Capítulo 5: Pedido de ayuda

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Después de su corta llamada con Lydia, Stiles se quedó un momento en silencio meditando sobre lo que estaba a punto de hacer, convenciéndose de que era lo correcto.

—¿Papá...?— escucha la voz somnolienta de Dalton detrás suyo, volteando, viéndolo bostezar al comienzo de las escaleras — ¿Por qué te levantaste tan temprano?

—Podría preguntarte lo mismo. — dice Stiles sonriente acercándose a su hijo para acariciar su cabello alborotado — Pensé que dormirías hasta medio día.

—Eso quería... pero te escuché bajar las escaleras y me dio curiosidad saber qué hacías.— dice Dalton frotando uno de sus ojos.

—Si no fueras curioso, no serías mi hijo. — reconoce el mayor con una sonrisa.

—Lo sé, viene en el paquete Stilinski.

—Así es, cachorro. — dice acariciando el cabello de su hijo, que se acerca a él para abrazarlo y frotar su cabeza contra su hombro — Deberías dormir un poco más.

—No, ya desperté. No volveré a dormir aunque lo intente.

—Entonces vamos a desayunar. — dice Stiles separándose para mirar a su hijo — Ve arriba a darte una ducha y a lavarte los dientes en lo que preparo el desayuno.

—Está bien.

Luego de que Dalton subiera a su habitación para hacer lo que le habían dicho, Stiles estaba preparando un desayuno saludable pero delicioso para él y su hijo, cuando le llegó un mensaje de Lydia.

Lyds <3

"Vamos a reunirnos para el almuerzo. Comeremos en el patio de comidas del centro comercial, y luego de comer podemos hacer que Dalton lleve a Clint y Mer al cine a ver una película. Así quedaremos solos y podremos hablar"

Yo

"Buena idea"

Lyds <3

"Nos vemos a las 13:00 en punto en el patio de comidas"

Yo

"Ok."

"Gracias Lyds."

Lyds <3

"De nada, cariño. :)"


Stiles terminó de preparar el desayuno y lo puso en la mesa, y luego de unos minutos bajó Dalton, que al ver varias montañas de pancakes de distintos tipos incluyendo chocolate se sonrió y se acercó viendo a su padre con ojos brillantes.

—¿Qué es todo esto?

—Pues verás, había pensado en hacer un desayuno saludable para ambos a base de avena y semillas, pero me di cuenta que no tengo ganas de comer comida de pájaros hoy, y se me antojaba comer pancakes, pero no pude decidirme por una sola mezcla, así que terminé haciendo de todo un poco.— explicó sentándose con una taza de café junto a su plato.

—Lo siento, me perdí después de que dijiste desayuno.

—Sólo siéntate, Dal. — dice Stiles rodando los ojos.

—Sí, señor.— dice Dalton sentándose y comenzando a tomar pancakes de diferentes sabores y llevándolos a su boca.

—Provecho. — dice Stiles con una sonrisa divertida, comenzando a comer también.

Ambos disfrutaron de su desayuno, o al menos Dalton lo hizo, pues cada vez que Stiles tragaba sentía su garganta quemar y el reflejo del vómito activarse, por lo que comía lentamente y pasando todo con tragos de café. Odiaba lo que le estaba ocurriendo, y más odiaba no poder hacer nada para evitarlo. Vio a su hijo comer frente a él mientras le comentaba lo que estaba pasando en su serie y él sólo lo escuchaba, viéndolo por unos instantes como un pequeño de cuatro años nuevamente comiendo los desayunos que le preparaba antes de llevarlo a la guardería, volviendo a verlo con su edad actual, y soltó un pequeño suspiro, viéndolo con profunda adoración y cariño.

HIJO DE UNA CHISPADonde viven las historias. Descúbrelo ahora