La Weasley diferente y en Durmstrang

Draco Malfoy.

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- ¿Has pensado en que puede que sea algún idioma de alguna creatura? – le pregunte a Víctor que se encontraba un poco estresado por el enigma del huevo.

- No... Aunque podría ser ¿Alguno sabe sobre idiomas de las criaturas? – pregunto con una ligera esperanza de que alguien supiera algo ya que ninguno quería seguir estudiando.

- No, pero tiene que ser uno o que no entendamos nosotros los magos o que no suene estando en un ambiente – aporto Bastián.

- Bien, al menos ya tenemos una pista de donde seguir estudiando – dije.

- ¡No! Ya no quiero estudiar.

- Esteban luego iras al comedor, pero solo si ayudas con esto, aunque sea un ratito más – dijo Bastián.

- Está bien, aunque no quiera seguir leyendo no quiero que muera diría Antonella.

- Si, de hecho, ya me estaba tardando en decirlo – dije pensativa.

- Ni se te ocurra decirlo ahora Antonella – dijo Bastián.

Si conoces bien a Bastián sabes que no debes enojarlo ya que podría llegar a ser incluso peor que Grindelwald y Voldemort juntos, me da más miedo que mis padres y eso es mucho decir, mama si da miedo y no poco, mucho. No te conviene que se enoje ni en lo más mínimo.

- ¿Bastián, el canto de las sirenas no se escucha en la tierra o sí? – pregunte luego de ojear un libro de lenguas que a los magos les cuesta entender.

- No lo sé, me lo enseñaron, pero no me acuerdo.

- No se logra entender, su canto solo se entiende bajo agua, por eso es que se creía que hundían barcos, ya que se escuchaban mal cuando en realidad pudieran haber estado cantando el feliz cumpleaños o algo así – dijo Esteban y todos lo miramos sorprendidos –. ¿Qué? Que me distraiga en clases no significa que no sepa nada.

- Eso no lo veía venir – dije.

- Ni yo. Debo ir a ver si funciona bajo el agua, saldré al lago un rato – dijo Víctor y fue a su cuarto para cambiarse y ponerse traje de baño.

Lo sabemos porque a los ocho minutos paso en traje de baño con una toalla y el huevo dorado.

- Bueno, yo iré a revisar las cartas que me enviaron – dijo Bastián parándose del sofá – Luego me avisan si hacemos algo – finalizo para luego desaparecer por el pasillo.

- Como dijo Bastián iré al comedor y no necesariamente a comer – dijo parándose y estirándose.

- Así es como me dejan sola – dije para mí misma.

Me quede practicando mentalmente hechizos para poder ayudar a Víctor, ya que vi que mis amigos tienen la capacidad de velar por si mismos sin morir no los ayudare. ¿Qué? ¡Quiero que la victoria se la lleve Durmstrang!

La desventaja es que ahora ya no tenemos conocimiento de lo que pudiera ser la siguiente prueba.

Agarre un libro de pociones, no pienso conformarme con la poción que ya hice, inventare más para ayudar a las personas, pero para eso necesito saber la mayor cantidad de información acerca de las opciones. Salí del barco sin ningún destino en específico, vagaba por los pasillos vacíos de Hogwarts hasta que llegué al patio donde me senté bajo un árbol a seguir con mi lectura.

- ¡Miren es Anto W.!

- ¡Le pediré un autógrafo!

Escuchaba ese tipo de murmullos, pero estaba tan concentrada en mi lectura que los escuchaba muy lejos. Solo sentí que estaba rodeada y cuando levante la vista así era, trataba de concentrarme en solo una de las preguntas que me estaban haciendo, pero era imposible, pues eran demasiadas, alguien me jalo de la mano hasta una clase vacía.