El más apto [YunGi][COMPLETA]

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Era una de esas noches en las que estar en compañía se volvía necesario, Yunho y MinGi estaban extasiados, envueltos en una maraña de sensaciones que los alejaban por completo de su realidad. Aun así se esforzaban por hacer de sus días un poco normales, a su manera. Quien también disfrutaba de un nuevo y lindo comienzo era Jongho, él se encontraba terminando una cena con Siyeon en el departamento de Yunho, luego de beber algo de vino y darse cuenta de que las cosas entre los dos eran mutuas. Hizo la gran pregunta que estuvo rondando su cabeza desde el día en que vio a la pareja con los niños.

— Entre él y yo no hay nada— susurró. Sonrió después por la forma en la que Jongho se dirigió a ella.

— Entonces no lo quieres...—se atrevió a concluir.

— ¿Cómo puedo querer a alguien que solo está conmigo con fines reproductivos? Es tonto pensar que por un simple acto sexual que dio como resultado bebés debemos pertenecernos.

— ¿Pero ustedes jamás planearon esto? Disculpa si soy un entrometido, pero Yunho nunca ha sabido explicar muy bien nada de lo que pasa...

— Nuestra unión fue solo por un motivo y eso ya pasó, tardaré bastante tiempo en querer reproducirme de nuevo—dijo. Jongho se atragantó con el vino y ella comenzó a reír un poco bajo—Despacio...—le acercó unas servilletas.

— Gracias... ¿dónde está él ahora?

— Casi no lo veo, pasa demasiado tiempo fuera de casa, lo sabes, y el resto, él solo...

— MinGi...—Ella asintió y se puso de pie para juntar la mesa, rápidamente él la imitó con cautela—Ha estado un poco extraño estos días—comentó y ella le miró de reojo—A veces parece que no es él. Lo conozco hace años, he vivido con él y aun así no encuentro comodidad al verlo actuar como lo hace.

— ¿Él no te ha dicho nada?

— ¿Sobre qué?

— Nosotros, sobre MinGi... lo que significamos—caminó hacia la cocina y él la siguió—Yunho tuvo un despertar tardío, en cambio yo, yo lo hice desde muy temprana edad, aprendí a controlar ambas partes, por eso no he ido tras MinGi, porque aunque deseo gran parte de lo que tiene, no puedo arriesgarlo todo.

— No estoy entendiendo nada—dijo él mientras la miraba lavar algunos platos— ¿Qué tiene que ver MinGi siempre? ¿Acaso lleva huevos de oro?—bromeó y Siyeon le miró asintiendo—¿Lo que dices es que te atrae sexualmente también?

— No, va más allá del deseo sexual.

—Olvidé por completo que ustedes dos están en una secta hippie...—dijo y se alejó de ella, arregló algunas notitas que había en la heladera y luego se giró a verla—Yo no quiero pertenecer a ninguna secta hippie.

— No existe tal cosa, no lo entiendes porque nadie te ha explicado adecuadamente nada—se secó un poco las manos y comenzó a caminar fuera de la cocina sin decir nada, Jongho la observó en silencio. Quizás Siyeon era peculiar, pero debía admitir que no solo le gustaba, sino que el tiempo compartido era muy bonito—¡Ven!—le llamó entre sonrisas, lo último que dejó ver fue su largo cabello.