Capítulo Veintiuno.

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Tras un rato sintiéndose extraño decidió seguir a Rusia al segundo nivel para ver los retratos y pequeñas pinturas de las que le había estado hablando previamente, la casa era bastante amplia en si por lo que la habitación también así que pudo dar un pequeño paseo mirando las fotografías colgadas en lo que el Alfa rebuscaba en su closet. Ante una extraña presión en el pecho decidió sentarse para ver si pasaba pero esta fue aumentando hasta que su piel se sintió a una temperatura mayor y tragó en seco respirando profundamente, pocos momentos después removió sus piernas sintiendo cada vez más fuerte el Aroma del mayor en la habitación.

-Al fin, ya encontré algunas y creo que debo limpiar un poco ese baúl -Entre una risa baja el de piel roja salió haciendo a un lado su ropa colgada para acercarse hasta su cama en la que parecía encontrarse incómodo el rubio- ¿Alemania?..

No recibió respuesta verbal de este sino que fue la manera en la manera en la que se mordió el labio lo que lo hizo preocuparse un poco, el alemán movió la mano que tenía sobre sus piernas juntas y dejó ver que el pantalón de su traje estaba algo húmedo en cierta zona que le causó un repelús al eslavo. ¿Acaso el celo del Omega se había adelantado justo ahora?, soltó lo que tenía e intentó pensar en cómo sacarlo de la casa sin que nadie de su familia lo viese así pues.. mierda, el menor se había dejado caer entre las mantas y estaba frotándose sobre ellas tal como recordaba haberlo visto hace un mes.

-Trataré de buscarte algo de ropa, por favor solo.. no vayas a hacer ruido -Se lo pidió casi en un chillido nervioso volviendo a su closet para buscar alguna prenda antigua de cuando era más joven y por lo tanto más bajo, por momentos lo veía de soslayo y este se removía mordiendo su labio obedientemente para que no se oyesen los jadeos que comenzaba a soltar-.

Antes de caer en desesperación pudo encontrar un pantalón de pijama que solía usar a los dieciséis y le agregó una polera del montón de ropa que movió en su búsqueda, el tricolor las recibió aún un poco consiente y se vistió con eso en lo que el contrario se cubría los ojos dándole la espalda, pero su intento de no ver más de la cuenta sería en vano ya que el de ojos esmeralda lo empujó a la cama haciendo que cayese sentado y se trepó sobre sus piernas para abrazarlo por los hombros robándole un beso intenso que Rusia intentó no corresponder pero la lengua ajena acariciando sus labios lo hizo olvidarse por un momento hasta que se separaron un poco para respirar. Entonces volvió en si e intentó acostarlo para así atarlo con las sábanas y que se quedara quieto hasta que su familia se fuese a dormir, con la mano libre le envió un mensaje rápido a la de piel verde para que dijera que debido al cansancio del día su invitado se había quedado dormido en su habitación por lo que se quedaría con él para acompañarlo. Mientras intentaba sujetarlo del pecho el Omega tomó su mano y le dio una lamida coqueta que casi infarta al más alto cuyo cuerpo estaba a nada de perder el control para comenzar a soltar feromonas de excitación como las de su pareja que eran oportunamente opacadas por el supresor de Aroma.

-Alemania.. por favor contrólate un poco.. te lo pido, estamos en mi casa -Dijo en un gruñido bajo casi sin voz cuando el nombrado comenzó a lamerle el cuello en lo que con sus delgadas y largas piernas le retenía la cadera, si antes no tenía una erección.. ahora se le estaba formando por sentir la del más bajo además del estímulo constante-.

-..Rusia.. hace calor -El germano le gimió despacio al oído, frotándose un poco contra la pierna del contrario que se tensó y maldijo unos segundos, pero su mente estaba en otro espacio así que siguió buscando satisfacerse un poco-.

Antes de que el mayor de los hermanos presentes pudiese volver a rogarle que se mantuviera quieto, algunos pasos subiendo la escalera cortaron el silencio del pasillo hacia las habitaciones del fondo por lo que al parecer se trataba de sus padres y para evitar que su novio volviese a gemir estampó sus labios contra los de él para mantenerlo ocupado el tiempo necesario hasta que cerraran su puerta o subiese el resto a dormir... aunque de algún modo terminó perdiendo un poco la noción tomándolo de la espalda y la cadera al de piel amarilla para apegarlo a su cuerpo.

Se separaron en un jadeo y le cubrió la boca con su diestra agradeciendo oír las voces de sus hermanos subiendo también mientras bostezaban dispuestos a entrar a sus habitaciones, así sólo tendría que esperar un poco más para salir de la casa rumbo a la del germano.

-Cariño.. shh... -Algo agitado el ushanka gris le dio pequeños besos en la boca para distraerlo mientras lo acariciaba en la espalda bajo la polera de su pertenencia, lo cual pareció entretenerlo un poco en lo que correspondía y la última luz del pasillo se apagó- Falta poco..

Contaba tortuosamente los segundos que pasaban sin dejar de acariciar el cuerpo más pequeño evitando las zonas tabú o las reactivas para mantenerlo en silencio, suspiró aliviado cuando la infinitamente lenta media hora pasó. Entonces tomó uno de sus abrigos más grandes y envolvió al Alemán con este alzándolo en brazos haciendo que le rodeara la cintura con las piernas para que no se le cayera mientras bajaba despacio la escapera rezando para no hacer ruido, al llegar hasta la entrada tomó las llaves del auto de su padre China el cual era pequeño y solo en ocasiones lo usaba para salir a hacer compras o movilizar a Taiwán, abrió la puerta lentamente y de la misma manera la cerró para caminar con rapidez a abrir el auto y dejar a su pareja en el asiento de copiloto, así sacando su móvil dejado un rápido mensaje a su padre soviético de que irían a casa de Alemania debido a que este fue llamado por un asunto de su trabajo cuyos documentos relacionados estaban allí y lo llevaría por la tardía hora que era.

Con la excusa ya lista entró también al auto y lo encendió tras asegurar primero al de esmeraldas con el cinturón de seguridad pues al estar sentado se rozaba más y eso lo hacía removerse, las calles vacías más fáciles de recorrer por lo que comenzó a conducir intentando apresurarse pero de igual manera teniendo mucho cuidado. Mientras que en uno de sus movimientos incómodos la pierna derecha del de piel amarilla rozó el miembro de Rusia que ya con más libertad soltó un jadeo y lo miró de soslayo intentando convencerlo de que no lo hiciera otra vez, pero tentado por oírlo más el menor continuó moviendo su pie sobre aquella área hasta ponerla lo suficientemente dura para que fuese incómodo para el aludido.

-Alemania, no.. si sigues así juro que.. -Se logró detener antes de soltar una vulgaridad animada por la excitación y el rostro del rubio tampoco ayudaba mucho, literalmente tenía la lengua afuera jadeante con un sonrojo notable- Ya casi llegamos por favor no lo hagas más difícil para mi..

Le faltaban idiomas y plegarias para pedirle al universo que llegara ya a la jodida calle centáurea para meterlo a su habitación y que se diera un baño para así darle otra dosis del supresor antes de mandarlo a dormir, necesitaba pensar en algo si su Celo estaba tan fuerte y él no tenía supresores de Alfa no tardaría en aparecer el suyo como la vez anterior, por suerte en medio de sus pensamientos rápidos llegó a donde debía bajando con prisa tras aparcar bien para abrir la otra puerta y tomarlo en brazos nuevamente mientras aseguraba el auto de su padre y buscaba en su bolsillo las llaves de la propiedad.

Un Buen ALFA (RusGer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora