Camilo continuaba impasible a su propuesta, desde luego que no le importaba para nada sacar a todos a palos de encanto, pero al menos de esa forma no podían decir que no les dio opción. Sin embargo nadie decía absolutamente nada, en lugar de eso todo el mundo estaba pendiente a cualquier movimiento entre ambos lideres.
- Básicamente me estas pidiendo que me largue de encanto sin más ¿no? o sino me matas.
Se encoge de hombros.
- Básicamente, a mi me parece un buen trato, ¿Qué me dices?
- Vete a la mierda.
Sonríe.
- Si es lo único que te queda por decir, creo que se ha terminado la negociación - asiente - creo que no me quedará más remedio de hacerlo a mi manera.
- ¿Vas a pegarme? - gruñe divertido.
- No - contesta Camilo en el mismo tono - voy ha hacerte más que eso.
- No eres capaz Madrigal.
- No sabes de que soy capaz.
- ¿Por qué? ¿Por proteger a tu mujercita? - se carcajea - acabaré contigo, y cuando todo eso termine, iré por ella, y nos divertiremos en tú nombre.
- Como te acerques a ella...
- ¿Qué? - se burla - déjame decirte que tú eres el que está aquí con todos nosotros - le empuja sin lograr moverle consiguiendo un carcajeo general.
- No hagas eso - gruñe Camilo.
- ¿El qué? ¿esto? - da un empujón todavía más fuerte pero que a penas hace que Camilo retroceda un paso - ¿Qué vas ha hacer?
- Puedo hacerte mucho daño.
- ¡Demuéstralo! - ríe divertido - ¡Eres solamente un cobarde Madrigal! ¡Estás aquí solo porque te respalda tu querida familia! ¡No eres nadie sin ellos!
Se encoge de hombros.
- Supongo que por eso se llama familia, porque sin ellos no soy nada, pero ¿y la tuya? debes de sentirte solo - finge un puchero
- Eso es todo lo que tienes que decir Madrigal, yo estoy rodeado de mi gente.
- Estar solo rodeado de tanta gente - se cruza de brazos, carraspea - es triste. ¿Qué pasa? Las verdades duelen no? Mejor mira de nuevo a quien tienes a tu alrededor, porque mi familia daría la vida por mi y yo por ellos, porque somos familia, pero en cuanto a la "tuya" - hace comillas con los dedos volviéndose a cruzar de brazos - en cuanto ven como pierdes te van a dejar tirado. Por tanto, te lo diré claro, VAS A PERDER - vocaliza exageradamente.
- ¿Estás seguro?
- Bueno, da el primer golpe, y cuando comencemos a ganar, veremos de verdad quien está a tu lado.
- ¿Intentas provocarme?
Camilo se coloca frente a él, acerca la cara a la oreja de él.
- Podemos seguir jugando todo lo que quieras al gato y al ratón, de todas formas todos saben hasta donde llegarás, te has estado escondiendo muy bien, esto te viene grande - le reta - pero en tal caso te puedes echar para atrás, igualmente, es normal que tengas miedo.
- No tengo miedo... - gruñe
- Ya, si tu estuvieras en mi casa ya te hubiera pegado, pero ni si quiera delante de tu gente te atreves - provoca - pero sabes, a mi no me hace falta eso, en mi caso prefiero venir de frente, aquí estoy - se señala - ¿y sabes porque me meto en tu territorio? porque planeo llevar mi victoria a otros niveles - se burla.

ESTÁS LEYENDO
Mirame con otros ojos
RomanceMirabel ha cambiado desde que salvó el encanto, y sus sentimientos al igual que ganas de vivir se reducen a cero, y eso es así hasta que su primo Camilo, con el cual jamás ha tenido ninguna clase de relación, se da cuenta por una pequeña casualidad...