Camilo Madrigal x T/N

30: Que empiece el amor

Estaba en mi habitación haciendo unos bocetos de ropa. Desde que Camilo dijo hace unos días de tener su cambio, me emocione un poco y me puse a hacer algunos garabatos de diseños que podrían favorecerle.  Mientras la música se reproducía en el gramófono, escuche unos golpes provenientes desde mi ventana. Gire mi cabeza, viendo para atrás. Una piedra pareció volar hacia el vidrio para que este hiciera sonido. Me levante y abrí mi ventana para ver que pasaba.

AAHS_ me queje, cuando una piedra me golpeo en la cabeza.

¡PERDON!_ era Camilo. Estaba tirando piedritas por mi alcoba para llamar mi atención. 

¿si sabes que hay una puerta?_ le indicaba algo enojada, aun me dolía el golpe en la cabeza. 

Lo se, pero pensé que así seria- amm, olvídalo_ se trababa al hablar, pareció darse cuenta que su acción fue algo tonta.  Este se alejo para acercarse a la puerta y golpearla. Yo salí de mi cuarto para abrirle. 
Hola_ saludo tímidamente al ver mi cara completamente enojada. 
¿Te hice mucho daño?_ pregunto algo preocupado, deje salir el aire y me calme. 

No te preocupes, estoy bien. Pasa_ le di permiso para entrar a mi casa, pero el se negó, quedándose firme en la entrada. 

Solo venia a proponerte algo, ya me tengo que ir de hecho_ apunto al oeste, afirmando que el sol empezaba a bajar y estaba por anochecer. 

Ah em, te escucho entonces_ respondí, cerrando la puerta de mi casa para hablar afuera. 

Te pongo al tanto. Los Guzmán vienen a comer a casa y el señorito de Mariano, se quiere quedar a dormir_ mi amigo siempre que hablaba de su cuñado, empezaba a imitar una voz aguda en forma de burla. "Camilo celoso siempre es divertido" 
Mi mama y la abuela no lo dejan dormir con Dolores, por obvias razones. PERO, acá es donde entra el mejor hermano del mundo a ayudar_ replicaba el posando con arrogancia.

¿Toñito que piensa hacer?_ le pregunte fingiendo inocencia. Era fácil molestarlo con que su hermano era el favorito y muy divertido ver sus cachetes inflados al enojarse. 

JA, JA, JA. Ya en serio, escucha._ me puse firme como gesto de que ahora me lo tomaba en serio.
Mariano dormiría en mi cuarto si esta noche no va a lo de Dolores, perooo, algo va a pasar._ dejo de hablar con su voz normal para empezar a narrar todo con una voz mucho mas aguda.
"Ono, ¿Qué paso aquí?. Mariano fue a dormir al cuarto de Dolores y ___ al de Camilo, que raro, ¿se habrán confundido?"_ levante una ceja al escuchar que me había mencionado en  su plan. 
Por si no quedo claro, hoy toca pijamada_ me remarco con voz muy grave. Yo me reía mientras recalculaba todo lo que me había contado.

Haber haber si entiendo. ¿Ayudas a Dolores y a cambio ella deja que haga pijamada contigo?_ Mi amigo asintió rápidamente con una sonrisa en sus labios. 
Vaya recompensas te da tu hermana, creo que te estafo_ le respondí como auto burla. "Le hubiera dado sus arepas, eso era mejor". 

Claro que no. Me debes mas capítulos del Zorro. Quiero saber que pasa._ "es cierto que se durmió a mitad de los primeros capítulos, realmente no creí que le terminaría de gustar la novela. 
Además, quería pasar....tiempo, contigo_ dijo dando pausas muy largas. Parecía darle algo de vergüenza aceptarlo.  Suspire y lo pensé un rato. "No tengo mucho que hacer. Samuel esta ocupado con el abuelo y la verdad, ya me canse de comer todos los días las empanadas de mi hermano. La señora Julieta seguro preparara comida exquisita para su visita. " Todo parecía estar a favor, sin mencionar que claramente podría estar con Camilo.

Bien, acepto tu invitación. ¿A que hora es la cena?_ pregunte para poder ir calculando en cuanto tiempo tengo para prepararme. Mi amigo vio el reloj de la iglesia, el cual sonó marcando  las  ocho pm. 

En cinco minutos_ respondió con una sonrisa de inocencia.

Te odio_ le dije antes de salir corriendo adentro de mi casa para buscar todo. En la mochila guarde todo lo mas rápido posible. Todo lo que tenia enfrente se iba para adentro. Camisón, cuaderno de bocetos, la novela y mis cepillos. También corrí para escribir una nota avisando que me iba. Mientras escribía podía escuchar la voz de Camilo gritando desde la puerta.

NOS QUEDA 3 MINUTOS_ "un día de estos le voy a ahorcar con un reloj". Deje la nota sobre la mesa y salí junto a Camilo disparando a casita. A mitad de camino ya me había cansado. Mi casa no quedaba para nada cerca de la casa madrigal.