Broken © (2da parte de Stalker Love)

Capítulo 30

Los pasillos estaban llenos de adolescentes en busca de trapitos finos y accesorios para aquel evento. Una de las cosas que siempre me causarán fastidio serán estos "viajes".

Nora y Marjorie miraban los maniquíes con los vestidos, la ventaja con ellas era que no entraban a cada tienda y sabían en donde estaban localizadas las que ellas solían visitar; no tardamos demasiado en encontrar una de esas tiendas en la cual entramos y la encargada reconoció a la pelirroja.

— Señorita Nora, bienvenida –saludó la mujer-. ¿En qué le puedo ayudar?

— Buscamos vestidos para una noche de baile en la escuela –dijo-. ¿Crees que nos puedas ayudar, Elisa?

— Por supuesto, my lady –respondió-. En un momento le daré las elecciones.

La mujer entró en lo que supuse era la bodega mientras miré un poco el lugar, sintiéndome un poco extraña por ver la elegancia de aquellas ropas y mis orígenes desconocidos.

— Tranquila, Nikki, estamos en el lugar correcto –dijo Marjo-. Es por eso que me agrada también, hay un buen servicio.

— ¡Exacto! –dijo Nora mientras se acercó a nosotras-. Estoy segura que aquí encontraremos lo que necesitaremos para el baile.

— Confiaré en ustedes en tal caso –dije, les dediqué una ligera sonrisa mientras miré alrededor-. Este baile es algo que se toman muy en serio, ¿verdad?

— Solo por la guerra de atuendos –dijo la pelirroja-. Realmente se pone divertido cada año.

— Y sin mencionar a los chicos.... –dijo Marjorie-. Hacen su mejor esfuerzo por deslumbrar a las chicas.

— Y viceversa –dijo Nora, guiñando el ojo.

— Tratarás, o, mejor dicho, seguirás intentando, ¿cierto? –dije.

— Estoy segura que lo conseguiré pronto –dijo con determinación. Me miró-. Y tú, debes impresionar a Damián.

— Él no me interesa mucho.... –desvié la mirada-. No debo por que tratar de hacerlo.

— Cuánto tiempo seguirás negando lo obvio, Nikki; Damián te gusta tanto como lo quieras negar.

— En la sociedad hay chicas más atractivas que yo –le expliqué-. Con buena posición, conmigo no conseguiría nada.

Antes de que ella contestara, Elisa regresó con una pila de vestidos en sus manos y la colocó en uno de los sofás.

— De acuerdo a sus apariencias, estos son los más apropiados para una noche escolar.

— Gracias, Elisa –dijo Nora con una sonrisa.

— Si necesitan algo más, no duden en llamarme.

— Muchas gracias –dijo Marjorie mientras ella se fue-. Bien, entonces debemos probar tres vestidos primero y mostrarlo a las demás.

— Empezando contigo, Nikki –me dijo, y me dio tres vestidos al azar mientras me guió hacia el probador-. Recuerda, debes mostrarlo.

— De acuerdo.... –cerré la puerta y puse los vestidos en la pequeña banca y comencé a quitar mi ropa para colocar el primer vestido, era uno que llegaba hasta mis rodillas, con estampados florales color beige, tomé un vistazo en el espejo ahí... No era del todo atractivo.

Salí del vestidor mientras las chicas se enfocaron en mí.

— No.... –habló Marjorie.

— Debe resultar más tus curvas –dijo Nora.