|Libro #1 de la Saga Time|
Kyla Jones recién graduada en derecho e hija de un importante fiscal, comienza a trabajar cómo asesora fiscal para el equipo de fútbol americano de San Francisco, dónde conocerá a los chicos que le cambiarán la vida.
Una...
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Kyla
No duermo nada en toda la noche y como de costumbre, es gracias a mi padre.
Extraño lo que éramos antes del accidente ¿Qué sería de mí ahora si nada hubiera pasado? ¿Las cosas siguieran igual? El accidente solo fue una agravante más a la situación. A sí que Kieth se hizo cargo de nosotros.
Y mira que no se lo pusimos nada fácil.
Estoy segura de que mi yo de diecisiete años me estiraría de los pelos al ver que vuelvo a estar con un jugador y que, encima, es el quarterback capitán del equipo. Espero que esta vez la historia no se repita, porque creo que a mis veintidós años —casi veintitrés— me dolería más la tradición de Nate que la de Liam.
No lo creo, lo sé.
No estoy presentando atención a los papeles de mi mesa, tengo la cabeza en otro lado. Unos golpes suaves en mi puerta interrumpen "mi trabajo".
—Kyla, siento interrumpir, pero el señor Mayer quiere verte en su despacho —indica Ivy.
—No he hecho nada malo, lo juro —levantó las manos en señal de inocencia.
—Yo solo soy la mensajera —se encoge de hombros para después volver a su trabajo.
Con un suspiro pesado y sintiendo como mi cuerpo pesaba una tonelada me levanté de mi silla para dirigirme hacia el despacho de mi jefe.
—Adelante —Ingrid me sonríe al verme—. Te están esperando.
Espera ¿Están? ¿Quiénes?
—Te estábamos esperando —Jackson me recibe—. Adelante, siéntate.
Observó a Thomas sentado en una de las sillas de la mesa cuadrada de la oficina. Frente a él hay una espalda ancha de cabellera morena y camiseta del equipo con el apellido King bordado en ella.
No de buena mañana, por favor.
—Buenos días —saluda mi compañero.
—Buenos días.
Correspondo el saludo, mientras me acerco a la silla situada a su derecha.
—Hola —Hunter saluda con su mal humor habitual—. ¿Me puedes explicar por qué estoy aquí?
—A mí no me mires —levantó las manos en señal de paz.
—Os he convocado yo —nuestro jefe habla—. Necesito hablarte de la situación de tu caso y para eso tu abogada debe estar presente.
—¿Y el que pinta aquí?
Señala a Thomas con tono impertinente, el cual levanta una ceja por el tono de voz que ha usado.
—También colabora en la investigación de tu caso, Hunter —Jackson le reprende con su tono de voz por su educación.
—Si tú lo dices —se encoge de hombros, para después fijar un semblante serio en su cara—. ¿Y Nate sabe que trabajáis juntos?
