Regresamos a la mansión un poco después de la una, estaba mentalmente exhausta luego del "trabajo" realizado en aquella reunión. Me despedí de las personas con las cuales ya tenía confianza, recibiendo uno que otro abrazo de felicitación; salí del sitio acompañada de mi "guardián" y Mark, Jason se fue junto con el resto del personal.. cosa que era mejor para ambos.. No necesitaba problemas.
Una vez que entramos me deshice del calzado, sinceramente no estaba segura de acostumbrarme a esos malditos tacones, observé la decoración en la sala por unos instantes antes de escuchar los pasos detrás de mi.
- Ve a mi oficina, necesito hablar contigo -dijo Mark antes de continuar caminando.
- Si señor -no sabía que es lo que deseaba decir, pero debía acatar su orden.
Subí los escalones directo a mi habitación para dejar los zapatos y el bolso, observé por la ventana la hermosa luna que predominaba en el cielo, tan brillante... salí nuevamente de mi habitación casi al instante que Jason pasó delante de la puerta. La convivencia no ha sido fácil entre los dos. Y todos lo sabían.
Alcancé la oficina de Mark cinco minutos después y me dispuse a tocar, escuché su voz que me autorizó entrar y lo hice; estaba firmando un par de papeles cuando tomé asiento en la silla frente al escritorio... "Increíble. Este tipo no descansaba del trabajo ni siquiera en Navidad".
- Primero que nada -comenzó- Permíteme felicitarte. Tu comportamiento esta noche fue excepcional, me alegra que inicies a tomar una buena actitud.
- Para mi mala suerte, no me queda de otra -dije frustrada, solté un suspiro- Sin embargo, puedo "ser" yo misma en esta mansión.
- Nadie te va a negar aquello -reconoció Mark- La segunda razón por la cual te llamé, se trata acerca de tu 'relación' con Jason.
Mi semblante cambió, sabía a donde quería llegar con esto: Seamos honestos, nadie en el mundo puede fingir llevarse con la persona que casi te mata todo porque es tu hermano y no lo sabías.. es como decirle a dos enemigos que hagan las paces porque tienen lazos sanguíneos.
Éramos distintos, pero iguales a la vez en cuanto a nuestra forma de ser.. luchamos por sobrevivir, por hacernos un respeto entre los demás.
Y porque no había ninguna manera que nos aceptáramos como hermanos.
- Nada cambiará a la manera en la que nos tratamos -dije luego de un silencio- Y es evidente que harás que cambie de opinión. Prometí no meterme en problemas en cuanto a él, y lo estoy cumpliendo; así que todo seguirá exactamente como hasta ahora.
- Créeme que me hubiese gustado que te enteraras de otra manera sobre esto -dijo, posando sus ojos en mi- Pero las cosas así han sucedido, no puedo devolver el tiempo, mas te pido que traten de arreglar sus diferencias.
- Mark, tú más que nadie sabe que esto no será fácil -le recordé- En los entrenamientos estuvimos a nada de matarnos. De acuerdo, quizá me defendió de aquel imbécil que trató de deshacerme de mi...
- En cierto punto, le debes que aún estés viva -su tono de voz fue un poco más serio esta vez.
- Lo siento... -murmuré, desviando la mirada- Únicamente trataré de mostrar interés cuando sea necesario, no quiero ningún tipo de contacto con él.
- Me gustaría saber hasta qué punto funcionará... -abrió uno de los cajones del escritorio y sacó una caja rectangular que puso encima de éste- Esto es para ti.
- No es necesario que gastes tu dinero en mi.
- Te he llegado a tener afecto, Nicole; independientemente de tu comportamiento en esta casa, eres una chica valiosa en todos los sentidos. No fue nada.
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Broken © (2da parte de Stalker Love)
VampireAsegúrense de leer la primera parte de esta historia, «Stalker Love». No. Eso debía ser una equivocación... - Mark.... -aquel pensamiento se inició a hacer presente. - Madeleine y Sebastian Montenegro. -y entonces todo cobró sentido: las imágenes, l...