Nunca pensé en esto (Jeff the killer)

No es un monstruo

Iba caminando por las calles oscuras y sentí que alguien me llamaba.

-¡Nerea!-Su voz era dulce y suave. Escuchaba la voz cada vez más cerca.-¡Nerea!-Alguien me tocó el hombro.

-¡Suéltame!-Grité sin saber quien era.

-¡Eh! tranquila...Soy Emma.

-Ah...Lo siento Emma, no era mi intención gritarte así.-Dije cabizbaja.

-No pasa nada...¿Estas bien?-Yo sólo asentí.-Te noto rara. ¿Te has peleado con alguien?

-Más bien es que no me entiendo.-Suspiré.-No logro saber que me ocurre.

-¿Por qué piensas eso?

-No lo sé.-Negué con la cabeza.-Me siento extraña.

-Eso suele pasar, pero no te preocupes por eso.-Me sonrió.-¿Vives sola?

-No.

-Ah, ¿Vives con tu novio?

-Vivo con mi mejor amigo.

-Vaya, que bien. Yo vivo sola y se vive muy bien también-Soltó una ligera risita.-¿Quieres dar una vuelta?

-Claro.

Estuvimos caminando por muchas plazas y a Emma le encantaba todo. Fuimos a su coche y me subí en él.

-¿Dónde vamos?-Pregunté confusa.

-De vuelta a tu hogar...-Me colocó un tipo de paño en la nariz y la boca y de repente me dormí.

***

-¡Nerea!-escuchaba voces muy conocidas.-¡Nerea somos nosotros!-Intentaba despertarme pero no podía moverme.-Vamos, abre los ojos...

Abrí los ojos lentamente. Todo estaba borroso y pude ver a cinco personas por lo menos.

De repente comencé a ver algo mejor y pude distinguir cosas.

-¿Daniel?-Pregunté mientras me levantaba un poco del sofá.

-Exacto-Me sonrió y me abrazó fuertemente.

Después me abrazaron mi madre, Carla y Laura.

-¿Qué hago en casa?-Dije confusa.-¿Cómo he llegado aquí?

-Nerea...-Dijo Daniel.-Te trajo Emma

-¿Tú?-La miré de mala manera.

-Es una espía profesional y trabajó en el FBI.-Contestó Daniel.-La contratamos para salvarte.

-¿Salvarme de qué?

-De el monstruo.-Dijo mi madre.

-¿Qué monstruo mamá?-Dije confusa.-¿Hablas de Jeff?

-Sí.-afirmó.-Nunca pensé que Jeff, aquel chaval al que traté como un hijo más fuese un psicópata...

-Mamá...¡Él no es un monstruo!-Dije cabreada.-¡¿Qué habéis echo con él?!-Alzé la voz.

-Tranquila-Contestó Carla.-Pronto lo capturaran.

-¿¡Qué!?-Exclamé de pie.-¡¿Dónde está Jeff?!