Capítulo 3

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Mi expresión era de asombro mezclada con sorpresa. Para ser honestos, no pensé que volvería a ver a Luciana Alessandri luego de que salí del internado; ni siquiera sabía que hacía en España.


- ¿Qué es lo que hace aquí? -me atreví a preguntar.

- Supe hace un tiempo que habías dejado Italia -comenzó a decir- Aunque sea un poco extraño, debía observar sí te encontrabas bien.

- ¿Además de un pasado difícil? Creo que estoy perfectamente.. -caminé hacia una de las sillas frente al escritorio de Mark y tomé asiento- ¿Cómo supo que me encontraba en este sitio?

- Yo fui quien le dio tu ubicación -habló el hombre con total calma.

- Y supongo que esa información fue dada por Damián -dije. No tenía que pensar mucho, asintió.

- Me doy cuenta que te han tratado bien en este lugar -habló la directora- Asumo que sigues siendo una buena estudiante.. en cuanto a las notas.

Solté una ligera risa ante sus palabras.

- Por supuesto. Tal como en el internado.

- Parece que ustedes tienen mucho de qué hablar -dijo Mark- Les dejaré hacerlo en privado.

- Se lo agradezco, señor Sotelo.

- No tiene que agradecer -dijo con una ligera sonrisa.

- Gracias, señor -dije con respeto.

Mi charla con Alessandri duró aproximadamente una hora, al parecer su visita tenía un propósito. Uno quizá muy bueno:Me comentó sobre la actual situación del internado, había pasado a manos de sus hijos quienes se encargarán de eso mientras ella esté en España; me propuso o mejor dicho, me informó que a partir de la siguiente semana vendría por lo menos dos veces por semanas para dar 'clases' a los más jóvenes de la mansión. "Por órdenes de Mark" supuse, y cada sábado vendrá a verme especialmente a mi... no puse objeción ante aquello, pues de alguna manera estaba agradecida con ella cuando me dio techo al encontrarme frente a las puertas del lugar.

La acompañé hacia la puerta principal luego de nuestra plática y me despedí de ella, miré como subió al auto en el cual había arribado y esperé a que saliera de la mansión; cerré la puerta y me dirigí al comedor parar la comida, observé que ahí se encontraban Mark y Damián esperándome, me senté en mi lugar aguardando que la comida fuese servida.

- ¿Todo en orden, Nicole? -cuestionó el hombre.

- Si señor -asentí- Creo que la directora ya te lo había dicho antes de que entrara.

Asintió.

- Me pareció una buena idea. De algún modo es una persona que te conoce por completo. Así que, espero buena disciplina por parte de ambos.

- Dirás, de los tres... -murmuré.

Casi al instante de decir aquello, Jason entró al comedor con esa misma expresión seria, tomó su respectivo lugar sin hacer contacto visual con nadie; aquello quedó sumergido en un completo silencio que me hizo dar cuenta que sería una larga comida.

Y lo fue.

Al terminar salí del lugar mientras el dueño de la mansión hablaba con ambos chicos de un asunto que desconocía pero que tampoco iba a preguntar. Subí hacia mi habitación y me recosté sobre la cama, cerré los ojos por un momento tratando de descansar pero el móvil inició a sonar sobre la mesita de noche, lo tomé y me dispuse a contestar.

- ¿Hola?

- Hola Nikki, ¿Cómo has estado?

- Alma -me agradaba escuchar de ella- He estado bien.. -"O casi bien..."- ¿Y tú, cómo te encuentras?

Broken © (2da parte de Stalker Love)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora