El rey de los mestizos

En busca del tiempo perdido

El dios primordial se había ido, dejando el lugar solo a los nueve semidioses sobreviviente, de entre ellos estaba Percy herido por un ataque que Erebus le había lanzado. Lamentablemente habían perdido a dos compañeros. Charles Bekendorf y Silena Boregard.

Luke fue el encargado de cargar con los restos del hijo de Hefesto, mientras que Travis fue el que cargó a Silena. Percy tuvo que ser ayudado por Annabeth y Clarisse podía mantenerse de pie a duras penas.

Percy estaba tan debilitado que casi no podía mantenerse consciente y mucho menos mantenerse concentrado en hacer un portal. En ese momento Luke fue el que había tomado el mando por el momento ya que Percy no podía racionar bien.

El hijo de Hermes indicó que saldrían a la calle para comprobar que Erebus había cumplido con su promesa. Hazel siguió liderando el camino en el túnel mientras que Luke apretaba su agarre en su espada.

En muy poco tiempo volvieron a lo que era el ayuntamiento y cuando salieron vieron que las sombras no eran tan fuertes como antes, eran las mismas sombras que podías encontrar por las noches cerradas. Luke mandó a algunos a revisar el edificio y vieron que las sombras que estaban en las cabezas de los cadáveres ya no estaban, bueno, ni si quiera estaban los cuerpos sin vida, puede que Erebus haya borrado todo lo que había marcado su paso en esta isla.

Tras asegurarse de que no les iban a atacar dejaron que los que estaban heridos descansaran un poco y Luke hizo algo que no le gustaba hacer, pedirle un favor a su padre. A Luke no le gustaba pedir favores en general, eso significaría que tenía que hacer algo por la otra persona y que no podía negarse.

Luke rompió un una ventana y con una esquirla y su linterna creó un arcoiris.

- A Hermes Trimegistus, en el Olimpo. - Dijo Luke mientras lanzaba un drackma al arcoiris. - Este esperó unos segundos y cuando por fin tuvo respuesta, el dios apareció con ropa tradicional griega y un poco serio.

- Luke, menos mal que llamas. - Dijo este preocupado. - Os perdimos en el momento en el que os metisteis por el túnel, ¿Qué ha pasado?

- Hemos perdido a dos personas. - Dijo este muy triste y haciendo que Hermes se pusiera más serio. - Fueron Silena y Bekendorf, de Afrodita y Hefesto, aparte de que Percy ha resultado herido y no podemos volver, ¿podrías mandarnos de vuelta al campamento base?, a todos, por favor.

Hermes asintió y cerró el mensaje de Iris. Poco después un haz de luz que los llevó de vuelta a todos al campamento base en el que se habían establecido. Nada más llegar fueron recibidos por algunos semidioses que seguía allí y Gwen.

Estos preguntaron por lo que había sucedido y por qué tenían dos fallecidos. Lo primero que hizo Luke cuando llegó fue indicar a Annabeth que llevara a Percy y Clarisse a un lugar donde pudieran descansar con los hijos de Apolo mientras que otros hacían piras funerarias para los dos caídos.

Unos minutos más tarde se hizo la ceremonia donde todos los hijos de Hefestos dejaron armas alrededor de la pira de Bekendorf y los hijos de Afrodita, entre lagrimas, dejaron cosas como flores u adornos que a Silena le gustaban. Cuando Terminaron Gwen fue a pedir explicaciones.

Al final, Gwen le acompañó a la sala de reuniones en la que estarían ellos solos para poder hablar con tranquilidad.

- De acuerdo, ya habéis hecho todo lo que se tenía que hacer. - Dijo la pretora. - Ahora quiero saber todo lo que habéis hecho.

- Básicamente, nada. - Dijo este llamando mucho la atención de la pretora. - Llegamos a Lesbos y allí fuimos a su ayuntamiento para saber si encontrábamos algo para localizar a Erebus. Allí nos encontramos con unos cuantos cuerpos casi sin musculatura ni nada, por lo que habíamos visto les servía de alimento a las sombras. - Explicó este mientras recordaba lo que había visto y lo que le había descrito Bekendorf. - Después de eso, Hazel, notó que había algo debajo de nosotros por lo que creó un túnel, allí pudimos encontrar a Clarisse y a Erebus con unas cuantas sombras. Luchamos y conseguimos deshacernos de las sombras, pero cometimos un grabe error. - Dijo este muy triste. - Pensábamos que aunque Erebus era un dios primordial estaba solo y nosotros éramos once, pero en un solo segundo mató a dos de nosotros y casi me mata a mí. Percy le intentó atacar, pero Erebus le lanzó un ataque o algo y le dejó como has visto. Ni si quiera se esforzó para eso, no sé que vamos a hacer.