9: La entrega del Don

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La fiesta de Antonio estaba a la vuelta de la esquina. Esa mañana fue muy agitada, todo el pueblo madrugo para poder poner de su parte en la celebración de hoy. Mi abuelo despertó a mi hermano para que lo ayudara con las carretas. Mi abuelo era una especie de "herrero del pueblo", ya estaba un tanto mayor, pero aun daba su ayuda de vez en cuando. Mientras mi familia ya estaba  en lo de los Madrigal, yo me preparaba para ir a su casa. Tenia el regalo de Antonio, unos adornos que había hecho con Mirabel para su familia y unas manjar que mi abuelo había preparado dos días atrás. Pensaba quedarme a dormir en su casa después de la celebración, podríamos compartir los postres y reírnos de algunas cosas, como hacen las amigas de mis cuentos. En mi bolso también guardaba perfectamente doblado, mi camisón blanco. Teniendo todo a mano, salí directo a casita. 
En el camino veía gente moviéndose de un lado a otro, con canastas enormes repletas de adornos, otras con comidas y bebidas, algunas personas llevaban ingredientes para Julieta y otros parecían estar preparando sus trajes para hoy, muchas personas ya desde temprano lucían completamente elegantes.  Mientras me acercaba mas a casita, escuche a Mirabel detrás mío.
Mi mami Julieta, tranquila te deja con solo una arepa♫_ mi amiga estaba haciendo de guía para unos niños del pueblo. Me dio risa al pensar que no era la única que escuchaba esa canción de presentación. Al verla rodeada de tantos niños, que incluso se iban sumando mas, supuse que no podría hablar con ella dentro de un rato, así que me dirigí directo a casita, para verla allí. En casita había incluso aun mas gente moviéndose que en el pueblo. Había personas que ayudaban a mover los muebles de dos en dos, mientras Luisa los movía con una sola mano. Veía como Julieta entraba a la cocina con una de esas canastas con  ingredientes. Estaba en la entrada observando donde se encontraba cada persona de la familia, en una punta estaba Dolores con otras canastas, Pepa y Félix en un extremo intentando no morir de los nervios y por arriba, logre visualizar a Camilo, quien estaba saliendo de su habitación.  Mientras me adentraba en la casa, escuche la voz de mi abuelo. 
¡Cielo, ven un momento!_ me había indicado, mientras estaba siendo acompañado por la Señora Alma.
Te presento a mi nieta menor, ella es ___, por lo que se es muy amiga de tu nieta Mirabel_ le comentaba mi abuelo, sosteniéndome de los hombros y con esa sonrisa que tienen los adultos cuando presumen con otros sobre su familia. 
Mucho gusto, por fin nos conocemos de cara_ indico la señora Alma. Es cierto que me la pasaba en casa con Mirabel, pero jamás salíamos de su cuarto y como su familia estaban siempre en el pueblo, me iba antes que llegaran. Solo nos habíamos visto la vez que mi amiga me presento a casita, aunque dudo que se acuerde de ello. 
Es un places, es cierto que nunca me quede a saludar correctamente_ le respondí entre risas nerviosas mientras hacia una mini reverencia como saludo. 
No te preocupes querida, por lo menos ahora te conozco bien. Aunque mi familia aun no sabe nada mas que tu nombre_ escuchar que la señora Alma me conocía por palabra, me ponía feliz. ¿Mirabel hablo de mi con su familia?.
Bueno, pero seguramente hoy los pueda conocer un poco, como nunca tuvimos la oportunidad yo-_ La señora me interrumpió como si mis palabras no hubieran existido.
Déjame invitarte a cenar un día de estos, ¿quieres?_ "señora, no me lo pregunte a mi, pregúntele a mi hermano, el es quien no me permitía estos días quedarme hasta tarde". En eso, el abuelo empezó a poner cartas en el asunto.
Le encantaría, por la familia no es problema que te quedaras a comer cielo_ me dijo el abuelo, como si supiera exactamente lo que pensaba.
En ese caso, claro, me encantaría cenar con ustedes_ la abuela de Mirabel dibujo una pequeña sonrisa en sus labios.
Esplendido. Los dejo, tengo mas cosas que hacer_ al irse, el abuelo hizo una media reverencia, como si la señora Madrigal fuera una especie de monarca. 
¿Tan importante es la señora Alma abuelo?_ este sonrió a mi pregunta
No se si importante, para mi es increíble. Mi abuelo sonaba embobadisimo. "Toda la familia estaría admirando a los Madrigal?!", pensé que seria gracioso decir eso en la cena. "mi familia cree que la suya es genial, nos puede adoptar?". Me reí de mi propio chiste y deje al abuelo en sus cosas. Pase por el centro, donde las escaleras empezaron a cambiar a unas mas elegantes, mientras veía como se transformaban, subiendo mi mirada, termine topándome con las de Camilo, quien estaba inclinado sobre una pared admirando lo mismo.  Lo saludo con mi mano mientras subía las escaleras. 
Buenos días, ¿Cómo te encuentras para lo de hoy?_ le pregunte mientras este seguía apoyado sobre la pared lo mas relajado posible. 
Buenos días, me encuentro bien, supongo. Esa pregunta debería ir para Toñito, que de hecho, hace unas horas que no lo veo_ indico Camilo, quien se puso recto para buscar a su hermano con la mirada.
Seguramente debe estar escondido, imagino que recibir un don frente a todo un pueblo no es algo fácil de asimilar, menos de vivir_ intentaba empatizar con el menor de los Madrigal, me ponía en su lugar y definitivamente si lo estuviera, me desmayaría. 
PFF, yo lo goce en su momento. Todos mirando al increíble y asombroso Camilo Madrigal, recibiendo su don aun mas de increíble_ Camilo como siempre, tan humilde.  Sostuve la parte del cuello de su  ruana, levantándola para que le tapara la cara. 
Bueno señor perfecto, pero tu hermano no es como tu. Seguramente el debe estar nervioso_ le replicaba mientras veía como este solo intentaba mirarme sin mover la ruana de lugar. 
Es verdad, aparte, mi entrega del don, fue antes que el de Mirabel.._ dijo bajando la mirada un tanto apenado por la ultima entrega del don. Eso me percato, Mirabel podría estar un tanto asustada o triste. Con Camilo nos quedamos en silencio hasta que lo empuje con mi codo un poco. 
Si bueno, hay cosas que pasan sin predecirlo, pero esta bien, no hay que angustiarse por ello. Aparte, como siempre dice Mirabel, con o sin don, sigue siendo de la familia. Lo mismo pasaría con Antonio, si es que no llegara a tener. Con o sin don, el seguirá siendo un Madrigal_ le respondí entre sonrisas, tal vez su hermano al fin y  al cabo si estaba nervioso. Nervioso por su familia, por si todo saliera bien y por si su hermano tendría o no un don mágico. Este solo sonrió melancólicamente, supongo que aun así el miedo seguiría.  Miró para otro lado antes de volver a mirarme con una sonrisa en sus labios.
Tienes razón, mejor ayudemos con las cosas de la casa_ como si la abuela escuchara todo desde un inicio, apareció para indicarle a Camilo unos trabajos. 
Camilo, necesitamos otro José_  dijo, siguiendo de largo por los pasillos.
JOSE!_ respondió mi amigo convirtiéndose en el señor que intentaba colocar un  adorno con el nombre de Antonio arriba de su puerta. Yo gire la cabeza y logre ver a Mirabel llegando con una canasta dirigiéndose a la cocina.
Camilo, Mirabel llego, iré con ella_ grite bajando las escaleras, pero sentí como algo me detuvo sosteniéndome del brazo. 
¿Puedo verte después?_ me pregunto camilo con los ojos bien abiertos. No esperaba su pregunta, creo que el menos, su reacción al escuchar lo que pregunto lo decía todo. 
Claro, me quedo en la fiesta hasta que termine, no te preocupes. El sonrió torpemente. De fondo se escucho a  la abuela decir su nombre. Este me soltó el brazo lentamente y salió corriendo para ir con la señora Alma. Yo me quede viéndolo desaparecer por una escalera trasera y después dirigirme a la cocina con Mirabel. 
La casa no se arreglara sola, uy, puedes, te ves genial_ mi amiga estaba saliendo con sus cosas fuera de la habitación en la que estaban sus padres cocinando.
OH ___, que bueno verte._ mi amiga soltó las cosas y me abrazo fuertemente, yo acepte el abrazo.
Traes todo?_ me pregunto, intrigada por el regalo de Antonio y el de su familia. Yo asentí con una sonrisa cómplice. Ella me apunto con el labio arriba, para ir a acomodar los regalos. Primero fuimos a su habitación a guardar el obsequio de Antonio y después sacamos unas decoraciones para su familia. Eran un coloca velas un tanto cacera, con los nombres de los Madrigales, los podríamos en sus puertas para que estos antes de entrar, los vieran. 
Yo voy desde el cuarto de Luisa a la abuela y tu desde el de Pepa hasta Dolores, esta bien?. mi amiga y yo nos dividimos para terminar nuestras decoraciones por su casa. Me aleje yendo a la puerta de Pepa. Me agache y delicadamente acomode cada decoración.  Me encontraba en la puerta de Camilo acomodando su regalo. Rece porque no vuelva a estar adentro y me encontrara agachada frente a su puerta, ya seria raro dos veces seguidas. Prendí la vela y me pare para ver como había quedado el regalo.  
¿Qué estas haciendo?_ una voz femenina me hablaba desde mi izquierda. Gire a ver  quien era
¡Isabella!, esto... Estaba ayudando a Mirabel a poner unas decoraciones_ Corría mi pollera para que esta pueda apreciar lo que estaba haciendo. Ella levanto una ceja y después relajo la cara.
Así que eres ___, la nueva amiga de_ la interrumpí
Amiga de Mirabel, si. Es un gusto conocerte_ hice una mini reverencia. Toda la familia Madrigal parecía una especie de realeza ante mis ojos. Cada que los veía, mi cuerpo quería hacer una reverencia como si fuera un soldado suyo. Isabella parecía querer terminar la conversación ahí, pero en eso escuchamos las dos a Mirabel. Esta se había quemado con el regalo de la abuela, mientras esta la miraba.
Mirabel, se que quieres ayudar, pero esta noche debe salir a la perfección. Todo el pueblo depende de nuestra familia, de nuestros dones y a veces el mejor modo, de apoyar a los demás, es hacerse a un lado y dejar que el resto de la familia, haga lo que hace mejor. Escuchábamos su hermana y yo, como Mirabel era regañada por su abuela. Esta se fue a su habitación, tomando el camino largo para no cruzarse conmigo ni con Isabella. 
Que exagerada_ escuche murmurar a su hermana al ver como la suya actuaba ante el regaño de su abuela. Se que no debía responder, pero es mi amiga y en nuestro contrato que jamás firmamos ni hablamos de el, dice que al ser amigas, se defenderían de todo aunque eso implicara la familia de la otra.  
Bueno, es que ella no tiene un don para ayudar, es comprensible.._ lo dije un poco cabizbaja, era una defensa un tanto débil, pero al menos no calle. 
Si tan solo notara lo doloroso que es tener un don solo para los demás_ el comentario de Isabella me hizo mirarla un tanto sorprendida, parecía que ni ella había controlado lo que dijo. Esta solo acomodo su garganta y cambio su cara amarga a una con una sonrisa un tanto falsa. 
Disculpa, me tengo que ir_ dijo nerviosa, dejando caer unas flores que se marchitaban cuando se alejaba de estas. Me quede viendo a la joven madrigal un rato, pensando en lo que dijo, después sacudí mi cabeza y me fui al cuarto de Mirabel. Antes de entrar, escuche una voz un poco mas finita, apoye mis orejas sobre la puerta. Estaba Mirabel y Antonio hablando, creo que le esta dando el regalo. Aleje mi cuerpo de la puerta, mejor dejarlo a solas, deben estar teniendo su momento de primo a prima.  Aleje mi mano de la puerta y cuando gire me encontraba viendo fijamente las escaleras para ir a la torre. Subiendo por ahí, sabia que estaba el cuarto de Bruno. Era el tío de Mirabel y Camilo, hace 10 años había desaparecido y nadie sabia nada.  Le había preguntado a mi amiga sobre este, pero dijo que era muy joven como para acordarse de algo, entonces había ido con mi abuelo, el solo conto con tristeza como era el Madrigal que todo el mundo le temía. Podía ver tu futuro pero jamás eran cosas buenas. Me conto que gracias a Bruno, pudo ver el futuro en el que el y la abuela se divorciaban, no lo odio por ello, pero por un tiempo cada vez que lo veía, le agarraba dolor en su corazón. Al igual que el resto, nadie sabe porque se fue y menos donde se encuentra.  Me acercaba lentamente a la torre cuando una voz me saco de las nubes
¡Ahí estas!_ Camilo estaba atrás mío, como no lo había notado, di un brinco para atrás, chocándome con este.
PFF, si sabes que si alguien te sigue, corres para adelante, no te tiras encima de el_ me dijo mi amigo, mientras sostenía con su brazo los míos para que no me callera.  Yo me puse recta de inmediato.
Si, bueno. La idea principal es que nadie me siguiera, pero esta bien, lo tendré en cuenta. Coloque mis manos sobre mi cintura mientras me burlaba de Camilo. 
¿Me estabas buscando?_ le pregunte cambiando el tema. 
Ah, si!. Te tengo un trabajo, pero es súper importante, peligroso y complicado. ¿Crees poder realizarlo?_ Su voz había empezado a cambiar a un tono tenebroso, haciendo que el trabajo sonara aun mas aterrador. Pero, Mirabel no estaba, no podía ayudar al abuelo y no tenia nada que hacer así que, tampoco tenia muchas opciones. 
See, porque no?_  le respondí con indiferencia, este sonrió y me agarro del brazo guiándome hacia la entrada de Casita. Al llegar, me agarro de los hombros, y me acomodo en un lugar especifico.
Listo, aquí te quedas_ me dijo soltándome despacio viendo que estuviera bien posicionada. 
¿Qué tengo que hacer?_ pregunte, pues no entendía aun lo que era su ""trabajo súper difícil"". 
Compañía!_ indico, mientras abría la puerta para que pudiera admirar como anochecía y la gente del pueblo empezaba a entrar. 
Pero, Camilo, soy nueva, no conozco al pueblo, no puedo darles la bienvenida._ le intentaba explicar un poco exaltada.  El coloco sus manos en su cadera y me miro con una ceja levantada.
Dije "compañía" no  "bienvenida"_ Empezó a saludar a los primeros invitados mientras yo aun seguía tiesa pensando en lo que consistía mi trabajo. 
¿Compañía para quien?_ le dije cuando termino de saludar a unos señores. Este rodeo los ojos
Si que eres lenta. Compañía para mi. Me aburre esperar siempre en la puerta para dar la bienvenida a todo el pueblo, así que como vi que no  tenias nada que hacer y tu torpeza me entretiene, me vas a acompañar para no sentirme solo. Ahora era yo quien rodeaba los ojos. Camilo a veces es lo menos predecible del mundo
¿Qué gano yo haciéndote compañía?_ pregunte, esperando que me de alguna arepita o bollo como recompensa. 
Obviamente la fortuna de estar conmigo_ dijo mientras posaba como diva. 
Aja y algo que valga en serio?_ le dije levantando una ceja y entrecruzando los brazos. Este solo entrecerró los ojos, un tanto indignado a mi respuesta. Después volvió a ver a la población para luego mirarme a mi. 
Puedo presentarte al pueblo, entre mas gente llegue te pongo al tanto de quienes son. Eso si, sin canciones_ dijo mutando en su prima Mirabel. Me causo risa. 
Hecho_ le ofrecí la mano y el me la acepto, cerrando nuestro trato.  Así paso las primeras horas del atardecer. Camilo recibía a los del pueblo, algunas personas me saludaban y yo intentaba darles la bienvenida lo mas Cortez posible. Cuando unos invitados ya entraba, Camilo se me acercaba y me comentaba en voz baja quienes eran. 
Ella es la señora Aquino, madre del señor Aquino Joaquín, el es el papa de la amiga de Toñito, María Aquino, quien es hermana de_ me comentaba Camilo, podría ser un poco de lio al inicio, pero lo contaba muy lento y preguntaba en el medio si entendía. Si a veces no lograba ubicar a la persona, el mutaba en esta para que lo hiciera. Así estuvimos un largo tiempo, el contaba mientras yo lo acompañaba y de vez en cuando hacia uno que otro chiste, para que esto no sea solo una clase de ciudadanos.  El sol se había ido por completo y el ultimo invitado había llegado
Buenas noches señor López. Dio la bienvenida Camilo al dueño de la tienda de telas, este se había transformado en el para saludarlo como hizo con el resto de las personas. 
Camilo, que bueno verte bien, estas mejor que la ultima vez?_ pregunto el Señor a mi amigo, quien parecía buscar algo para responderle
¿Qué te había pasado?_ pregunte, pues no tenia idea de que a Camilo le había ocurrido algo.
Camilo la semana pasada me ayudo con unas cosas en la tienda y cuando fui a verlo estaba rojo como tomate, supuse que tenia fiebre y lo mande a casa_ me respondió el señor mientras Camilo evitaba mirarme.  
Pero veo que ahora estas mejor, me alegra mucho. Con permiso_ el Señor Pérez entro a la casa y me quede a solas en la entrada con Camilo quien parecía volver a un color rojo como había mencionado recientemente el adulto. 
¿Así que fiebre, eh?_ le dije con una sonrisa burlona.
Ese fue el ultimo, ME VOY CON TOÑITO BAY_ dijo yéndose repentinamente, cruzo unas cortinas, pero volvió rápidamente a mi.
Gracias por la compañía_ Se me quedo recto mirándome y volvió a irse súper tieso por detrás de esas cortinas rojas. Yo me reía, era gracioso cuando se ponía un tanto nervioso.  

Camilo Madrigal x T/NDonde viven las historias. Descúbrelo ahora