CAPITULO 46: Pasado

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Iván

Abro los ojos debido al calor que abraza mi cuerpo. 

Veo a Anni abrazada a mí, con sus piernas a ambos lados de mi cuerpo. Su cuerpo está sobre el mío y su cabeza descansa en mi pecho. No puedo creer que hayamos dormido así. Aunque no es nada extraño.

Luego de quedarnos dormidos después de esa experiencia nueva para ambos, me despertó en la madrugada con ganas de ir al baño. Mi cuerpo abrazaba al suyo, así que la sentí levantarse. Luego de eso, regresó, empezó a besarme y terminamos haciéndolo de nuevo, ella sobre mí.

El recuerdo de su cuerpo brincando y meneándose sobre el mío, junto con sus gemidos, me provocan un escalofrío que termina despertando aún más a mi miembro. 

Respiro profundamente intentanto pensar en otra cosa, pero Anni se remueve sobre mi cuerpo, frotando su abdomen contra mi pene y eso hace más difícil la tarea de tranquilizarme.

Intento moverla de su posición, pero se aferra aún más a mi torso y ese plan también queda descartado.

Intento pensar en otras cosas, fútbol, películas, comida, el sexo de Anni anoche contra mi boca.

Jesucristo. 

Esto es más difícil de lo que creía.

Justo cuando estoy por hacerla a un lado para irme a meter bajo el agua fría, levanta un poco su cabeza con los ojos adormilados y me sonríe.

- Buenos días - digo dándole un beso en la frente e intentando disimular el bulto que crece en mi entrepierna

- Holis - responde con dulzura mientras se baja de mi cuerpo - Lo siento si te aplasté - dice apenada y beso sus labios

- Me encanta amanecer así contigo - la observo sonreír y sus ojos brillan con la luz del día

- ¿Desnudos? - pregunta confundida

- Yo decía acurrucados - respondo riéndo - Pero también me gusta desnudos

Esta vez, es ella quien me besa, pegándose a mi sensible y fácilmente excitable cuerpo, haciendo que muerda su labio inferior y tome su cadera, subiéndola sobre mí nuevamente.

No deja de besarme, hasta que de un segundo a otro la puerta se abre y un chillido suena en la habitación, disparando nuestras defensas.

Empujo a Anni detrás de mi cuerpo y yo me incorporo, intentando cubrirla un poco.

- ¿Anni? - dice la persona que entró, mirándonos confundido

- ¡¿Qué demonios haces aquí, Francis?! - habla ella y se levanta con furia de la cama.

Intento tirar de ella porque la conozco y siento que olvidó que estaba desnuda, pero me tranquiliza ver cómo se aferra a la sábana y busca su ropa.

- Quería hablar contigo - dice con la mayor tranquilidad del caso

Busco al igual mi ropa, pero Anni tiene mi camiseta en su cuerpo, así que me pongo los bóxers únicamente mientras busco su falda. Me encanta verla con mi ropa, pero sus piernas estás desnudas y su ex le dedica miradas a cada nada.

- Pues habla - dice con indiferencia y celebro internamente

- Me debes una cita - dice y me tenso al oírlo

- Y tú me debes un año de mi vida - responde ella con ira

Lo mira como me miraba a mí horas atrás y agradezco no ser yo quien reciba esas miradas que lastiman.

- ¿Disculpa? - pregunta confundido

- Creíste que no me enteraría todas las mierdas que nos hiciste? - lo enfrenta furiosa - ¿Pensaste que no iba a saber que fuiste tú quién lo alejó de mí el último año? ¿Por qué lo hiciste, eh? Todos esos planes conspirativos para después terminar dejándome en un mes. ¿Por qué lo hiciste?

- Primero que nada, no fui el único que hizo algo contra ustedes - explica - En segundo lugar, yo nunca lo obligué a irse de la maldita ciudad. Él eligió creerme y a Meredith, no es mi culpa. Tercero, sólo quería saber a lo que todos se referían cuando decían que eras increíble besando, de todas formas, besaste a Mark, tu primer novio, a Jonnathan, quien se enamoró de ti desde que te vió, a Sebastian, quien por cierto tenía novia, a Peter, en una fiesta. Básicamente has besado a cada uno de tus amigos y sólo quería saber si era verdad. Salimos pero no me sorprendió demasiado y decidí dejarte antes de morirme de aburrimiento contigo.

Contengo las ganas de partirle la cara por las idioteces que dice, pero Anni se me adelanta, propinándole una bofetada que marca su rostro.

- ¿Y por qué estás aquí? - pregunta después del golpe

- Porque tenía un trato con Meredith e intento cumplirlo - otra bofetada suena y después veo a mi chica sacarlo de la habitación a punta de insultos.

Grita frustrada y me acerco a ella, apretándola contra mi cuerpo.

- Calma - froto su cabello

- ¿Qué maldita sea le pasa a las personas de mi vida? - pregunta aún enfurecida - Parece una telenovela con la ex loca y el ex idiota que no quiere ver a los protagonistas juntos

- Al final siempre terminan juntos, ¿verdad? - digo intentando consolarla

- La mayoría de veces, a menos que mueras o me vaya del país - suelta y sus ojos destilan miedo

- Espero que nada de eso pase - sonrío y la beso con suavidad.

- ¿Tienes hambre?  -pregunta un poco más calmada y yo asiento - Dame cinco y estoy lista

- Okey - la veo alejarse al baño y yo recojo mi ropa del suelo, colocándomela nuevamente.

A los cinco minutos, sale bañada, oliendo a vainilla y manzanilla. 

Se coloca un vestido sencillo y unos botines negros.

- Lista - dice una vez que termina de ponerse el brillo de labios

- Hermosa - le digo besándola en el cuello, haciendo que suelte una risita - ¿A dónde quieres ir? - pregunto una vez que estamos en el auto

- A tu lugar favorito en la ciudad - pide con una sonrisa y no hay nada que pueda negarle en este momento.

Arranco el auto, sabiendo exactamente a dónde debo llevarla.

Enciende la radio y canta con ánimos cuando suena "Tu mirada" de Reik

Una vez que llegamos, aparco el auto y bajamos en silencio.

La tomo de la mano y nos acercamos al viejo y enorme edificio en el centro de la ciudad.

- Este es mi lugar favorito - digo señalando exactamente la banca en la que nos sentamos

- ¿Por qué? - pregunta apegándose a mi cuerpo

- Porque aquí te encontré y me enamoré de ti - confieso y su rostro se contrae en una de las sonrisas más hermosas que he visto en mi vida.

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Siempre volveré a ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora