Capítulo Cincuenta y Siete.

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A la mañana siguiente en el rascacielos Alemania llegó algo más temprano para poder hablar con su tío, así que lo buscó en su oficina encontrándoselo acostado en su sofá medio dormido y con apariencia de haber pasado toda la noche allí.

-Tío.. tío Weimar -El menor se acercó despacio luego de cerrar la puerta con cuidado de no hacer mucho ruido, el contrario parecía cansado por necesitaban hablar respecto a los cambios ocurridos en su vida para que no hubiesen mal entendidos.. además que era lo más cercano a una figura paterna que tenía-.

-Ahora no, vuelva luego.. -Balbuceó este soñoliento hasta que sus ojos ligeramente abiertos notaron de manera borrosa que se trataba del alemán, a lo que se estiró y sentó con pereza para atenderlo- Mm.. ah, mi niño, ¿Qué ocurre?

-Yo.. quería hablar contigo sobre un par de cosas importantes.. -Sus ojos esmeralda pasaron al Alfa en lo que se sentaba en un sofá más pequeño a una distancia relativamente cercana debido a que ya poseía más confianza para acercarse a sus conocidos de esa casta- Ahm.. Russland y yo estamos comprometidos..

-..Debo de seguir dormido, este sueño no me está gustando mucho.. -Weimar tronó un poco su cuello bostezando, no era nada malo pero igual se negaba a creer que el menor había dado ese gran paso.. para él aún era un niño-.

-Tío yo... estoy esperando un cachorro de Russ, lo confirmamos con una prueba anoche.. -Siguió hablando porque era mejor decir todo de una vez, entrelazó sus manos y se encogió de hombros mirando al suelo esperando por lo menos no recibir un grito-.

-........ -El de traje arena se levantó tembloroso aproximándose a su familiar hasta quedar arrodillado frente al más bajo, sus nerviosas manos se posaron en su vientre aún plano como si estuviese tocando cristal y subió su mirada acuosa hasta la ajena- .. Un... un bebé, ¿En tu pancita?..

Recibió un asentimiento leve del Omega a lo que soltó un pequeño sollozo sentimental y lo abrazó apoyando la cabeza en su pecho, oyendo sus latidos un poco desbocados por el nerviosismo pero ya calmándose ante la muestra de afecto.

-¿Mi pequeño cachorro burbuja en qué momento creció tanto?.. -Lloriqueó el de ojos cielo antes de tomar su móvil de su bolsillo para marcar el número del de parche azul que inmediatamente le respondió- Cielo sube postres de la cafetería, vamos a desayunar en mi oficina con Deutsch.

-..¿Cielo? -El nombrado presente parpadeó alzando las cejas con sorpresa, no sabía que su tío tuviese una pareja en el rascacielos, por ello comenzó a sentir curiosidad a respecto-.

-Ah.. al parecer también tengo un par de cosas que contarte mi niño -Weimar rió bajo alzando los hombros un momento, iba a ser una charla un poco larga y luego ya buscaría al ruso para.. hablar un rato respecto a su adorado sobrino-.

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-¿Entonces América y tu tío son destinados?.. -El de piel roja casi había dejado caer su almuerzo cuando Alemania le contó aquello, sin duda era bastante sorpresivo siendo los dos Alfas dominantes pero luego comenzó a recordar aquél día que el mayor vino buscando al germano y posteriormente las miradas que se daban-.

-Me tomó tres pastelillos procesarlo, pero si -Dio otro bocado a su guiso de pollo, la comida le sabía particularmente buena aunque había dejado de lado su gusto por el cereal, pero mientras no comenzase a vomitar nada estaría bien con los cambios-.

-¿Y quién crees que.. -De soslayo y con curiosidad el más alto miró a su pareja, pensando fugazmente en quién tomaría el papel de "Omega" en esa relación tan extraña, de ser su jefe.. a Serbia e Italia no se les acabarían los chistes al respecto-.

-No tengo ni la menor idea -El tricolor terminó su último bocado y acarició su estómago abultado por la comida y sonrió pensando en que a más tardar dos meses ya se vería así de ligeramente redondito por su bebé creciendo- Pero estoy muy feliz por ellos, veo que se quieren mucho y están cómodos uno con el otro.

-Pues si, América está menos gruñón que antes, Italia dijo que seguro había comenzado a inhalar "Polvos mágicos" en su oficina -Rusia intentó no reír muy alto recordando esa conversación en la sala de vestidores, el equipo dijo muchas tonterías y callaron de golpe cuando Egipto entró buscando a una de sus subordinadas que también había estado soltando chistes-.

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El primogénito y sus hermanas iban saltando por toda la sala mientras chillaban como niños y el asiático le daba un abrazo cariñoso al tricolor que sonreía cómodo por la buena aceptación de la noticia, URSS se metió a la cocina para hacer un pastel de celebración y extrañamente el Delta aún no llegaba a casa a diferencia de su melliza que había vuelto a la hora usual.

Pero todos los demás estaban alegres por la futura llegada del nuevo integrante de la manada a la que había sido unido oficialmente Alemania recibiendo la bendición de los padres de su prometido.

-Ay Ale eres tan lindo, estoy seguro que su cachorro será precioso, aún es el único pequeño de la familia así que todos te apoyaremos en cuidarlo cuando necesites un descanso.. créeme que la crianza es dura cuando comienzan a caminar y llevarse cosas a la boca -China sonrió y acarició el cabello ajeno como el de uno más de sus hijos, ya había conocido la historia tras sus bonitos ojos tranquilos así que no podía evitar querer protegerlo también-.

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Las luces se encienden, el reloj inicia su cuenta regresiva mientras los oprimidos van tomando uno a uno sus máscaras.. Colores, Tonos, Sombras y Fantasmas de la sociedad.

Todos aquellos que vivieron bajo la bota de los Alfas en el poder o en sus vidas, se mueven entre la oscuridad pasando sus voces en susurro para que el llamado se extienda a los necesarios, el gran día se acerca.. cuando caerán los mentirosos.

Un Buen ALFA (RusGer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora