Tomo una gran bocanada de aire cuando salgo por la superficie, lo primero que escucho son las sinceras carcajadas de William a mi lado, el cual ya ha nadado hasta la parte menos profunda, sentándose en el escalón y el agua llegándole por debajo del pecho, su traje completamente empapado. Veo una figura negra nadando debajo del agua, Tobías sale a la superficie junto a Will y los dos chocan sus palmas mientras ríen, su chaqueta de cuero descansando sobre la mesa en la que estábamos y sus zapatos junto a ella.
—Oh, ustedes dos están acabados. —Amenazo mientras comienzo a lanzarles agua con las manos.
Los tres reímos como unos completos locos mientras tenemos una guerra todos contra todos, mi tiara reposando en el fondo del agua y mis tacones perdidos por algún lado.
Nado hacia ellos y Tobías enreda mis piernas en su cintura, me da un largo beso que es interrumpido por Will subiéndose a mis hombros.
—¡No dejaré que te ataquen, princesa. Yo te protejo!
Will comienza a mover las piernas, empapando el rostro de Tobías por completo.
—¡Ey, yo no soy un enemigo! —Dice mientras se cubre el rostro con las manos.
—¡Sí lo es, Will, no le creas! —Digo mientras me uno al equipo de mi primo.
Estamos riendo, sin ninguna preocupación en el mundo, cuando escuchamos una voz.
—¡William Junior!
La voz de mi tía Eva explota nuestra divertida burbuja y me doy la vuelta para mirarla, el cuerpo de Will se tensa sobre el mío.
—Ha sido mi culpa, tía. Lo siento, yo lo he tirado al agua. —Digo mientras tomo a William y lo cargo en brazos mientras lo llevo al borde de la piscina.
—No, querida. Se quería meter al agua desde hace rato. No te preocupes. —Luego mira a Will. —Sal del agua ahora mismo, que tendré que decirle al chofer que nos traiga otro traje.
—¿Puede quedarse un rato más? —Pregunto mientras me aferro a él con fuerza. Lo veo muy pocas veces al año, pues mi padre no es muy cercano con sus primos, y quiero pasar todo el tiempo del mundo con Will mientras puedo. —Quiero decir, está mojado y podría enfermarse. Puede quedarse conmigo mientras llega el otro traje.
—Tú también vas para afuera. —Escucho a mi padre mientras se coloca junto a mi tía, los puños a sus costados. —Y tú, —Señala a Tobías. —Te quiero fuera de mi propiedad ahora mismo.
—Al menos los dos fracasamos hoy. —Susurro en el oído de mi primo y él ríe.
William sale del agua con ayuda de su madre, le colocan una toalla y lo llevan dentro de la casa. Nado hasta Tobías y enredo mis piernas en su cintura, mi cuerpo a un costado de él y mis brazos en su cuello aferrándose con fuerza, sus manos haciendo lo mismo con mi cintura.
—Él no se va a ninguna parte. —Digo seria, pero mi tono apenas un susurro.
Sé que le he arruinado la fiesta a mi padre, pero es mi cumpleaños, así quiero pasar el rato, incluso si quedo como una mal educada frente a sus amigos de trabajo que comienzan a susurrar entre ellos.
—Alyssa. —Dice entre dientes, su paciencia terminándose. —No te lo voy a repetir, sal ahora mismo de la piscina y ve a cambiarte, que ya llegó el fotógrafo.
—No me voy a ningún lado. —Digo, ésta vez más segura.
—Pero él sí. —Señala a Tobías con un dedo acusador.
—¿Sabes qué? Tienes razón. Tobías agarra tus cosas. —Lo miro y me mira confundido, un poco de miedo en sus ojos. —Nos vamos. —Digo mientras miro a mi padre.
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Enamorada Del Diablo
Teen FictionDespués de un año, Alyssa regresa a Seattle para comenzar el año más importante de su vida, ese por el que tanto ha sacrificado, pero algo ha cambiado. Algunos pensarían que es imposible notar cuando una sola persona llega a la ciudad, pero se...