- No puedo creerlo - digo impactada
- Anni...yo...eh... - habla la besucona de mi amigo
- ¿Se conocen? - habla Joshua
- Noo - digo con sarcasmo - Sólo es la única amiga que he tenido en la universidad hasta ahora
- ¿Tú eres esa amiga? - dice sorprendido
- Si, idiota - enserio no puedo creerlo
- Pues créeme que no lo supuse. Hablaba tan bien de ella que nunca creí que eras tú - su tono divertido hace que me acerque a la cama y le tire un cojín a la cara
- Anni, yo, no sé qué decir - dice Lucy por primera vez
- Está bien - la interrumpo - Esto es increíble.
- ¡¿Qué?! - preguntan al unísono los tortolitos
- Que me encanta que estén juntos pero ni en un millón de años me hubiera imaginado que ustedes dos podían conocerse - aclaro sonriendo
- Pues así fue - la sonrisa de enamorado de Joshua me alegra muchísimo.
Hace mucho que no lo veía así. Estuvo enamorado de Ale durante el colegio, pero ella nunca sintió nada por él. De cierta forma me recordaba a mi situación con Iván, solo que esto era peor, ya que Ale nunca quiso nada con Joshua pero coqueteaba con él y le daba falsas esperanzas porque la hacía sentir importante. Le encantaba tener el poder sobre la gente y Joshua se dejaba manejar por ella como quería.
De todas formas, estoy más que feliz por ellos. Lucy es increíble y Joshua se merece lo mejor de este mundo.
- En fin - digo levantándome de la cama - Yo me voy. Tengo tarea que hacer y ustedes están bastante ocupados - sugiero - Así que, nos vemos.
- Adiós - ni siquiera se molestaron en detenerme aunque sea por cortesía.
Pongo los ojos en blanco y me dirijo a la salida.
Le doy una suave sonrisa a Simon, quién le grita desesperado a un libro y me voy.
Camino con más lentitud y mi imaginación hace un pacto cruel con mis recuerdos. Pienso que talvez, si las cosas hubieran sido diferentes, Iván y yo podríamos estar en este momento disfrutando de nuestra compañía así como Lucy y Joshua, o podríamos estar caminando de la mano hablando de cualquier cosa, o almorzando en mi casa.
Llego al campus y me siento en mi cama.
Algo que nunca he soportado en esta vida es la soledad, y ahora me siento más sola de lo que nunca me he sentido.
Sin saber cómo, mis ojos se cierra, alejando mi mente del vacío lugar en que me encuentro.
**********
- ¿Anni? - un leve sacudón me obliga a abrir los ojos. Lucy está frente a mí, mirándome con preocupación y ternura a la vez.
- Hola -hablo aún adormilada - ¿Recién llegas? -
- Nena, faltan diez minutos para que las clases empiecen - dice confundida
- Mierda - es lo único que sale de mi boca antes de correr a las duchas.
Me toma menos de cinco minutos estar lista y corremos con Lucy por el campus. Los martes tenemos educación física a la primera hora y debemos cruzar todo el campus para llegar a la cancha principal.
El grupo está corriendo como calentamiento, y ambas nos incorporamos a él con disimulo. Charles está adelante de mnosostras y nos infomra que todo está bien.
Genial
Luego de sudar como si la vida se me fuera en ello, nos sentamos en las gradas mientras bebo agua como loca.
- Deberíamos hacerlo - dice Charles
- ¿Qué cosa? - pregunto. No presté atención por concentrarme en el agua que entraba a mi organismo.
- Algo, nada - dice Lucy con una sonrisa de complicidad.
- Debemos ir a clases. Nos vemos - se despiden y me dejan sola.
De nuevo.
Regreso con pesadez a la habitación. Hoy tengo solo dos clases y la última es a las 12, así que me vuelvo a meter a las duchas y me quedo bajo el agua tibia por un largo momento.
La sensación de soledad va disminuyendo poco a poco, pero aún sigue presente. Debo ocupar mi mente o sino esto se hará insoportable.
Busco actividades extracurriculares sentada en mi cama mientras como unas galletas. No puede ser posible que una universidad tan prestigiosa no ofrezca ninguna actividad interesante. El tiempo se me va, y tomo mis cosas para ir a mi clase, cuando dan las 11:45. No puedo permitirme volver a llegar tarde.
Lucy, Charles y yo, no compartimos ninguna clase los martes ni los viernes, por lo que la ida y el regreso de éstas es silencioso.
Entro a la habitación y ahí están mis amigos. Lucy, Charles y Joshua. Mirándome como si hubiera ganado la lotería.
- ¿Qué pasa? - pregunto confundida
- Tenemos noticias - dice Lucy emocionada
- Okey - suelto mi mochila y camino hacia ellos.
- Hoy hablamos con el resto de nuestro curso - empieza
- ¿En el grupo? - interrumpo.
- No, en el campus. Nos reunimos todos y acordamos algo. Fue una decisión totalmente unánime.
- ¿Qué cosa? - la impaciencia es uno de mis peores defectos y enserio me está poniendo nerviosa.
Mi mente toma rienda suelta y pienso que talvez todos acordaron que ya no me quieren en el grupo, o que yo debería cambiarme de curso o carrera. El pánico ante mis pensamientos pone a mi corazón a latir como loco.
- Tranquila, que nadie te va a sacar del grupo - dice Joshua leyendo mi mente. Se acerca a mí y me abraza - Ayer, Lucy y yo conversábamos y creímos que sería bueno que tú te distraigas de todo lo que pasó. Que hagas algo con el tiempo libre que tienes gracias a tu cerebro de Megamente - bromea con el tonto apodo que me dió cuando nos conocimos - Y decidimos inscribirte en una actividad extracurricular temporal que sé que te ayudará muchísimo con tus escasas habilidades sociales - pongo los ojos en blanco - y a distraerte de todo lo que te lastima.
- Okey - alargo la palabra - ¿Y cuál es esa actividad? Porque estuve buscando y literalmente todo es mega aburrido.
- Pues - Charles toma su celular, enseñándome un póster de Instagram que me deja con la boca abierta y el alma en un hilo.
Doble mierda.
**********
Holis, holis.
Les cuento que tengo mucha prisa por terminar con la historia, ya que tengo otra en proceso en la cual me quiero concentrar de lleno.
Empecé esta historia porque quería darle un buen cierre a una situación similar a la de Anahí con Iván y pues plasmar mis pensamientos y sueños aquí, pienso que me ayudarán a superar al Iván que hay en mi vida.
En fin.
¿Qué les pareció el capítulo?
Espero que les haya gustado. Estaré con ustedes muy pronto con más noticias y actualizaciones, así que nos vemos.
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Un beso.
😘
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Siempre volveré a ti.
Teen FictionAnahí pasó toda la secundaria enamorada del mismo chico, Iván. lo olvidó y lo amó de nuevo. Se volvió un círculo vicioso en el que a cada vuelta, Anahí salía más lastimada. La secundaria se acabó para Iván. Se mudó de ciudad para la universidad y ah...