Capítulo Cincuenta y Uno.

944 107 8
                                    

-Viejo, caí como un saco de papas, que humillante.. -Serbia bufó acomodándose mejor en la cama de hospital que le habían dado pues tendría que quedarse hasta la mañana siguiente para que lo monitorearan por si había un efecto secundario en el tranquilizante que le lanzaron em un dardo-.

-Al menos sigues vivo, da igual si te patearon el trasero -El azabache sentado en la misma cama le palmeó la pierna mientras revisaba en su móvil los mensajes de sus jefes, su pareja lo esperaba en otro consultorio del piso Omega aprovechando en hacerse una revisión antes de su Celo-.

-..No ayudas mucho, ¿Sabes? -El Alfa de ojos anaranjados lo miró con desgana, tal vez su le hubiesen disparado sería menos vergonzoso estar en el hospital con todo y bata blanca llevando una bolsa de suero-.

-Si, pero Italia se hubiese reído en tu cara luego de preguntarte si estabas bien -Rusia sonrió de lado tomándose una fotografía con el de parche para enviársela al mencionado, eran como dos hermanos más para él-.

-¿Y nuestro payaso honorario dónde está? -Bostezó el serbio arqueando una ceja puesto a que se le hacía extraño que este no llegase burlón trayendo algún globo de helio con alguna frase de mierda como "Recupérate abuelita" o "Felicidades por la bendición" como solía hacer cuando alguno se rompía algo en entrenamientos-.

-Estuvo haciendo papeleo todo el día, así que lo dejaron retirarse antes y se fue con Japón a descansar -Le explicó el de piel roja recibiendo un mensaje de Alemania avisándole que ya lo esperaba en el pasillo para cuando terminase de charlar con su compañero- Tengo que irme ya, Ale me está esperando afuera-.

-Ya me di cuenta que moriré solterón -Serbia dramatizó abrazando una almohada pero luego soltó una risa baja y miró otra vez al más alto que negaba con gracia- Salúdalo de mi parte.

.   .   .

-...La verdad, no entiendo nada de esto -El Alfa miró una vez más los papeles que le había entregado su pareja pero aún no sabía mucho de la anatomía interna y sistemas de los Omegas aunque en su tiempo de relación había aprendido bastante más de lo que sus padres llegaron a enseñarle como parte de su educación-.

-Dice que ya comencé a ovular y por lo tanto mi Celo empezará desde la noche de mañana -La explicó el de ojos esmeralda señalando una gráfica de colores con una flecha roja apuntando hacia arriba con alti bajos según el mes-.

-Cada vez se adelanta más, ¿Eso es normal? -Tragando en seco miró algo preocupado a su Omega, podría ser algún tipo de desajuste hormonal o a causa de los pasados síntomas de falso embarazo de hace dos meses-.

-Si, es que.. es temporada perfecta de concepción gracias a la Primavera.. -Alemania sonrió apretando un poco los labios, en ese tiempo si no habían cachorros el lívido aumentaba como respuesta hormonal, así que iba a estar algo intenso a partir del Viernes- Pero todo lo demás está perfecto.

-Oh.. entonces está bien, me alegra de que no sea algo de lo que preocuparse -Suspiró el eslavo estirándose un poco para deshacerse de la tensión antes de abrazar a su amado, dándole un par de pequeños besos en los labios- Te amo..

══════ •『 ♡ 』• ══════

El enmascarado caminaba a paso sigiloso entre los pasillos de luces tenues olfateando las habitaciones aledañas hasta dar con la que buscaba, empujó la puerta entre abierta con cuidado y observó al balcánico acostado de lado en su cama blanca abrazando una almohada, habían algunos globos pequeños y un par de macetitas con flores plásticas siendo probablemente regalos de sus conocidos. Dio algunos pasos más hasta quedar a su lado y se inclinó apreciando su cabello algo despeinado por las vueltas que se seguro había dado mientras dormía, eso le generó una pequeña sonrisa cubierta por su máscara azul sin expresión pero aún así se permitió acariciar con su mano enguantada la mejilla ajena de quién en medio de su sueño abrió ligeramente los labios tentándolo a besarlo y por más que quisiera no podía debido a que dejaría su ADN además de su obvio registro en las cámaras del hospital, así que se resignó a dejarle junto a su almohada la rosa que le había llevado como disculpa. Marchándose de la misma manera en la que se había colado en el complejo hospitalario a través de la azotea, en esta lo esperaba Naranja como siempre siendo su mano derecha.

-¿Todo bien ahí abajo, campeón? -La de piel blanquiazul preguntó acercándose para así bajar luego las escaleras de servicio hacia el callejón que daba para su ruta de cortes preferida más rápida hacia la mansión-.

≪Supongo, se ve muy lindo cuando duerme..≫

Brasil se rascó un poco el cuello, quería sacarle una fotografía para tenerla de recuerdo consigo pero eso ya hubiese sido muy de acosador y no quería asustarlo.

-Cuidado se te cae la baba, lástima que no la tengas tan fácil por su trabajo, pero no te desanimes -La Delta le dio una palmada amistosa en el hombro y se dispusieron a dirigirse a su hogar con los demás-.

Al llegar ninguno de los Colores estaba a la vista y solo el británico y Clara estaban en la sala viendo películas con los cachorros que aún no habían conseguido hogar, obviamente no podían quedarse con todos los niños que rescataban así que tenían su propio sistema estricto de adopción donde se aseguraban de que estos terminasen con una buena familia de moral correcta que diese reportes semanalmente de que todo estaba correcto.

-Sombra Dos los estuvo buscando para la reunión, aún están a tiempo de alcanzar el plazo de espera, vayan ya -Croacia los hizo caminar hasta la escalera del sótano con empujones no muy fuertes para que se apresuraran-.

Un Buen ALFA (RusGer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora