¿Cómo diablos termine metida en esto?

Cap 40

¡3.6k lecturas! ¡Gracias <3!

.
.
.
.

.
.
.
.
.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
-

Han pasado dos semanas desde la fiesta de San Valentín y también desde que conocí a Eclipse, para resumirles la conversación, al momento en que volví a poner las luces en su totalidad, Sun se veía más calmado, tal parecía que recordaba lo sucedido, me abrazó como siempre y me dio las gracias por aquel regalo, además de darme muchos besos en mi rostros, muy tierno de su parte. Moon también hizo lo mismo cuando las luces en la fiesta se apagaron por un rato por un fallo en la zona, agradezco al cielito que nadie nos vio ;-;.

- ¡Señorita Hamilton! -carajo, verdad que andamos en clase-. ¿Podría decirnos que tipo de alimentos son los más esenciales para el cuerpo humano? -ayayay-.

- Profe, siendo sincera... no les escuche nada -solté una risa involuntaria-.

Mi comentario causo que las risas de los otros no hicieran falta, era claro que el profe me iba a sacar del aula, no es mi culpa que me agarra distraída con mis pensamientos... creo.
Bien, tuve que esperarme a que la clase se acabara, gracias a que era la ultima clase ya me podía ir a Pizza Plex.

- Es tu culpa mija -comentó Kyle mientras íbamos caminos al local-.

- Pff, andaba en mis asuntos -me excuse, vaya, debo mejorar mis pretextos-.

- Si tanto quieres estudiar gastronomía deberías prestar atención a clases, pendeja -me dio un "leve" zape, aunque si me dolió-.

- Au, en fin, vos igual debes prestar atención en las tuyas -recalque-.

- Si si mija, no se preocupe -hablo en burla-.

- Te veo luego -me despedí cuando llegamos a centro comercial, ahora toca trabajar-. Me avisas como te va sobre esos reportes en las ventilaciones.

- Esta bien -contestó-.

Más tarde cuando ya había dejado mis cosas y me cambie, fui a la guardería, como siempre, todo el lugar lleno de pequeños, ya me acostumbrare algún día...

- ¡Sunshine! Que bueno que llegas, necesito un poco de ayuda -me abrazó Sun apenas me vio entrar-.

- Hola Sunny, pues si que el lugar está más lleno de lo normal -reí a lo bajo-. Ven te ayudo.

- Gracias Sunshine -suspiro aliviado, se re nota que necesitaba ayuda-.

Ayayay, pobre de Sun, tener que estar al tanto de tanto niño pequeño le debe resultar difícil.

- Ay diosito santo... -musite-. ¿Cómo se supone que mantengamos estos niños bien vigilado?.

- Ni siquiera yo tengo idea -respondió-.

- Bien, plan B -sep, había hecho un plan B para este tipo de casos-. Si no podemos estar pendientes de ellos por separados, tenemos que hacer que estén haciendo lo mismo.

- Es una buena idea Sunshine -me sonrió-. ¿Pero como que?.

- Mmm, ¿un show de marionetas? -sugerí, no es la peor idea-.

- ¡Si! eso les gustara -asintió feliz, Sun, si sigues asi me va a dar sobredosis de ternura-.

- Bien Sunny, tu ve por los niños y yo por las marionetas -indique-.