21

705 138 93
                                    

— ¿72 horas? ¿Cómo se supone que voy a esperar todo eso?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¿72 horas? ¿Cómo se supone que voy a esperar todo eso?

Lo siento señora. Es el tiempo estipulado para considerarlo un verdadero extravío.

— Claro como no es su hijo — exclamo desesperada Sohee. Sin embargo, se percato que en ese mismo instante su hijo mayor llegaba a casa. — olvídelo. Muchas gracias — colgó. — Jinnie ¿pero que te paso? — pregunto preocupada mientras se acercaba.

Tanto Sohee como Namjoon observaban a Seokjin asombrados de su apariencia, ya que estaba algo despeinado con su ropa mugrosa y parte de ella estaba rasgada.

— Nada. Solo me caí.

— Pero ¿Cómo? Dime la verdad — exclamo angustiada. — ¿acaso te metiste en alguna pelea?

Seokjin recordó como aquella loca mujer lo alcanzo saliendo de la nada con una escoba a darle de escobazos. Suerte que pudo correr más rápido que ella.

— Para nada. No te preocupes mamá. Ya estoy en casa.

— Que bonita respuesta. Me tienes de un hilo y vienes y apareces todo maltrecho. ¿Qué quieres que piense? Además, estas no son horas de llegar jovencito. ¿Dónde estabas?

— Estaba con unos amigos mamá.

— Mira Seokjin, si ahora mismo no me dices donde estabas...

— Ay mujer ¿Qué pasa? — pregunto el señor Kim somnoliento bajando las escaleras.

Sohee empujo a su hijo hacia el fondo del pasillo para que su padre no lo viera en ese estado y de paso se pusiera de mal humor.

— Nada cariño. Les llamaba la atención a los chicos para que se acostaran de una buena vez.

— Si, ya es hora. ¿Por qué no lo han hecho? Tengo que madrugar y tus alaridos casi me dan un infarto.

— No seas exagerado. Ve a dormir. Ya casi te alcanzo.

Cuando el señor Kim volvió a subir hacia su habitación, Namjoon le siguió. Mientras que Sohee tomo a Seokjin de la mano y lo llevo brusco hacia uno de los baños de la primera planta. De igual manera, pidió a uno de sus empleados, que aun estaban despiertos para lo que ella necesitara, una pijama de su hijo.

— Esto es el colmo Seokjin. — dijo limpiando su rostro que tenia tierra. — me matas de angustia y lo único que haces es guardar silencio. — Seokjin rodo los ojos. — Gracias Denise — dijo a la empleada que le entrego la pijama junto a unas toallas y jabones.

Sohee comenzó a desabotonarlo y Seokjin la detuvo.

— Mamá ¿Qué haces? — pregunto espantado.

— Voy a bañarte.

— Tengo 18. — dijo apartándola.

— Si no me dices ahora mismo voy a bañarte.

War of Hormone - Jintae OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora