Narra Jess.
Después del ''casi beso'' con Ryan, las cosas han estado muy bien entre nosotros. Y ha habido más ''casi besos'' también. Pero siempre llegaba algo o alguien a interrumpir el momento. Estoy deseando con todas mis fuerzas besarlo cada vez que lo veo, pero tengo que controlar mis impulsos porque él y yo no somos nada. No somos nada, duele hasta decirlo. Porque yo si quiero que seamos algo más y creo que él también quiere, o no sé. A lo mejor soy yo la única que cree eso, espero que no. Ahora mismo estoy en la plaza que hay junto al instituto esperando a Tyler. ¡Este chico tarda siempre mucho! ¡Siempre me quedo esperándole! En realidad es que soy una impaciente porque dudo llevar aquí más de tres minutos. Pero bueno... empecé a darle patadas a las piedrecitas que había a mi alrededor cuando me dio por volver a levantar la cabeza y el gemelito ya estaba aquí mirándome.
-¿Qué haces? -Me preguntó.
-Pegándole patadas a las piedras, ¿no me ves?
-¿Tan aburrida estás?
-Un poco. Es que tardas mucho.
-Pero si habíamos quedado a las cuatro.
-¿Y qué hora es?
-Menos dos minutos. -Me sonrió ampliamente, él había ganado esta batalla.
-Bueno, como sea. ¿Me compras un helado?
-¿No tienes dinero?
-Claro que tengo, pero cuando te invitan el helado sabe hasta mejor. -Ambos nos reímos.
-Ya, pero como resulta que yo, Tyler, alias el mejor del mundo mundial, no es tonto, pues no te va a comprar un helado.
-¿No le vas a comprar un helado a tu mejor amiga?
-¿Mi mejor amiga? ¿Dónde? -Miró para sus lados y le pegué un golpe en el hombro. -Creo que mi mejor amiga tiene demasiada fuerza en la mano derecha.
-¿Crees? Si quieres te lo confirmo.
-No, no, no... estoy bien, gracias. -Jess gana esta ronda señoras y señores.
-Bueno, me invites o no... ¿podemos ir a por un helado?
-Está bien...
-¡Lo dices como si no te gustasen los helados!
-¡Claro que me gustan los helados!
-¡Pues invítame a uno!
-¡No te pienso invitar!
-¡Oye! ¿Queréis bajar el volumen? Se os escucha desde tres calles más abajo. -Ryan de repente aparece a nuestro lado. -Y Tyler, cuando una señorita te pide que la invites a un helado la invitas, es más, eso debería salir de ti, no tendría que decírtelo ella.
Cuando el Ryan romántico sale a flote juro que podría derretirme aquí mismo. Me encanta cuando es así de dulce conmigo. Si fuese un dibujito animado... seguro que tendría corazones en lugar de ojos.
-Bueno, Tyler, ¿qué tal si vas a por los helados? -Dijo Ryan.
-¿Yo solo?
-¿Y por qué no?
-Pues porque... -Se calló un segundo y analizó la cara de su hermano. -Está bien, yo voy. De vainilla, ¿no Jess?
-Sí.
-Ryan, ¿tú quieres algo?
-Quiero algo, pero no es precisamente un helado. -Me miraba fijamente y las piernas me temblaban, es muy directo, pero a mi me gusta así.
-Bueno... pues ahora vuelvo. -Tyler se alejó y Ryan me agarró de la mano y me llevó hasta uno de los bancos que había en la plaza, nos sentamos y él pasó su brazo por mis hombros.
-Oye Jess...
-¿Sí? -Estaba nerviosa, muy nerviosa.
-¿Mañana tienes algo que hacer? Quiero decir... ¿tienes planes ya hechos o algo? -Él estaba nervioso también y eso me parecía adorable.
-No, no tengo nada que hacer...
-¿Te apetecería venir conmigo a comer?
-No me queda otra, es decir, te debo una cita, ¿no? -Dije bromeando ya que estaba encantada de ir a comer con Ryan.
-Tienes razón, vendrás sí o sí. No puedes negarte. -Me siguió el juego y ambos empezamos a reírnos.
-Lo voy a pasar fatal. ¿Qué me pondrás para comer? ¡Oh no, seguro que me das gusanos!
-Probablemente. -Me guiñó un ojo y me sonrojé por lo que inmediatamente volví la cara hacia el otro lado. -Me encanta cuando te sonrojas... -Dijo en mi oído y sentí que me moriría ahí mismo.
-Cállate. -Ryan se reía.
-Por cierto, sabía que me dirías algo así cuando te pidiese que vinieras a comer conmigo, así que para que sea algo más serio toma esto... -Me dio un sobre y lo abrí inmediatamente para ver su contenido. Había una hoja en el que ponía la hora a la que vendría a buscarme, y alguna que otra cosa más. No sé por qué me pareció un detalle bonito todo lo que había escrito dentro y al mover el sobre de dentro salió un papel en el que había escrito algo para mi. Seguro que en ese momento volvía a estar roja. ¿Por qué tiene que ser tan jodidamente adorable?
-Es muy bonito. -Me abracé a él.
-Es que yo puedo ser un romántico cuando me lo propongo.
-Ya veo... -Me reí bajito.
-O será que tú sacas mi lado más cursi... -Ahora era Ryan el que se reía y me separé para verlo mejor.
-Es normal, soy genial. -Dije agitando mi pelo.
-Te acabas de cargar un momentazo Jess. -Dijo con fingida indignación.
-Oh vamos, no ha sido mi culpa.
-¿Quién ha sido la que se ha vuelto una creída de repente cargándose esta atmósfera tan romántica?
-Oh venga ya, seguro que tú te lo hubieses cargado tarde o temprano.
-¡Pero no tan temprano! -Me divertía estar así con Ryan.
-Bueno listo, ¿entonces que hubieses hecho tú para mejorar el ''momentazo'' según tú?
-Hubiese hecho algo realmente increíble.
-Sorpréndeme.
-Si es lo que quieres...
Se empezó a acercar aún más a mi y ya sabía por donde terminaría esto. Solo queda un simple milímetro para que podamos besarnos y... ¡a qué no adivinais lo que pasa ahora! ¡Exacto! ¡Tyler nos está mirando con las cejas alzadas y los helados en ambas manos. Ryan y yo nos separamos de golpe, otra vez, y nos separamos dejando a Tyler en medio de los dos. ¡No puede ser que siempre tenga que llegar alguien a estropearnos el momento! ¡De verdad que no!
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¡Hola! Siento haber borrado el capítulo y haberlo vuelto a subir, se me olvidó dejar la nota en el capítulo jajaja. Culpa mía. Bueno, hace tiempo que no recibo comentarios y quiero saber que os está pareciendo la novela, ¡por favor, comentad, necesito vuestra opinión! Y bueno, la próxima subida llegará con dos capitulos, que serán 'La cita' de Ryan y Jess, pero claro, se merecen un capítulo para narrar cada uno, ¿no? ¡Saludos y gracias por leer!
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¡Piérdete! -EDITANDO
HumorJessica Scott es una chica que está acostumbrada a pasar el día sola y tranquila. La mayoría de las veces se siente mal porque nadie la toma en cuenta, pero todo cambia cuando dos chicos llegan a cambiar su vida, uno de ellos la va a seguir a todas...