A Prueba

XLIV. Te amo

Son las cinco de la tarde y acabamos de llegar al hospital. Los chicos todavía no salen de clases, este semestre he ido un día, el que llevé el justificativo de la ausencia de Anthony.

Ian me dejó pasar primero, dijo que iba a hablar con los policías antes, para preguntarles sobre cómo va el caso. Antes de venir conversamos acerca de lo que encontramos la madrugada anterior, le dije que debemos guardar eso bien, sin siquiera contarle a los chicos, pues siento que es algo que Tony debe hablar, que bueno que Ian estuvo de acuerdo de lo contrario no hubiera podido hacer nada para detenerlo.

Y para mi suerte... Mis padres llegaron esta mañana a la ciudad. He evitado sus llamadas y solo les he escrito textos, no puedo hablar con ellos sabiendo su más grande secreto y sin poder decirles. Les dije que me quedé en casa de Emma —Hablé con ella mientras les escribía— y que habíamos salido a correr, les dije que los veía en la tarde y necesito encontrar pronto una excusa para no hacerlo.

Entré en silencio a la habitación de Tony, es irónico que siempre que entre haga lo mismo, como si le estuviera cuidando el no despertar. Su habitación es tan cálida.

Respiré profundo al verlo al igual que lo que lleva de mes, me parece que me acostumbré, y está mal. Uno nunca debe acostumbrarse a la insuficiencia, mucho menos cuando se trata de una persona.

—Hola —suspiré observando aquel cuerpo en la cama—. Tony, lo hicimos. Ian y yo conseguimos las pruebas. Entonces Melissa y Félix, todo tomó sentido cuando lo supe. Me lo dijo Mark, sí, fui a visitarlo, sé que te dije que nunca lo haría, pero yo sabía que me daría algo y me lo dijo todo. También me dijo que es posible que muera y para ser sincera no quiero que lo haga. Sin embargo, si llega a pasar sabemos quién fue —Comencé a caminar de un lado al otro al frente de la cama—. Pero Tony, no entiendo cómo ni porqué, pero me siento en paz, por ti y por mí, cumpliste uno de tus propósitos, encontraste quien asesinó a tus padres, en ningún momento dudaste en que había sido solo un accidente, siempre decías «Los accidentes no pasan, son causados» Tenías razón, lamentable fue que los causantes fueron mis padres. Habiendo millones de personas estuviste todo el tiempo cerca de la hija de quienes te arruinaron la vida.

Me di la vuelta para buscar mi celular, ya vine a hacer lo que debía, no tengo más nada, pero no quiero marcharme.

Entonces se me ocurrió colocar música, una sola. Una canción insignificante para muchos, pero bastante significativa para mí y mucho más para Tony.

Mientras la canción comienza, el recuerdo de la primera vez que la cantó invade mis pensamientos, también fue la primera vez que lo escuché cantar.

—Lo hago solo cuando conduzco —responde él al segundo—. Si quieres te colocas los audífonos, para que no me escuches.

—Para nada —Lo miré—, quiero seguir escuchando al nuevo cantante de San Francisco. —digo sarcásticamente.

Después de escucharme decir esa frase carcajeamos juntos.

It's you It's always you
Met a lot of people. But nobody feels like you
So please, don't break my heart
Don't tear me apart I know how it starts
Trust me I've been broken before
Don't break me again. I am delicate
Please, don't break my heart
Trust me I've been broken before
No, I'm not the best at choosing lovers
We both know my past speaks for itself
If you don't think that we're right for each other
Then please don't let history repeat itself.

He cantado ese último pedazo de la canción en voz alta, imaginándome a Tony a mi lado cantando su canción favorita. 

Duele tanto hacer esto, mi alma se quema con cada recuerdo de él en que se veía feliz. Pero más me duele el darme cuenta de que nada se repetirá y cabe una posibilidad que no pasé algo similar en el futuro.