Baekhyun siempre quiso casarse por amor, pero pertenecer a la clase alta implicará que deba unirse con alguien a quien no ama, y las circunstancias provocarán incluso una creciente antipatía entre los recién casados.
La barrera entre el odio y el am...
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Cuando Chanyeol se acercó de nuevo a Baekhyun y los otros chicos, su expresión había vuelto a la normalidad. Estaba serio, aunque no mostraba su carácter duro.
-¿Está todo bien? -Preguntó el doncel al ver la angustia en el rostro de su marido.
-No estoy seguro. -Contestó Chanyeol, con sinceridad. -La señora Min quiere convocar una reunión con todo el consejo.
-Pero apenas hace poco tuvieron una, ¿no?
El castaño asintió. -Al parecer quiere discutir algo que le inquieta acerca de los últimos reportes contables. No me dio detalles todavía. -Explicó, brevemente. -Pidió que la reunión fuese en la sede de China, así que mañana temprano voy a tener que viajar. Quizá esté fuera del país por un par de días. -Informó.
-Ya veo...
-¿Estarás bien quedándote solo en casa?
-Por supuesto. No tienes de qué preocuparte.
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Más tarde, cómo era su costumbre, recibió una llamada de su amante.
No le había extrañado no verlo en la subasta, puesto que los Kim y los Oh no tenían una buena relación.
Los días anteriores, Sehun le había llamado a diario, pero Baekhyun no había tomado ninguna de sus llamadas. Esta vez fue la excepción. Su ánimo ya no estaba tan deplorable como para ver a su amado.
-Hola... -Habló despacio al teléfono. A pesar de que su esposo y él aún dormían en cuartos separados, temía que si hablaba demasiado fuerte, se pudiera escuchar su conversación.
-Vaya, finalmente te dignas a responderme. Pensé que no querías volver a saber de mí. -Se quejó el pelinegro, al otro lado de la línea.
-Lo siento, no me había sentido bien.
-¿Y ahora?
Baekhyun suspiró, sin estar realmente seguro de cómo se sentía. Todo era muy confuso y su cabeza estaba llena de tantas cosas... -Todavía se siente raro, pero creo que estoy un poco mejor.
