Nunca pensé en esto (Jeff the killer)

Ni la toques

-Nerea despierta, vas a llegar tarde-Dijo Laura balanceandome.

-¿que pasa?-Me enderecí y me froté los ojos.

-Hoy es Lunes, tienes trabajo y una vida-Dijo subiendo las persianas a lo que gruñí y me di la vuelta tapandome con la manta.-Vamos dormilona.

Me levanté con dificultad ya que estaba muerta de sueño. Me lavé la cara y me despejé un poco más.

Desayuné unas tostadas con un zumo de naranja exprimido y me vestí.

-¡Me voy!-Grité desde la puerta de salida.

-Vale-Girtó Laura.

En la calle hacía frío, bastante frío. Mi aliento desprendía aquel humo blanco. Me subí un poco más mi bufanda ya que hacía mucho frío y llegué a mi trabajo.

-Buenos dias-Saludé a la gente que me iba encontrando.

-Señorita Winchester-Me llamó mi Jefe.

-Dígame.-Le atendí con una sonrisa.

-Tiene que quedarse hoy 3 horas más, pero tranquila, esas 3 horas se la descontaré de mañana.

-No pasa nada, ¿A que se debe eso?

-Tienes bastantes pacientes.

-Está bien-Respondí con una sonrisa que mostraba mis dientes.

***

-Uf, si tu supieras la de trabajo que he tenido hoy-Le dije a Daniel, que estaba sentado encima del escritorio.

-Yo también-Asintió-Pero lo bueno es que nos iremos juntos.

-Me temo que no-Hice un puchero.-Tengo que acabar algunas cosas.

-Me quedo contigo, tranquila.

-No, no hace falta, vete tranquilo.

-Vamos, así te hago compañía.-Insistió

-Que no Daniel, ve que yo necesito hacer trabajo.

-Esta bien-Suspiró.-Espero que termines pronto.

-Lo haré.-Le dí un beso en la mejilla y él me abrazó, necesitaba aquel abrazó cálido en el que me sentia segura aferrada a sus brazos. Antes de separarme de él pude ver una silueta de alguien en la oficina.

-¿Que pasa?-Dijo asustado ya que me separé de él de un golpe.

-Me había parecido ver a una persona.-Dije rascandome la nnuca.

-Hay vigilantes aquí, tranquila.-Y si, en efectivo, era un vigilante.

-Ah, que tonta soy-Reímos los dos.-Bueno, no te quiero entretener más.

-No lo haces, Nerea.-Me sonrió tiernamente.-Sólo me atraes y me vuelves loco con cada cosa que haces-Me sonrojé al instante, odiaba eso y él al ver que me sonrojé soltó una ligera risita.-Eres perfecta.- Me susurró al oído haciéndo que me estremeciera, cojió un mechón y lo apartó de mi cara colocandolo detrás de mi oreja.

-Tú también.-Mierda, ¿Yo he dicho eso? Que vergüenza.

Él llevó sus manos a mi cintura y me atrajo hacía él, sólo estábamos a milímetros de besarnos, e incluso casi rozaron nuestros labios.

-Ni la toques o no quieras acabar como este-Nos interrumpió nada más y nada menos que Jeff, que estaba señalando a un guardia desangradose en el suelo, con miles de apuñaladas en su estómago...