Capítulo 50

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Comencé a abrir los ojos de manera lenta, la luz que entraba por la ventana era la única que iluminaba la habitación; me sentía bien... recuperada, la herida no era una molestia ya. Ladeé la cabeza hacia mi izquierda, y ahí observé a Damián quien me miraba con expectación.

— Damián.... –saludé.

— ¿Cómo te sientes? –cuestionó, sentí el tacto de sus dedos sobre mi mano.

— Un poco cansada, pero lo que se refiere a la herida, el dolor ha desaparecido. –respondí-. ¿En dónde estamos?

— En la mansión. En nuestra recámara. –dijo, su mirada tenía algo distinto: alivio-. Me da gusto poder esos ojos de nuevo.

— Si no fuese así, irías por mí para traerme de vuelta. –dije, lo que le hizo sonreír.

— Con tal de tenerte en este mundo, haría lo necesario. –mencionó, apretó un poco mi mano-. Ya no tienes que preocuparte por nada, Niccole; se ha terminado.

— Pensé que moriría.... –dije con un pequeño cambio en mi voz-. Tenía miedo de esa oscuridad que me invadió al principio, pero después fue una inmensa tranquilidad en la que me vi envuelta. –Rosell me miraba con atención mientras continué-. Conocí a mis padres, Damián... he visto sus rostros; finalmente he conocido a mi familia...

— Perdías demasiada sangre al momento que la ambulancia arribó. –me explicó, bajó la mirada-. No me perdonaría jamás si hubieses muerto por culpa de ese imbécil. Fue una decisión mortal...

En ese momento la puerta se abrió y giré la cabeza para mirar a Mark entrar, su rostro era una mezcla de preocupación y alivio cuando me observó; se acercó hacia nosotros.

— Gracias al cielo que despertaste. –dijo, acariciando mi cabello-. No tenía a todos muy preocupados.

— Lo lamento. –me disculpé, bajé la mirada-. Todo se habría evitado si le hubiese escuchado.

— Eso ha quedado en el pasado, Nicole, lo importante ahora es el inicio para cada uno de nosotros.

— Siento como si algo cambiara en mi.... –dije, desde el momento que abrí los ojos hubo algo que se sentía diferente en mi cuerpo.

— Eso es normal. –habló el hombre, caminó hacia el lado donde Damián se encontraba y me miró-. Eres el primer caso que ha despertado de manera rápida...

¿Despertar? ¿A qué se refiere con eso?

"Luego de rescatarles, colocó un sello de protección el cual inhabilita su lado vampiro hasta el momento adecuado". Las palabras que mi madre me dijo comenzaron a darme una idea de lo que quería significar el término «Despertar»; recordé aquella visión que observé meses atrás en la azotea del edificio del señor Lucio.

Mi rostro debió darles la pista cuando les miré con algo de asombro.

— Bienvenida a la sociedad, señorita Montenegro. –sonrió Mark-. Tómate el tiempo que necesites para adaptarte.

— Amelia me ha dicho que, está orgullosa por cada cosa que has brindado a la sociedad a lo largo del tiempo. –hablé, sus ojos me miraron sorprendidos ante mis palabras-. Y te está eternamente agradecida por el amor que vivieron.

Una ligera sonrisa apareció en su rostro al escucharme, observé un ligero brillo en sus ojos que algo movió en su interior; caminó hacia la puerta, pero se detuvo para mirarme de nuevo.

"Gracias, Nicole; esto es lo que necesitaba oír".

Damián y yo quedamos solos, miré hacia la mesita de noche, eran las tres de la mañana y el cielo se mostraba despejado luego de varios días en lluvia... todo había ocurrido de manera rápida que apena lograba procesa las cosas.

Broken © (2da parte de Stalker Love)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora