Nunca pensé en esto (Jeff the killer)

Ella te odia

-¿No te das cuenta? Jeff ya no es el de antes...¿Cómo te puede gustar un asesino?-Dijo con un gesto de asco.

-Mira Daniel, tal vez Jeff no sea el chico perfecto...Ha cometido errores, muchos...Pero sigue siendo humano. Si yo quiero estar junto a él es por algo.

-Pues, no lo entiendo...

-Daniel...Por favor, déjame en paz-Dije suplicándole.-Dime dónde está.

-No puedo decirte eso.

-¡Dímelo!

-Nerea, calmante-Dijo poniendo su mano sobre mi hombro, en ese momento alguien nos hizo una foto.

-¡Eh tú!-Grité a aquel hombre que nos hizo la foto.

-Déjalo...

-¡Nos ha echo una foto!-Exclamé.
Narra Jeff:

Me sentía molesto e incómodo. Notaba un fuerte dolor en mi pierna y mi cabeza, abrí lentamente los ojos y me encontraba atado en una silla. Mi pierna sangraba mucho por culpa de una herida.

-Vaya...Vaya...Vaya-Dijo un hombre alto y muy fuerte.-Te tengo que decir que a mi lado eres una hormiga indefensa...

-¿Quién eres?

-El hombre que te arruine la vida.-Empecé a reír.-Y también el que arruine la vida de Nerea...-En ese momento paré de reír.-¿Qué pasa? ¿Ya no te hace gracia?

-No la toques-Dije entre dientes.

-¿Por qué te interesa tanto esa muchacha?-Se paró en frente de mi.

-He dicho...¡Qué la dejes!

-Eh...Calmate. ¿De verdad crees que Nerea quiere estar contigo?-Rió.-¿Por qué te crees que se fue, Jeff? Mira esta foto...-Me enseñó una foto en la cuál salían Nerea y Daniel. Daniel le estaba colocándole el brazo en el hombro a Nerea.-¿Qué opinas?-No contesté, me quedé callado y pasé de él.-¿Te acabo de romper el corazón?-Dijo en tono burlón para luego descojonarse de mi.

-¡Vete a la mierda!-Mascullé.

-Ella te odia...¿Cómo iba a estar contigo? Sólo te da problemas...Es una niñata inmadura.-Me quedé pensando, tal vez ese hombre tenía razón...-Se fué para estar con Daniel.

-¿Por qué tendría que creerte?

-Por que tengo razón.

Miré hacía otro lado fijando mi mirada al suelo. Me extrañaba que Nerea me dejase sólo...Pero lo hizo una vez y lo puede hacer miles de veces.

-¿Y qué pretendes que haga?

-Nada...Porqué no te voy a dejar marchar-Dijo el hombre.-Ella me obligó a que sufrieras, y así lo haré.-Dijo sacando un bate de béisbol...