Indeleble

Capitulo dos

Keyra Lombardi

24 años

15 de Mayo del 2018

Actualidad

El amor no era para siempre eso lo he aprendido cuando mi primer amor se fue a vivir a otro país para ya no volver, y han pasado bastantes años desde aquel adiós que me quito la mitad de mi vida, y dejo una herida que a pesar que dejo de sangrar sigue abierta, y de alguna manera me siento una pobre ilusa de tan solo pensarlo.

Porque se supone que las heridas la va cerrando el tiempo, pero puedo decir que aquello no es cierto, no cuando solo quieres ignorar el sentimiento y fingir que ya has superado a una persona que te dijo que siguieras con tu vida, porque ya no iba a volver.

Así que, aquí esta Keyra Lombardi de veinticuatro años siguiendo con su vida, porque no tuvo de otra, ya que la vida no se iba a detener por una adolescente con el corazón roto, claramente avanzar era la mejor decisión para todos y para mí.

Y he conseguido novio, no es un logro, jamás lo será, pero de esta manera podría demostrarle al mundo que mi ex novio es tema superado y que no me jodan con preguntas que no me importan y que me duelen. ¿Soy inmadura? Claro que lo soy, en este aspecto aclaro, pero es que como les explico que Zairo no es tema superado, y que nunca lo será.

Fue mi primer amor.

¿Los primeros amores se superan en algún punto?

Díganme que sí.

Niego con la cabeza para que aquellos pensamientos se vayan, debería estar pensando en que ponerme para la cita con mi novio, las cosas no han andado bien, pero joder, ¿Cómo salir de esto? No tengo el valor para decirle a mis amigos por lo que estoy pasando, porque me lo advirtieron miles de veces.

Yo solo quería encontrar a alguien, y amarlo como lo hice en el pasado, pero a Aibek yo lo quiero más no lo amo, y no creo que en un punto de mi vida llegue a amarlo con la intensidad que me hubiese gustado en mi pasado, porque ya no quiero amarlo.

¿Qué quería? No lo tenía claro en este momento, pero estar cerca de la persona que dice ser mi novio no está en mis planes.

Me he puesto un vestido blanco con tirante cruzados en la espalda, y escote recto, lo cual hace que mis pechos se sientan apretados, era suelto de la parte de abajo, ignoro la llamada de la persona que no quería escuchar, ni mucho menos ver, suelto un suspiro cansador.

Ahora solo debía decidir una cosa, era él o yo, y esta vez no quería perderme por un hombre, no lo haría, solamente tenía que encontrar el momento perfecto para mandar la relación al demonio, en este momento me siento valiente, y poderosa.

Medio sonreí al verme al espejo, era hermosa en todos los ángulos que me vieran, y mi cuerpo ha cambiado este tiempo, ya no era una persona de diecisiete años, las estrías fueron apareciendo de a poco, no me molestan son preciosas, soy una persona que recibe más de un elogio, y que sabe lo preciosa que es, algunas manchas de acné se quedaron en mi pecho, pero bueno, son detalles.