Kim Taehyung es un lindo omega muy peculiar para la generación a la que pertenece, ya que aun cree en el amor puro y verdadero. Sueña con ser cortejado de manera romántica como lo fue su padre omega por su madre Alfa. Sin embargo, todo parece ser un...
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— Desátame mamá. Tengo mucho calor.
— Mi vida, ya pronto pasará. — dijo acariciando y acomodando su cabello mojado por el sudor.
— No entiendes. Esto es insoportable. Literal me estoy quemando en carne viva. Haz algo.
— Bebé. No puedo hacer nada — dijo al borde del llanto.
— Mamá ayúdame — dijo en un gemido lastimero. El corazón de Sohee se compungió de ver a su hijo en ese estado. — lo siento mi amor — dijo besando su frente y saliendo rápido de la habitación para derramarse en llanto fuera de la vista de su hijo. — no soporto verlo así — dijo a su esposo a quien encontró en su camino. Este la abrazo para confortarla.
— Ya se le pasara.
— No se. Esto es diferente. Está sufriendo mucho.
— Por mucho que sufra. Es natural. Es su celo. Esta enamorado. Solo debe soportarlo un día más.
— Eso espero porque yo no creo soportar un día más verlo así.
Seokjin comenzó a aullar con gemidos de tristeza y ambos padres se miraron preocupados. Corrieron a la habitación y aunque trataron de calmarlo no lo lograban. Los aullidos aumentaban y asustados llamaron al doctor de inmediato.
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— Esta sudando mucho. — decía su padre mientras secaba su sudor. Taehyung se removía como si tuviera una pesadilla.
— Despiértalo. Necesitamos saber que le sucede.
— Bebé. Mi amor, despierta. — dijo su padre sacudiéndolo un poco.
— Jinnie — gemía en desesperación. Sunhee y Hyunjae se miraron algo preocupados. Sobre todo Sunhee sabía que aquello solo podía significar que el lobo de Seokjin estaba llamando a su omega.
— ¿crees que sea posible?
— Es probable. Debo llamar para cerciorarme de su estado. Cuídalo. Ya vengo.
Hyungjae asintió y siguió limpiando el sudor de su hijo.
— Papito — le llamo Taehyung al entreabrir sus ojos y darse cuenta de que estaba con él.