¿Cómo diablos termine metida en esto?

Cap 8

- ¡Dibujas muy bien! -me elogio el robot al ver cómo hacia un pequeño boceto de una persona al azar-.

- Toma, te lo regalo si quieres -le extendí el papel a lo que felizmente lo acepto-.

- ¡Oww gracias Sunshine! -me abrazo, cosa que me se sorprendió, además de ese apodo-.

- ¿Qué? -hable confundida al sentir cómo deshacía el agarre-.

- ¡Q-Quiero decir, Ashley! -se corrigió a los pocos segundos de darse cuenta de lo que dijo-.

- Pues no veo ningún problema con ese apodo -sonreír con tal sinceridad que Sundrop volvió abrazarme-.

- ¡Yei apodos! -agregó- ¡Cómo lo hacen los mejores amigos! ¡¿Tendré algún apodo?!.

- Sunny -musite-.

- ¡Me gusta! -contestó- ¡oficialmente somos mejores amigos! -me abrazó de otra vez-.

El anunció por los altavoces de que el local estaba por cerrar en 5 minutos causo que me viera obligada a hacer mi trabajo.

- Lo siento Sun, debo irme -hable algo triste-.

- Oh... ¿pero volverás para jugar? -expresó con un tono de voz muy cambiado, ya no se escuchaba alegre, tal parece que no le gusta estar solo-.

- Prometo que volveré -dije levantándome y yendo a la mesa donde deje la canasta con los juguetes olvidados-. Saluda a Moondrop de mi parte -reí al pensar todo la persecución de mi mi turno anterior-.

- ¡Nos vemos Sunshine! -se despidió intentando sonar feliz, ahora que me lo preguntó, ¿los animatronicos pueden experimentar sentimientos humanos?-.

Sali de la guardería rumbo a objetos perdidos a dejar estos juguetes, llegue y tuve que devolverme a mi oficina a por mi linterna.

12:02 a.m

Observe cómo los animatronicos tales como Roxy, Chica y Monty estaban recorriendo por todo el centro comercial, incluso había algunos staff-bots de guardias para hallar al niño, pues entre más ayuda mejor ¿no?, solo espero que ese pequeño este bien y le rezo a todos los dioses que existan para que no le pase lo mismo que a esas victimas desaparecidas, además de que ahora sabiendo que hay una coneja rondando por aqui, no me da buena espina.

- Kyle no puedo hablar ahora -susurre contestando la llamada-.

- Ay lo siento, ¿estabas ocupada? -se disculpó, no ¡espera un momento! ¿Qué hace Kyle despierto a esta hora-.

- Si estoy ocupada ¿y tu que haces levantando a estas horas? -inquirí, aunque parecía más una madre regañando a su hijo-.

- Estaba viendo My Little Pony para tu información querida -¿es enserio Kyle?- y en segunda te dejo para que trabajes y no te regañen.

- Muy considerado de tu parte mijo, pero duerme almenos 6 horas que mínimo tenes el sueño re contra atrasado por la noche de ayer -lo regañe, sonaba definitivamente como una madre, jaja-.

- Lo que digas mamá -se burló para luego colgar la llamada-.

Al escuchar el ruido que indicaba el fin de la llamada guarde mi celular, continúe con mi búsqueda hasta que me llegue a la zona del Chip's, recuerdo cuando solía apostar con Marco y Estefanía jugando en las arcades, viejos tiempos.

- Perdí mucho dinero en ese entonces -hable para mi misma riendo un poco por ese vago pensamiento-.

En ese momento un ruido de alguien tropezando hizo que volteara instantáneamente para ver de donde provenía el sonido, no vi a nadie por lo que me acerque, absolutamente nadie, solo unos staff-bots dando vueltas por la zona y a Roxy de fondo llamando al muchacho, estaba por retirarme hasta que escuche un estornudo muy cerca de mi, las únicas dos cosas a mi lado eran dos cochecitos donde ponían a los pequeños, revise uno, nada, abrí y el otro y tremenda sorpresa que me llevo...

- ¡AaAh! exclamó un pequeño de pelo castaño- ¡por favor no me lleves con ella! -me suplico, ¿se refiere a Vanessa-.

- Pequeño ¿cómo entraste aqui? -lo saque del coche y me agache a su altura- ¿cómo te llamas?.

El chico talvez de 10 o 12 años se negó a decir alguna otra palabra, sus ojos reflejaban miedo y angustia, eso me hizo sentir lastima, además de que poseía una curita en su mejilla.

- ¿Te hiciste daño? -intente poner mi mano en su hombro pero este retrocedió- tranquilo no te hare nada, ¿estás bien? ¿tienes hambre o sed? -sonreí intentando ganarme su confianza-.

- Guardia Ashley -escuche la voz robótica de Roxy detrás de mi-.

- ¡Oh Roxanne! -me levante velozmente ocultando al niño a mis espaldas-.

- La escuche hablando con alguien ¿encontró al chico? -inquirió haciendo que mis nervios aumentaran-.

- N-No, era yo hablando conmigo misma -me invente esa excusa, ahora solo debía de creérsela-.

- Mmm, de acuerdo -asintió para luego irse sin más-.

Cuando note que no estaba cerca deje salir un gran suspiro de alivio.

- ¡Por Dios! -me acomode el pelo viendo cómo el pequeño aun estaba a mi lado-.

- No... no me delataste -hablo tímido- ¿por qué?.

Ni siquiera yo tengo idea niño, pensé - No lo se, simplemente reaccione y ya -conteste casi al instante-.

- Gregory, me llamó Gregory -contestó a mi anterior pregunta-.

Tengo hambre xd, ¿qué tal dragoncitos, espero esten re bien, cómo ven aqui actualizando en la madrugada xd, espero os guste el cap, recuerden votar y de paso seguirme si os interesa alguna de mis otras historias, sin nada más que decir.
¡Nos vemos :3!.