Capítulo 34.- Nada puede ir peor.

3K 221 24
                                    

Narra Jess.


Estoy tumbada boca arriba en mi cama, evitando que miles de lágrimas vuelvan a salir de mis ojos. Ya he llorado demasiado y no vale la pena, al menos ya no lo vale.


Mi hermano ha tratado de sacarme de la habitación para que salgamos a dar una vuelta, pero yo me he negado y él está preocupado porque no sabe qué me pasa. Le he contado que he tenido problemas con Ryan y le he dicho que lo deje estar.


Ariana y Austin vinieron a pedirme perdón, sé que ambos se van a marchar, que van a volver al sitio donde vivían antes, y me alegro por ellos. Quiero decir, si aquí no eran felices, tienen que ir a un lugar donde sí lo sean. Y sé que allí ambos tendrán la vida que siempre han tenido. Eso me alegra.


También me alegró oír que querían ayudarme con Ryan, querían hablar con él para explicarle lo que había estado pasando en este tiempo, pero les dije que no, preferí que no le dijeran nada.


¿Por qué?


Primero porque si Ryan ve a Austin probablemente le arranque la cabeza. Palabras suyas, no mías. Y porque si Ryan no se ha preocupado por mi en estos dos días, ¿qué me hace pensar que después de que le cuenten la verdad el querrá volver conmigo? ¡Él ha desconfiado de mi! Y eso me duele en el alma.


- Jess... -Mi hermano pega en la puerta cuidadosamente.

- Pasa. -Le digo mientras me siento en la cama.

- ¿Cómo estás? -Se sienta a mi lado en la cama.

- Mejor.

- ¿Me contarás qué ha pasado?

- Es complicado.

- Está bien...


Notaba a mi hermano nervioso y eso me estaba preocupando.


- ¿Qué te pasa?

- ¿A mi? Nada.

- ¿Nada?

- Nada.

- Vale... -Digo sin terminar de fiarme.

- ¿Sales conmigo para comer?

- No me apetece.

- Tienes que comer.

- Digo que no me apetece salir para comer, podemos comer aquí algo.

- A mi no me apetece cocinar.

- Podemos pedir algo.

- ¿Con qué dinero?

- Con el tuyo.

- ¡Oye!

- ¿Qué? Eres el mayor.

- ¿Y eso qué importa?

- Importa mucho. -Le digo con una sonrisa burlona y él empieza a reírse.

- Vale, vale... Tú ganas. ¿Qué podemos pedir?

- ¿Qué te apetece?

- Pizza.

- ¡No quiero pizza!

- ¿Qué te apetece a ti?

- Comida china.

- Venga ya, yo no quiero.

¡Piérdete! -EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora