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La pareja se encontraba acostada en la cama, Yoongi le besaba el cuello a Jimin mientras sonreía ante las pequeñas cosquillas que estaba recibiendo, ambos se vieron y se dieron un corto beso. El pálido estaba feliz de tener a Jimin a su lado, era como si su humanidad hubiera vuelto gracias al lindo castaño respondón.

—¿Cuándo te irás? —preguntó Jimin.

—Mañana por la noche. —le acarició el rostro. —te prometo volver.

—Cuídate por favor. —dijo Jimin. —y vuelve a mí.

—Lo haré. —sonrió.

Jimin se ocultó en el pecho de Yoongi y este solo lo abrazó, solo pensaba en que al volver Jimin ya no estaría a su lado o en el peor de los casos estaría muerto. El castaño poco a poco iba cerrando los ojos por las caricias que estaba recibiendo a tal punto que se durmió, el infectado lo recostó con delicadeza y salió de la habitación para dirigirse a la suya y preparar lo que llevaría. En el camino se encontró con aquel hombre y aquella mujer, los cuales lo habían llamado para buscar a su hijo perdido, él suspiró y se acercó para poder hablar con ellos.

—No los esperaba tan pronto. —los vio. —ya hablé con mi padre, solo necesito los datos de él.

—Te los daremos pronto. —habló la mujer.

—No prometo nada. —dijo. —si él no está infectado, lo más probable es que sea esclavo, comida o puede que esté en un refugio.

—Entendemos. —habló el hombre.

—Vuelvan en cuatro días con los registros de su hijo. —les dijo. —mi padre estará para ese entonces.

La pareja se fue y Yoongi se dirigió a su habitación, él miró la marca de la mordida, la cual había sido cubierta por pintura que Jimin le había puesto y en ella estaba un dibujo de un gatito. Él miró su cuaderno y comenzó a escribir en este el posible destino que tendría Jimin según sus instintos, al amanecer pasó un tiempo con Jimin, pero se tenía que ir al medio día.

—Volverá. —susurro Jimin cerca de los labios de Yoongi.

—Te lo prometo. —le dio un corto beso. —tu espera por mí.

—Aquí estaré amo. —dijo Jimin y Yoongi río.

—Dime amor. —lo atrajo más a él.

—Aquí estaré amor. —lo vio a los ojos. —y te esperaré con una hermosa cena.

—Ya me lo puedo imaginar. —suspiro.  —ya casi es hora.

—Ni lo menciones. —negó Jimin.

Yoongi lo volvió a besar como si fuera una despedida para ambos, Jimin se apegó más a él disfrutando del beso, eran una pareja un tanto extraña para los demás infectados de la casa, pero no tenían derecho a opinar en cuanto las decisiones del dueño de la casa.

If i were a zombie [Y.M] [#1] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora