CAPÍTULO 31 "Lastima y duele mucho..."

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Lo obligué a bajar su cabeza hasta mis pantalones y le restregaba en la cara el paquete que estaba duro. Bright me quita el cinturón y me baja los pantalones, y luego, con su boca, me quita el bóxer, exponiendo mí dura y maciza carne. Y fue ahí donde gemí...su boca me estaba devorando. Su lengua caliente...

No pude aguantar más. La sangre me hervía, sentía mucho calor por dentro, y necesitaba desahogarme, y Brigth estaba dispuesto. De un momento a otro, le fui bajando el pantalón mientras lo volteaba boca abajo en la cama. Su piel me quemaba y me trastornaba, y Brigth lo sabía.

Pronto sus nalgas desnudas estaban expuestas para mi y sin pensarlo me dirigí a ellas, y metí mi lengua.

BRIGHT:
Ohhhh

Una colita en celo al que lamía y lamía. Lo devoraba con fervor. Seguía sin entender que me estaba pasando. Jamás me hubiera imaginado estar así y menos con Brigth, al que no sentía nada por él más que un cariño de hermano.

Mientras la punta de mi lengua entraba y salía de aquella cuevita caliente, yo me dispuse a quitarme los pantalones. Mi lujuria me dominaba, y por más que me quería entender, el hecho es que no dejaba de disfrutarlo.

La punta de mi vergga se apuntó en la entrada ensalivada de Bright, quien en un movimiento se hizo atrás para pegarse a mí. Sus manos abrió esas nalgas para yo poder estar en medio. Mi punta, que estaba escurriendo precum no quiso esperar más, y entré.

PREE:
Ahhhh

BRIGHT:
Ohhhh, que caliente. Me vas a partir en dos, Pree

Le mordí la oreja, y le susurré.

PREE:
Es lo que quieres...te voy a partir en dos.

BRIGHT:
Ohh, si...hazme lo que quieras.

Y empecé las embestidas lentamente, pero iba en aumento hasta acelerar a ritmo casi infernal. No lograba detenerme, sentía un placer divino el estar perforando a Bright, quien gozaba como una putta.

BRIGHT:

Más, dame más.

Seguía cogiéndolo casi que sin piedad, y luego, lo voy volteando. Nos miramos, y él me besó. Succionaba esos labios mientras le abría las piernas de un lado a otro, y volví a meterme, pero con más fuerza.

 Succionaba esos labios mientras le abría las piernas de un lado a otro, y volví a meterme, pero con más fuerza

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BRIGHT:
¡¡Ahhhh!!

PREE:
CALLATE

Le dije tapándole la boca con mis manos. Después, le mordía los labios, quería que sufriera...


PREE:
¿Te gusta? ¿Dime te gusta?

BRIGHT:
Si, si, Pree, sígueme castigandooo...¡¡Ohhhh!!

Y mientras seguía metiendo y sacando mi verrga dentro de ese apretado hoyito, me apareció una imagen que me quedé inmóvil: era la cara de Third... estaba confundido. Pero es que... hasta hace unos segundos pensé que era Bright.

Sentí las manos en mis nalgas que me empujaban para seguir enterrándolo. No comprendía bien. Estaba muy caliente, y ese hoyito era mi delirio. Preferí pensar que era Third, y fui lentamente. Primero la punta, y luego lo demás, sin lastimar. A Third quería hacerle el amor, quiera que fuese mío lo más delicado posible.

PREE:
Ohh Third...te amo.

Y esa imagen de Third me contestaba:

BRIGHT:
Te amo, Pree... haz de mi lo que quiera.

Si fuera Brigth, quizás sería salvajemente, porque Bright podría despertarme una locura de lujuria, pero Third...Third despertaba el amor en mí.

El rostro de Third desaparece, y en su lugar volvió ese cara del hijo de Boss, más carnal y apetitosa. Con él no había piedad. Y fue que le mordí un pezón.

Mi ritmo fue acelerando cada vez más rápido, entraba y salía, rozaba y destrozaba a Brigth, estaba en un frenesí de locura sexual que no podía comprender de donde me salía, pero no me importaba mucho porque ante todo lo disfrutaba con culpa. Y de pronto... Bright lanzó sus chorros de leche que salpicó su rostro. Eso me calentó y me hizo perder el control del morbo, porque restregué mi cara con la de él.

Bright apretó más y con eso mi verrga se hinchó y no aguantó más... fui expulsando mi propia leche en el interior de Brigth.

COMO YO...NADIE TE HA AMADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora