Enhypen (Jay)

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- ¡_______! Ya deja de correr por la casa -dijo mi mamá desde la cocina-
- ¡Mamá esto es importante! -dije regresando a mi cuarto- ¡Voy a ver por primera vez a Jay!

Estaba muy emocionada de conocer por primera vez a un chico con el que estuve hablando por internet los últimos dos meses.

Íbamos a encontrarnos en un parque, ante todo la seguridad por si no era la persona que decía que era, pero estaba segura de que si lo era, confiaba mucho en él aunque nunca lo hubiera visto fuera de cámara.

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Pronto llegó la hora del encuentro, estaba lista y preparada para todo lo que sucediera hoy en la cita.

Llegue a el lugar de encuentro, realmente llegue temprano así que compré un café en la cafetería más cercana y regrese a el parque. Vi a un chico sentado en donde yo estaba hace poco, me puse nerviosa.

Ya sentía como mis manos sudaban y mi corazón latiendo a mil. Me acerque y me senté un poco lejos de él, pero lo suficientemente como para que él notara mi llegada.

Me miró fijamente por unos segundos y luego giro otra vez su mirada a otro lado, pero luego me habló.

- ¿Eres ________? -dijo mirando todavía hacia el frente-
- si, soy yo ¿Tu eres Jay? -él negó- entonces ¿Cómo conoces mi nombre?
- soy amigo de Jay, me pidió que te llevará a un lugar
-él chico llevaba cubrebocas y se lo bajo- soy Heeseung, sígueme o llegaremos tarde.

No dije nada y solo lo seguí, un poco de miedo si tenía la verdad, no sabía que estaba pasando, pero si Jay le había pedido esto a un amigo es porque estaba planeando algo.

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Caminamos un rato fuera del parque, hasta llegar a un restaurante japonés, Jay sabía que me gustaba la comida japonesa.

Heeseung paro en toda la entrada y me dio una señal para que pasará, le di las gracias y entre.

- ¿Acá esta Jay? -él negó- ¿Entonces?
- me pidió que te trajera para que escogieras comida para llevar que te gustara
-nos acercamos a la barra y pedimos la comida- vamos a sentarnos a esperar -nos sentamos en la mesa-
- ¿Qué se supone que esta planeando Jay? -Heeseung solo me miraba sin decir nada- por lo menos dime que ya en la próxima parada lo voy a poder ver.
- te juro que quisiera decirte, pero no puedo
-suspire y me recosté en la silla donde estaba sentada- perdóname, prometí no decir nada.
- esta bien
-le sonreí- no te preocupes... 

Pronto nos llamaron para recoger el pedido y nos fuimos camino a una tienda del dólar a comprar otras cosas. Creo que ya me iba dando cuenta por donde iba esto. Compramos una manta de picnic, unos platos y vasos lindos. Al parecer íbamos a tener un picnic, creo que me sentía mas tranquila, pero la verdad estaba confundida.

- bueno ahora si vamos a ir a el destino final -me alegre y ahora me volvieron a regresar los nervios- ¿Estas preparada?
- si, aunque bueno ya el maquillaje se me habrá desecho y me veré fea.
- tranquila, no te ves fea... estas linda, estoy seguro que a Jay le gustaras mucho
-palmeo mi cabeza con suavidad- igual si se invitaron y él esta haciendo esto por ti es porque le gustas -eso me tranquilizo y seguimos caminando hasta llegar a el destino- llegamos, Jay esta al final del camino de piedras -me entrego las cosas- que te vaya bien.
- gracias Heeseung, nos vemos luego.

Camine por todo el camino de piedras, a lo lejos vi una silueta de un chico alto. Mientras mas me iba acercando pude reconocer a el chico. Jay se veía tan bien, tenia unas flores en las manos, estaba rodeado de velas, porque ya estaba casi oscuro, y una copa de vino y postres. Siento que se veía mi cara de alegría a kilómetros, pude ver como Jay sonreía mientras me acercaba. 

Llegue frente a él, deje las cosas con cuidado en el piso y nos abrazamos. Estuve esperando por mucho tiempo este momento, estar en sus brazos era fantástico, podría sentir su calidez y sus fuertes brazos rodeándome, además de que olía muy bien.

- estuve esperando este momento todo el día -dijo él todavía abrazándome- te ves hermosa, igual que todos los días que te veía en detrás de la cámara -me sonroje y me separe un poco para poder apreciar su cara mejor-
- tu te ves mejor en personas que de lo que te ves en cámara -rio y beso mi frente- 
- armemos todo para poder ver la puesta de sol -asentí y ayude a organizar todo- 

Todo salió genial, fue la mejor cita que había tenido en mi vida. Hablamos mucho y luego caminamos por la playa en la que estamos haciendo el picnic. Caminamos agarrados de la mano, fue un momento muy romántico.

La marea comenzó a subir por lo que decidimos irnos y acabar con la cita. Me llevo a mi casa en su auto, escuchamos música y hablamos por todo el camino a mi casa. Cuando llegamos el se bajo y abrió la puerta del auto y me ayudo a bajar. También me acompaño hasta la puerta de mi casa.

- bueno ya llegamos a mi casa -dije girándome hacia él- me encanto esta cita y me encanto verte a ti, fue mas de lo que yo esperaba.
- yo también, esto fue mejor de lo que pensé que iba a estar... conocerte ha sido lo mejor que me ha pasado
-me sonroje- no encontré el momento cuando estuvimos en la palaya para decirte esto, pero... -saco un anillo, me puse nerviosa pero cuando escuche lo que dijo me emocione- quiero saber si tu ¿Quieres ser mi novia y sellar nuestra relación con este anillo de promesa? 
- claro que si quiero Jay
-nos abrazamos y luego él me puso el anillo- no pensé que me lo ibas a pedir.
- ¿Cómo no iba hacerlo? Si tu haz sido la persona que me apoyo estos meses, además que me gustaste  desde que comencé hablar contigo.
-  tu también me gustas mucho Jay y estoy feliz que por fin seamos novios.

Jay se acerco a mi y nos besamos, el tan esperado beso. Fue un beso largo y lindo, nada desesperado. Pude sentir el amor y calidez de parte de ambos que desprendía el beso. Nos separamos y nos sonreímos.

- bueno será mejor que me vaya ahora, no quiero que tu mama se preocupe porque no te ha visto entrar.
- jajaja tienes razón
-lo abrace y bese sus labios- nos vemos luego, me escribes cuando llegas a casa.
- esta bien
-camino hacia su auto y antes de entrar grito- ¡Te quiero mucho!
- ¡Yo también!
-me despedí con la mano y entre a mi casa- 
- yo también lo quiero -me sobre salte por mi mamá detrás de mi-
- me asustaste mamá -puse mi mano en mi pecho- me estabas espiando.
- claro, estaban hablando muy alto
-gire los ojos- ¿Cuándo me lo presentas? 
- algún día mamá... algún día
-subí a mi habitación mientras mi mamá llamaba a mis tías para contarle lo que paso-

Al final la espera valió la pena, aunque vaya a ser luego la comidilla de mis tías, lo que importaba era que por fin iba a estar con el chico que me quitaba el aliento cada que me escriba.

[One §hots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora