En la mira

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Dimitri

Silencio, era todo lo que se oía, suspiré y bajé de la camioneta siguiendo a Norman, Ruzzo lo había designado conmigo para supervisar que todo saliera bien,era un tipo mayor de unos 30 años y no hacía preguntas a diferencia de los demás quienes siempre me preguntaban porque hacia esto,nos detuvimos frente a un contenedor, he de admitir que estaba nervioso y temblando, el viento era helado y a lo lejos de podía ver la oscuridad en el mar, frente a nosotros un par de tipos se acercaron, uno era calvo con una enorme cicatriz en su ojo, y el otro rubio con el cuerpo lleno de tatuajes, portaban armas y al verlas sentí escalofríos de recordar al viejo ese apuntándome.

-¿Y bien?¿Dónde está el cargamento?-preguntó Norman impaciente, Ruzzo había sido específico, esto no debía tardar.

-Calma, estamos cansados, casi nos descubren intentando camuflar este contenedor con los demás-dijo el tatuado-¿Quien es este?-preguntó mirándome mientras colocaba un cigarrillo en sus labios.

-Uno nuevo, a partir de ahora vendrá conmigo a recoger el pedido-contestó Norman irritado-ahora abre el contenedor-ordenó, el tipo le hizo una señal al otro quien procedió a abrirlo, dentro había mercadería común y corriente que viajaba desde el otro lado del mundo hasta aquí, pero camuflada entre los paquetes estaban los sobres de cocaína, los metieron en maletas y nos lo dieron.

-¡un placer hacer negocios con ustedes!-Gritó el calvo viéndonos regresar hacia la camioneta-¡Y díganle a Ruzzo que no demore con la paga!-empacamos todo debajo de los asientos de la camioneta y partimos, al llegar al lugar uno de los hombres de Ruzzo nos recibió las maletas, posteriormente recibimos el mensaje de que el dinero estaría listo en 3 días y ante esto sentí un enorme alivio, eran las 3 de la mañana así que no esperé más y fui a casa, debía avanzar las malditas tareas que el viejo ese me dejaba, faltaba poco para acabar el año e irme de este lugar, pero no podría hacerlo si me descuidaba de mis estudios, si lograba salir de esta Zoe estaría bien para cuando me vaya y eso era lo importante...lo más importante para mí. Estacioné mi auto en ingresé a la casa, todo estaba a oscuras, supongo que ella debía estar dormida así que entré sin hacer ruido y subí las escaleras pero me detuve justo en medio al oír su voz.

-¿Dónde estabas?-preguntó, volteé y reconocí su silueta sentada sobre el sofá en la oscuridad, encendió la luz dejándose ver, se veía aterrada, nerviosa y temblando como si acabara de ver un fantasma, me acerqué un par de pasos lentamente, ante lo cual se sobresaltó y abrazó sus piernas haciéndose bolita.

-¿Que ha pasado?-pregunté viendo lo asustada que se encontraba, con su mano temblorosa señaló sobre la pequeña mesa frente a ella un sobre manila, lo tomé entre mis manos y lo abrí, mis ojos se abrieron y miré su rostro y luego el contenido del sobre, eran fotos de ella, caminando de regreso a la escuela, a veces sola, a veces acompañada del rubio, fotos de ella corriendo en el campo deportivo escolar durante el curso de deportes, el desgraciado la había estado vigilando durante toda la semana, no solo me seguía a mí, sino a ella, en ese instante toda la rabia y enojo que sentía hacia él también era hacia mi por no prevenir esto. Mi llegada a esta casa la había expuesto ante él y el mensaje era claro, si yo no le pagaba esa suma de dinero le haría daño a Zoe-¿Dónde estaba?-pregunté frunciendo el ceño, temblorosa señaló hacia la puerta, habían dejado el sobre en la entrada, querían que ella lo encontrara, querían asustarla y eso era algo que no podía permitir, suspiré cansado y sentí un mareo, la vista se me nubló y me comenzó a doler la cabeza, me toqué la sien tratando de atenuar el dolor que sentía, estaba en mi límite, no comía bien, no dormía bien y mi vida se basaba en siempre estar a la expectativa por si alguien me seguía en las calles, suspiré.

-¿Qué está pasando?-preguntó, abrí los ojos para mirarla.

-necesito que tengas cuidado y que el rubio te traiga a casa-dije ignorando su pregunta- nunca andes sola-ordené

HeartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora