pasó?-
-Pues llegó Juan Pablo- sonreí- él man poco a poco se metió en mi corazón, con sus actitudes y su forma tan especial de querer.
-¿Dirías que lo amas?- me quedé pensando- replanteo la pregunta, ¿Qué sientes cuando estás con él?.
-Me siento más en la tierra, o sea, siento calma cuando estoy con él. Sé donde estoy y donde quiero estar.- tomé de mi vino.
-¿Qué te detiene para estar con él?-
-Emilio- lo miré - me da miedo olvidarlo y volver a amar.
-¿Miedo?- asentí.- el miedo es un sentimiento traicionero preciosa- me miró- ¿Por qué te da miedo amar?.
-Por que me da miedo perderlo a él también- Paul asintió- me da miedo que en el momento donde yo esté más enamorada, donde yo esté en ese punto en el que no veo nada si no está él, se vaya y yo me quede de nuevo en ese callejón sin salida.
ESTÁS LEYENDO
Simplemente pasan
Ficção AdolescenteEl amor llega cuando menos lo esperas y se va cuando más lo necesitas, pero las cosas buenas o malas que esten destinadas a ser, simplemente pasan.